Todo era confuso...todo cambio de un día para otro, aquí empezó el DAÑO.
Pareciera que tuviera el mejor descanso del mundo, era como si mis energías se habían restaurado al cien por ciento, pero había un problema y era que siempre tenía la misma pesadilla. El sueño que había experimentado en Haeundae Beach, pero se hacía cada vez más intenso, cada vez lo soñaba con más detalles. Soñaba que Haneul tenía sangre en todo su cuerpo, un cuchillo, ella estaba sangrando por todas partes y no sabía quién era su asesino. Primero quiera salvarla, buscaba ayuda, pero nadie acudía al auxilio. Después quería encontrar a su asesino, pero jamás lo hallaba.
Lo que más me atormenta es que tanto ella como su padre, y las personas a su alrededor decía las mismas palabras que últimamente me están atormentando "SACAME DE AQUÍ" y en el último sueño dijo algo similar "DÉJAME SALIR"
¿Qué hay de malo conmigo? ¿Por qué tengo estos sueños? Incluso me siento mucho más extraño, a veces me siento mucha ira, me siento molesto por todo y en las mañanas siempre despierto sudando y de golpe. Ni siquiera podía despertarme en la madrugada para interrumpir esos sueños, los vivía cuando mi cuerpo quiera despertar, como si nada, pero mis descansos y energías me rinden de una forma increíble. ¿Acaso estas pesadillas son buenas para mí?
No pude soportar estos sucesos y se lo dije a Haneul. Ella se preocupaba más por mí, pero me decía que nada de eso es real. Incluso me pregunto si había algo en esos sueños que significaban algo para mí, si fuese la metáfora de algún momento que haya vivido en el pasado o algo que me molestaba del presente, pero negaba todo, nada de esos sueños había vivido algo similar. Lo único malo que viví fue aquella vez la situación con mis padres, pero eso no es lo que la pesadilla me da a entender. Es otra cosa tal vez. ¿Un presentimiento?
Incluso una ansiedad me llega de la nada cuando lo recuerdo o pienso en ello. Me da la sensación de que algo está mal. Así estuve una semana entera, ni siquiera Haneul me hizo sentir bien, nada me hacía sentir bien, pareciera que estaba muerto en vida.
- ¿KAI DONDE ESTAS? -Escuche a mi princesa gritar un tanto alterada. Pero no podía encontrarla.
Me encontraba una vez más en la playa, en la arena que daba paso al mar brillante. Ella me gritaba una y otra vez, pero por más que trataba de hallarla no la encontraba, me temía que estuviera en el mar. Los gritos se hacían más fuertes y pidiendo auxilio desesperadamente, pero sin éxito al encontrarla.
Me metí al mar, su voz hacía eco hacia el mar. A lo lejos veía una silueta, no la distinguía, pero estaba seguro que era ella. Por más que nadaba rápido no la podía alcanzar. Se hundía poco a poco, no me quedo de otra más que sumergirme al fondo del mar, pero una vez que lo hice el mar cambio de color a un tono rojizo, como si estuviera en otro lugar que no fuese el mar. Miré alrededor sin encontrarla, pero aun así seguí nadando.
A lo lejos creí verla, así que nade más rápido hasta alcanzarla, pero mientras más me acercaba más se desvanecía como un fantasma haya que ya no había nadie. ¿Estaba muerta? Unas manos me envolvieron atrás de mí, eran sus manos. En cuanto voltee a verla su rostro estaba sin vida. Su cadáver estaba postrado delante mío.
Di un grito y me hallaba en el suelo alterado, estaba respirando con dificultad. Cuando recupere un poco el aire, me percate que estaba en mi sala de departamento, todas las cosas estaban destruidas, las sillas en el suelo, mi mesa de cristal rota, vidrios en todas partes y... ¿Sangre? Había sangre en los vidrios y una vez que tome un trozo de ella, mi mano también tenía sangre, de inmediato me había dado cuenta que mi ropa estaba llena de sangre. Corrí al baño, todo mi cuerpo lleno de sangre de inmediato me revisé a que tuviera una herida, pero no hallaba nada, estaba ileso ¿Cómo es posible? ¿Alguien entro a robarme? ¿Se llevaron algo? Ni siquiera tengo algo de valor... ¿Mi carro?
Salí de mi apartamento al garaje, mi coche estaba ahí, no hay nada...
- ¡POR DIOS! ¡¿Señor se encuentra bien?! – Era mi vecino. No pude contestarle, estaba desconcertado. De la nada sentí mucho cansancio y mi vista se nublo.
A mi alrededor escuchaba una sirena muy ruidosa y en seguida de murmullos al igual que había mucho movimiento. La vista la tenía nublosa, pero poco a poco todo se iba aclarando.
- Señor, necesito mantenga la calma – Me apuntaba con una luz a mis ojos.
Solo escuché eso del médico, sentí mucho sueño y lo demás fue historia.
De la misma manera desperté en una camilla, era un hospital. Veía todo con confusión y ni siquiera sabía cómo es que llegue ahí. No recordaba absolutamente nada, como si un fuerte golpe en la cabeza y daba amnesia.
- Buenos días Joven...Kai...está en el hospital... -Antes de que continuara, lo cuestione.
- ¿Cómo llegue aquí? – El medico se mostró un tanto confundido.
- No sabemos que le paso, pero tenía sangre en todo su cuerpo, pero no tiene una lesión, casos como esos debemos llamar a la policía. – Mire atrás del doctor, había dos oficiales afuera de la habitación.
- Yo no recuerdo nada...
- Buen día Señor Kai, quiero hacerle unas preguntas – Los oficiales entraron abruptamente. - ¿Puede decirnos lo que le paso? – Pensaba, pero no recordaba nada.
- No recuerdo que paso...trato de recordar, pero ni siquiera sé que hice en la mañana...
- Señor Kai, fue encontrado por su vecino cubierto de sangre, su departamento está hecho un desastre, pero no hay indicios de robos ni de una segunda persona en su casa.
No importando lo que dijeran, en verdad sentí un poco de agonía...pero recordé algo.
- Haneul... ¿ella está bien? – Los Policías se cuestionaron
- ¿Quién es?
- Es mi novia...amm...ella y yo estábamos cenando juntos...