—Porque me gustas...
Esas tres palabras habían acabado de sonar en mis oídos, esas tres palabras habían encogido mi corazón y erizado hasta los pelos de mi cuello, solo tres palabras para destruir toda aquella película mental de no ponerme nerviosa, de no tartamudear y de no temblar ante él, toda eso ahora era simplemente un sin sentido. Mi pulso estaba acelerado y aunque suene raro podía sentirlo retumbando en mi cabeza y por supuesto que debía de tener la cara hecha un tomate, yo lo miraba a los ojos él ya no me miraba,me devoraba que era distinto y yo no podía mover un centímetro de mi cuerpo,estaba paralizada en ese hechizo que él hacía con sus ojos y lo peor del caso es que no sabía con exactitud si quería que dejara de hacerlo en algún momento.
Entonces volví a la realidad, volví a recordar a Sofía, volví a recordar porque empecé esta conversación y me disgustó... Me acaba de decir que le gusto, Diablos, y no estaba contenta con eso, bueno no del todo porque una gran parte de mi gritaba de emoción. Agaché la cabeza y entonces miré mis manos que jugueteaban nerviosamente entre ellas, alcé la mirada nuevamente y suspiré
—Esto está mal, yo no puedo gustarte
El me mira extrañado, yo sabía esa no era la respuesta que esperaba, confundido aparta la mirada y sonríe de melancólico — Yo puedo gustarte pero tú a mí no, ahora soy yo quien digo que eso no es justo
Yo me levanto bruscamente siendo seguida por él y niego repetidas veces con la cabeza— No está bien que te guste...eso daña a otras personas — digo en un hilo de voz y entonces observo como oscurece la mirada y va directo al sofá,allí se deja caer, yo me quedo inmóvil en mi lugar y luego de dos largos minutos vuelvo a escuchar su voz
— Rayos realmente estás tan enamorada de ese Shin que ...
—¿Que? Shin no importa...— entonces recuerdo lo que dije antes delante de Erick y entonces recuerdo que el cree que todo es sobre Shin
— Claro que importa, mírate sintiéndote culpable con él porque le gustas a alguien más ¿Está tan arraigado, Nataly?
Yo abrí mis ojos como platos, enserio aveces este chico era único ¿pensaba en Shin? ¿Pensaba que el problema era Shin?
—No es Shin, Abraham...— suspiro con pesadez, me acerqué al sofá y me senté a su lado, necesitaba hablar de ella aunque quedara al descubierto que lo había estado stalkeando— Es Sofía
Sus ojos me miraban con extrañeza, claro que estaría asombrado, él no tenía ni idea de que yo sabía de su existencia
—¿Mi hermana?
— No es tu hermana y lo sabes, es la otra Sofía, la que te llama y tu pierdes el humor, yo vi fotos vuestras en instagram— si quedaba dudas de que era una acosadora ahora estaba aclarado
Él se queda callado pensativo, como si no supiera organizar lo que tenía en su cabeza— Nataly estás mezclando cosas distintas— saca su teléfono y me muestra la foto de alguien en una cama de hospital, entubado e inconciente— Se llama Ashton y es uno de mis mejores amigos, es bombero y en un incendio cayó de un cuarto piso y ahora está así, lleva meses en ese estado y es el novio de mi hermana, cada vez que hay noticias malas o buenas me llama, me duele verlos así, a él luchando por su vida y a ella tratando de no derrumbarse,son muy jóvenes para pasar por esto.
Mi mandíbula nuevamente quiere salirse de mi cara,eso era lo que lo ponía así después de cada llamada...
— La otra Sofía era una chica con la que salía,esa foto tiene algunos meses ya, nos dimos un tiempo hace ya bastante y no hemos vuelto a hablar... Intenté visitarla antes de viajar pero no quería saber nada de mi existencia así que no la presioné— Ahora sí que me sentía tonta, me sentía una idiota y justo cuando iba a languidecer escucho su voz nuevamente— Cielos corazón de pollo, voy a tener que aprender contigo, eres buena en eso de acosar las redes de los demás—dice sonriendo pícaramente
Mi cara era una bomba a punto de explotar, estaba muy apenada- te lo mereces por sicópata
Un cuando iba a decir algo más un relámpago iluminó toda la casa y seguidamente se escuchó un trueno que hizo que mis huesos temblaran
—¡Mi ropa lavada!—él grita y sale corriendo escaleras arriba, yo lo sigo
Un rato después estaba bebiendo una taza de café en la mesa cuando veo la pantalla de mi teléfono alumbrandose, era una notificación del WhatsApp donde mi jefe me decía que me enviaría mi paga a mi cuenta en la tarde, estaba orgullosa de haber terminado los pedidos...bueno tuve ayuda de cierto abuelo sexi, sonrió y salgo del chat de mi jefe, veo la bolita en los estados que me anuncia de que tengo alguno sin ver, así que deslizo mi dedo por la pantalla y claro que tenía que ser de el señorito Abuelo Bomba Sensual rodeo los ojos, tenía que cambiar su nombre de contacto pronto, abro el estado y casi se cae mi teléfono de mis manos, era la foto que había tomado frente al espejo, debajo de leía: La mejor foto de mi vida, que alguien la supere yo tragué en seco sin saber que hacer, bloquié la pantalla de mi teléfono y me acomodé en la silla ¿Que se supone que haría ahora? Él me dijo que yo le gustaba y sabía perfectamente que a mí me gustaba él.... Que pasaría ahora con esto que teníamos mutuamente ¿Que era esto que teníamos? Por un lado estaba feliz de saber que no solo babeaba por alguien que no me notaba, yo le gustaba a él pero por otro me aterraba pensar en que podía dejarme tan destrozada como lo hizo Shin, no hay que ser demasiado ilusos, la cuarentena iba acabar en unos días y nuestras vidas eran totalmente distintas. Mi teléfono vibra y veo un WhatsApp de Erick
Erick: ¿Que fue todo eso de esta mañana?
No sé qué hacen ustedes dos, ya me perdí
En la mañana tu diciendo que Shin era inolvidable ¿Enserio Natalia?
Inolvidable no es la palabra
Y ahora Abo subiendo ese estado
¿Que estás haciendo?
Yo sonreí al ver los mensajes, sabía que estaba confundido, él conocía perfectamente la historia y sabía porqué se fue, también sabía que no estaba enamorada de él aún como para decir que era inolvidable. Mi teléfono vibra otra vez y río al ver su mensaje