In Love with You ©

Capítulo 3: Inocente

Luego de subir corriendo las escaleras, para evitar las quejas de mi madre, me cambié los jeans y tiré los otros lleno de sangre y rotos en las rodillas. Sequé un poco mi cabello, y cambié mi camisa toda empapada por otra al igual que con mis zapatillas.
Cerré mis ojos y suspiré al ver que ya todo está bajo control, obviamente no hablaré de éste día en donde me subí al auto de William, Dios espero no haber contraído alguna clase de enfermedad.
Con cuidado fui hasta mi cama, y me recosté boca abajo estirando lo más que puedo mis piernas, ya que arden a más no poder.
Abrí mis ojos al darme cuenta que no tengo mi celular, quizás debe estar en mi mochila, fui hasta ella abriendo la cremallera torpemente. Revolví los libros de un lado a otro, y me quejé tomando mi cabeza. Está en el auto de Flecher.
Genial, si está la mala suerte y después yo.
Mañana, en el instituto, tendré que hacer la búsqueda implacable de mi bebé, hasta que encuentre al tonto de William y me lo devuelva.
Espero que Lily no me llame o envíe mensajes, nuestras charlas no son tan normales y por más que me importa un bledo, si William los ve o no, mi amiga me matará cuando se entere que un chico leyó sus problemas de "drama-queen".
Sacudí mi cabeza y me fijé en mi otro bebé, mi patineta, suspiré profundo y mordí mi lengua al ver que tendré que llevarla a que me la arreglen.
Bajé las escaleras lentamente con una mueca de dolor, y me sobresalté al oír que hay alguien en la cocina.

-¿Kelly? ¿eres tú? - sentí la voz de mi padre - Kelly - ésta vez me llama para que vaya, y aunque tengo ganas de salir corriendo, mis bellas rodillas no me dejarían. Por lo que preferí caminar lentamente hacia la cocina, y con una sonrisa de oreja a oreja.

-Hola papi - musité y me senté en una silla, mientras pongo la patineta toda rota sobre la mesa de madera - ¿me llevas para que la arreglen? Afuera llueve, y no tengo ganas de mojarme - otra vez, pensé.

Éste alzó una ceja algo preocupado - ¿te hiciste daño? - se arrimó al lado mío y tomó mi mano, la cual está un poco raspada por el golpe.

-Sólo eso - dije tragando la mentira - ¿me podrás llevar?

-Claro - sonrió y tomó las llaves de su auto, pero antes limpió un el plato y vaso que estaba usando, y cerró la heladera al mismo tiempo que acomoda el centro de mesa. A ninguno le gustaría ver el histeriqueo de mi madre, al ver semejante lío.

-¿Mamá no llegó? - dije sintiendo un silencio total en la casa.

-No, hoy le tocaron horas de guardia en el hospital - me sonrió y señaló la puerta principal - vamos.

Me puse de pie y a paso lento fui hasta el auto. ¿Qué puedo decir? Además de que mi papá es mi mejor amigo y el que me cubre en todo.
La mayoría de las chicas que conozco, tienen una relación mejor con sus madres. Pero en mi caso es todo lo contrario.
Y la verdad que no me siento mal, ya que nunca fui de llevarme bien con mi mamá.
Supuestamente mi madre no podía tener hijos, y mi llegada fue algo milagroso. Desde ese entonces (agregando que ella es médica) intenta ponerme dentro de una burbuja sobreprotectora, y yo cada vez que puedo, me zafo de ella. Llega un punto en donde es agobiante.
En cambio mi padre me da más libertad, y siempre que puede se mete en la discusiones de mi madre, defendiéndome a mí. Y si. Ahí es donde ellos también se pelean, y adivinen quien se siente culpable luego...
Luego de arreglar mi skateboard y volver a casa, me di cuenta de lo tarde que se había echo. Por lo que pedimos comida con mi padre, y una noche más cenamos los dos.
No voy a mentir, me duele ver poco tiempo a mi madre, siempre está ocupada en su trabajo. Y es el colmo, porque cuando tengo la oportunidad de pasar tiempo con ella, bum, nos terminamos peleando.
El teléfono de casa sonó, y con un poco de flojera me levanté del cómodo sillón.

-¿Hola? - dije dando un largo bostezo.

-¿¡Por qué no contestabas mis llamadas?! ¿¡estás loca?! ¿¡por qué hiciste eso?! - Lily totalmente alterada, me aturdió y no puedo entender el porqué de la situación.

Cerré mis ojos - wou, espera más despacio. ¿Qué pasa? ¿qué hice?

-¿Es broma? - suspiró desde el otro lado - la foto que me tomaste estando borracha en el baño, ahora circula por todos lados - gruñó molesta.

Abrí mis ojos sorprendida recordando ese día. Y pude sentir vergüenza por ella, al darme cuenta de que salía en bragas y corpiño vomitando en mi baño. Le tomé una foto para rememorarla y tenerla en mis recuerdos de lo que fue ese día.
La sangre me hirvió al pensar lo peor.
Voy a matarlo.

-No puede ser - tomé mi frente molesta - me dejé el celular en el auto de William, pero nunca pensé que sería capaz de hacer algo así, ¿¡que se cree ese idiota?!

-¿Que tu estuviste en el auto de... Aguarda, ¿qué? - Lily hizo un silencio desde el otro lado - ¡¿qué carajo Kelly?!



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En el texto hay: comedia, boxeo, amor

Editado: 30.08.2018

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