Capítulo 62 "Deudas del pasado" Parte 2

~Narra Liam~

Es la primera noche que dormiré en un penitenciario aquí dentro soy un criminal más. No hay distinciones, en realidad si existe el 'lider' pero no presto atención. Tengo que salir de aquí cuanto antes, no espero estar encerrado en este sitio mucho tiempo pero ni siquiera tengo una fotografía de Sarah, de mi hermana y mi sobrino. Me siento fatal sin mencionar mi estupido comportamiento al entrar a la casa donde solo hay una adolescente  menor de edad. ¿Como demonios iba a saber que esa chica planearia esa mierda? Cierro los ojos con fuerzas mientras dejo escapar un suspiro de cansancio
-¿el niño rico no puede dormir?- dice una voz masculina, luego se oyen risas. Ignoro todo tipo de comentarios y burlas. Necesito salir de aquí cuanto antes, es lo único que me importa.

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Es la hora del almuerzo un guardia nos envía al comedor. Todo lo que he visto en películas es muy diferente o lo que veo aquí. Me empujan desde atrás intento no mostrar reacción alguna. No caere en esos juegos tontos, esta claro soy el nuevo y todo será en mi contra.
-¿por que estas aquí? - pregunta un hombre de cabello negro, ojos café y una mirada muy oscura. Es más alto que yo y bastante robusto
-¿según el crimen nos designan mesas especiales?- ironizó, me empuja haciéndo que choque a alguien más ¡mierda me harán un sándwich estos dos grandotes!
-¿te crees gracioso? Haré que tu vida aquí dentro sea una verdadera desgracia, ¿crees que eres mejor que yo por tener dinero y fama? Se como tratar a los idiotas como tu- vuelve a empujarme.
Me siento en una mesa vacía que poco después comienza a llenarse de tipos serios que parecen devorarme con la mirada ¿a caso nadie será amigable como en las series? Supongo que no, la realidad supera la ficción. Un guardia se acerca a mi , todos gritan cosas que no entiendo ni me interesan oír.
Tras el bullicio dice que tengo visita y debo acompañarlo. Me pongo de pie y camino a pocos metros de distancia. Abre una puerta y entro, allí veo a Mike sentado lo imito
-dime que tienes buenas noticias- me apresuro a decir
-hola amigo, no es tan sencillo. Se trata de una menor de edad y hablamos de intento de abuso sexual-
-no debes repetirlo, no quiero oírlo más. Parece una pesadilla que jamás termina-
-estoy haciendo todo lo posible para sacarte de aquí cuanto antes. Será bajo fianza por el momento y debemos seguir una serie de procedimientos pero lo importante es que estés en un lugar seguro- habla serio y asiento.
-¿cómo seguirá todo después?- pregunto
-iremos paso a paso. Primero debemos lograr que revisen a la chica, se niega a hacerlo- comenta
-¿a caso no lo han hecho? - recuerdo que a Sarah la revisaron de inmediato, supongo en todos los casos es igual
-se negó a hacerlo y los expertos le dan un poco de espacio. Si bien es intento de abuso y no abuso las evidencias disminuyen cuanto más tiempo pase- explica
-¿ese es su plan? ¿Y pueden considerarme culpable sin esas pruebas? -
-se las realizarán de todos modos. También harán estudios psicológicos es la suma de varios factores. Se que no lo entenderás por eso es importante ir paso a paso. Confia en mi- asiento, nos despedimos mientras me llevan de regreso a mi celda.

_Horas más tarde_

-Brown ven conmigo, te esperan- me levanto como resorte y sigo al guardia.
En cuanto veo a mi hermana nos abrazamos fuertemente, la extraño tanto.
-¿cómo está Thomi?- le pregunto al separarnos.
-el esta bien- responde limpiando sus lagrimas
-¿y John?- nos sentamos frente a frente
-tambien lo está. ¿Y tu?- inquiere dolida sus ojos se cristalizan nuevamente, su voz se quiebra y comienza a llorar sin poder controlar la angustia.
-tu no por favor, no lo hagas Emma. Eres mi fortaleza - suelto en un hilo de voz
-lo siento no debería llorar delante de ti y me odio por eso pero no puedo más, es demasiado. No puedo verte aquí, con esa ropa. Tu no hiciste nada- la abrazo nuevamente
-hable con Mike y esta trabajando para sacarme de aquí. Confio en que lo hará pronto- intento mostrarme seguro
-te amo hermanito, eres todo en mi vida. Por favor se fuerte allí dentro-
-lo seré enana- sonrió débil.
-estaba pensando en llamar a nuestros padres. Creo que merecen saberlo, papá tiene muchos contactos puede que nos ayude- me pongo de pie mientras camino de un lado a otro
-no quiero que lo hagas. No pueden cambiar el presente, ni siquiera viajaran aquí- respondo molesto
-merecen saberlo-
-no para mí, no espero que lo entiendas pero déjame al menos decidir quién quiero que lo sepa y quien no. Hasta que trascienda- bajo la vista
-no dejare que llegue a los medios. Lo prometo- me imita y toma mis manos. Suelto un suspiro de cansancio
-eso no depende de nosotros Emma. Esta bien puedes decírselo solo a mamá- ella sonrie
-hablare con ella-
Me cuenta que Sarah está quedándose en su casa y se lo agradezco también.


