CAPÍTULO 24- El ojo de Desmolfer. Parte 1.

CAPÍTULO 24- El ojo de Desmolfer. Parte 1.

(Pov- Daniel.)

(Mundo 20.)

Desde que tengo memoria, suelo despertar dos o tres veces entre mis horas de sueño, porque me gusta soñar cosas lindas y dormirme mejor otra vez. No sé por qué, pero me siento más cómodo despertando en medio de la noche y seguir durmiendo, me hace dormir más rico.

Despertar, imaginarse algo lindo, y seguir durmiendo. Uno de los mejores placeres de la vida. Pero hoy no puedo darme el lujo de hacer eso. Ya desperté y, aunque sigo teniendo sueño, no puedo seguir durmiendo.

Ah, en un minuto me levanto, necesito un poco de paz antes del desastre.

Abuela, espero que estés bien.

Miro el techo. Vaya, vaya. Una lagartija. Que lindo.

Jeje. Me trae lindos recuerdos. A mi abuela le dan mucho asco las lagartijas, pero sabe perfectamente lo importantes que son para controlar plagas, y por eso no hace nada para sacarlas de la casa.

Juzgar por la apariencia está mal, otra de las grandes enseñanzas de mi abuelita... Ella no merece sufrir.

Madre, por favor, no le hagas ningún daño. No lastimes a mi abuela. No lastimes a mis amigas. No lastimes a Cris. No lastimes a Daniela... No lastimes a nadie. Tengo miedo de lo que haría si algo malo les sucediera a ellos por mi culpa.

—Oh, estás despierto.

Bravo me sacude los hombros. ¿Cuánto tiempo dormí? Tengo sueño, pero puedo soportarlo. Creo que tendré que luchar solo con mi espada y guardar los hechizos como un recurso de emergencia. No puedo desperdiciar energía.

—Vamos, ya es hora.

—Sí, gracias.

—¿Quieres un café?

—Con una manzana, por favor, si es posible.

—Jeje. Que educado eres.- Dijo, acariciando mi cabello.

Se fue para ir por esas cosas. Según escuché, comer una manzana es mejor que tomar un café por las mañanas, te despierta mejor. Así que, si me como una manzana y me bebo una taza de café, ¡me despertará el doble! Espero que mi lógica esté correcta.

Me levanto del sofá y me estiro. Mmm. Ahhh. Hmmh. Ñam, ñam. Me tapo la boca y bostezo. Ñam, ñam... No puedo seguir evadiendo el tema.

Mataré. Tendré que matar humanos en esta pelea.

Un pequeño precio a pagar con tal de liberar a un país, lo sé, pero tendré que pelear usando mi espada. Les cortaré las cabezas o los partiré a la mitad. Mataré a humanos de esa horrible manera.

Mis manos tiemblan con tan solo imaginarlo. No puedo darme el lujo de pelear manteniendo mi poder al mínimo para no matarlos, mucho menos con humanos con poderes que desconozco.

Además, ellos posiblemente ya han matado a humanos inocentes, no merecen seguir vivos.

... No sé por qué ya no me siento culpable ahora. Ahora siento... que realmente quiero matarlos.

Agito rápidamente mi cabeza. ¡No, no, no! ¡No pienses igual que tu madre, idiota!

—¿Te sientes bien?- Dijo Bravo, ofreciéndome una taza de café y una manzana.

—Solo estoy teniendo algunos dilemas morales. Gracias por preguntar.

Tomé la taza. Veamos. No, no está tan caliente.

Me la tomé de un solo trago. ¡Ay, ay, sí estaba algo caliente! ¡Me arde la garganta!

A-ahora la manzana. ¡Perdón por esto, abuela, pero no tengo tiempo!

Comencé a comerme la manzana lo más rápido posible y sin tener tiempo para disfrutar de su sabor. ¡Uno de los peores pecados del mundo, comer sin disfrutar! ¡Lo siento, abuela, pero realmente no quiero desperdiciar más tiempo!

Me trago el último pedazo y suspiro. Ah, bien, ya tengo algo en el estómago.

—Creo...

Bostezo y me rasco la cabeza. Sí... Ah... Bien. Ahora sí, ¡me siento despierto!

—Creo que ya tengo suficiente energía.

—Salmes y Diepo están preparando las armas. Milfa y Tilfa están preparando los autos para irnos.

Ah, nombres raros. Bueno, mejor no digo nada al respecto, cada mundo es diferente. Tal vez compartamos algunas cosas, pero todos son diferentes.

—Está bien... ¿Y Nismei?

—Ella está cocinando.

Snif, snif. Que rico huele.

Volteo y veo a Nismei cocinando. ¿Tenemos tiempo para comer antes de irnos? Ay, debí haber disfrutado de la manzana y el café.

Mi estómago gruñe. Tengo hambre y huele delicioso. Me pregunto si la comida de este mundo es diferente.

—Vaya, vaya... Bueno, regresando a lo importante, ¿en dónde está el dictador?

Primero está la misión, después la comida.

—Ven, te explicaré el plan.

Bravo se dirige a una mesa y yo lo sigo. En la mesa hay dos enormes planos en donde está plasmado una estructura enorme. Uno tiene plasmado el área vista desde arriba y el otro tiene plasmado una casa enorme. El área es cuadrada y en el centro hay una enorme casa de unos 10 pisos.

... Ah, ni para qué lo intento, no entiendo tanto estos planos. Tiene muchas palabras escritas en el idioma de este país (que no conozco), muchos números, líneas difíciles de comprender, bla, bla, bla.

Me pregunto si debo conocer la estructura. ¿No sería más fácil ir directo hacia él? ¿Estará escondido en alguna parte del edificio?

—Mira atentamente, la base del dictador es, como te puedes dar cuenta, enorme. Dentro de la base hay cientos, posiblemente más de 2,000 miembros de Froulen, esperando órdenes.

¡¿Más de 2,000 personas con poderes?! ¡Ay, ay, me duele el corazón! ¡N-no te espantes todavía, tal vez no sean poderosos, o al menos no tanto! M-mientras me informe de los poderes poderosos, creo que estaré bien.

¡Además, puedo atacar a distancia o volverme invisible...! Ay, no, ya usé el hechizo de invisibilidad, ya no puedo usarlo hasta que pasen 24 horas. Ay.

—¿2,000? ¿Siempre están ahí?

—Sí.

—¿Por qué? ¿Simplemente se quedan ahí, esperando órdenes? Suena aburrido. ¿Tienen alguna otra función? ¿Protegen al dictador?

—Él no necesita la protección de nadie, así de peligroso es. Los miembros de Froulen son miles, aproximadamente 5,000, y están ubicados en cada sector del país. Incluso en los pueblos más pequeños, hay uno o dos miembros que lo controlan.