~Narra mamá de Beatriz~

_Dia del plan_

Termino de preparar unos panecillos para el desayuno y subo al cuarto de Beah. Ella termina de cepillar su cabello. Luce triste, su mirada apagada
-buenos días- la saludo mientras empiezo a quitar las frazadas de su cama. Luego retiro las sábanas para llevarlas a lavar.
-hola - responde
-vamos a desayunar- salgo de allí sin esperar respuesta, esos días suele hablar poco y prefiero no molestarla con preguntas.
Preparo café para mi y una chocolatada caliente para ella, se siente a mi lado y sin decir palabra empieza a comer el pan que acabo de preparar
-¿quieres jalea?- le pregunto, niega con la cabeza. En total silencio terminamos de desayunar, lava su taza y luego sale al jardin, observo desde la ventana y la veo jugar con su cachorro. Termino de lavar los trastes y empiezo a organizar la despensa para el almuerzo.
-¡Beah!- grito, poco después entra de mala gana azotando la puerta -ve a la tienda- le entrego una lista
-¿papá donde esta?-
-fue a la ciudad, llegara en un par de horas. Yo debo visitar a Clara para ver si necesita algo- anuncio, ella asiente
-¿el dinero?- inquiere, casi lo olvido busco en mi bolsillo y se lo entrego. Sale de allí, yo camino hacia la casa de mi vecina la cual queda a unos kilómetros.

_Horas más tarde_

Llego a casa y veo un coche aparcado, es familiar verlo allí ya que una vez al mes viene a pagarle a mi esposo. Suelto un suspiro de cansancio, la camioneta de Harry no está y eso solo significa una cosa 'Beatriz y él están solos'
Miro hacia el interior del auto, nada llama mi antecion, entro a casa y no los veo en la sala. Me dirijo a la cocina sin hacer ruido; escucho voces que provienen desde la biblioteca. Me acerco sigilosamente hasta apoyar el oído en la puerta
-que abras la maldita puerta- escucho la voz de Liam
-¿nervioso?- dice Beah divertida, como si disfrutara la situación. En realidad se que lo hace -me vuelves loca Liam, me encantas- no suena a una niña, sino a toda una mujer desesperada por conquistar un hombre. Tapo mi boca sin saber que hacer ¿debería golpear la puerta? ¿Detenerla? Es mi hija y me odiara el resto de su vida si lo hago.
-¡estás loca!- grita él, quizás no deba hacer nada
-tu me vuelves así, quiero que me hagas el amor- insiste ella, mis ojos se cristalizan me cuesta creer que mi niña llegue a tanto. La angustia invade mi pecho
-eso no va a pasar, estoy casado y no le fallaria a mi esposa- intenta abrir la puerta y doy un respingo. Esta cerrada con llaves pero me alejo de allí. Intento controlar mis ganas de llorar, camino hacia el patio trasero de la casa donde tenemos una enorme quinta desde allí nada se oye, empiezo a cortar verduras ignorando lo que ocurre adentro.
Entro a casa minutos más tarde mis manos tiemblan pero intento verme normal, veo a Liam sentado en el sofá, su rostro está golpeado. Harry realmente molesto
-¿Beah?- pregunto
-en su cuarto- responde. Corro allí, ella está de pie frente a la ventana
-¿qué paso?- pregunto aún sabiendo la verdad. Voltea a verme y puedo ver cuanto lo disfruta, puede sonar tonto pero su mirada me asusta
-intentó abusar de mi- esboza una sonrisa -y yo deseaba que lo hiciera pero papá lo arruino- queda seria -¿ por qué tuvo que llegar?-
-yo lo sé... se la verdad- digo, frunce el entrecejo
-¿de que hablas?-
-nadie creerá en ti si disfrutas de la situación. Debes verte avergonzada y dolida. ¿Como puedes mentirme a mi que soy tu madre?-
-¿no se lo dirás a papá?- sus ojos se cristalizan -no lo hagas mamá, por favor. No dejes que Liam me humille una vez más, el me rechazó- comienza a llorar. La abrazo fuertemente
-asi debes lucir, triste y devastada- susurro en su oído -no diré la verdad- finalizo.
-gracias mamá- responde entre sollozos.