Capitulo 8

A pasado una semana desde que el "accidente" . Sara y yo, ya salimos del hospital. Pero Sara se fue con sus padres a Manhattan, por lo poco que sé su madre le tenía una gran sorpresa. La relación de Sara con sus padres a mejorado, ellos comprende las necesidades de ella, y ella trata de entender mejor a su madre.

Por otro lado esta mis hermanos, los dos sean comportado muy bien conmigo. Durante mi estadía en la clínica se turnaban para quedarse conmigo, aunque el que más se quedaba era Damon, aunque según él, no lo hacía por estar al lado de Sara, si no de su hermanita. Pero varias veces lo vi hablándole a Sara, mientras ella dormía. La última noche que la pasamos en la clínica, él dijo algo que todavía no se me sale de la cabeza.

-Damon, ¿Podemos hablar?- uso mi todo de voz más infantil y más verás cuando quiero que mis hermanos este a todo mi disposición.

-claro. Ya vuelvo, Connor deja de verle el trasero a mi hermana.

Al escucharlo me sonrojo y apuro mi paso a la cocina.

En la casa están casi todos los muchachos del equipo de fútbol americano.

- Anabella deja de usar uso short cuando esté los muchachos del equipo- sé que se enfada con facilidad cuando sus amigos me devoran con la mira. Asiento- bueno, para que soy te soy útil.

-lo que pasa es que una noche antes de que nos dieran salida de la clínica, tú... tú le decías a Sara dormida claro está, que la amabas tanto que eras capaz de dar tu vida por ella, pero que tenías miedo a perderla.

Su cara de asombro me da muchas ganas de tómale una foto y mostrarse a Marco para que se burle de él.

-ya sabes que la quiero, mejor dicho la amo con locura, pero mis temores, mi inseguridad y las constantes pesadillas, me recuerdan que en cualquier momento la puedo perder- baja la cabeza, en signo de derrota.

-sabes que ya la perdisteis.

-no me digas esas palabras- me ruega con la mirada.

-soy tu hermana, Sara lo es igual. Damon, Sara ha llorado cada rechazo, cada desplante, tus malos días y mal humor. Ella tiene derecho a enamorarse, a vivir su vida como le dé la gana y con quién le dé la gana-sé que mis palabras le duelen pero esa puede ser una posibilidad-Respóndeme algo ¿No has visto algo raro en Sara desde que pusiste a Megan por encima de ella? ¿Has visto cómo te mira?

-ya...ya no veo aquella sonrisa llena de amor, ya no está el brillo de sus ojos que me guiaban como farol a un capitán en alta mar. Sé que la estoy perdiendo, pero...pero no quiero que por mi culpa le pase lo mismo que a papá.

- te comprendo, pero porque te burlas de ella, ¿Porque siempre la desprecias? ¿Porque te gusta verla así, sin luz, sin alegría, y sin amor? ¿Porque?- me acerco a él y levantó su rostro- ¿Porque te haces esto?¿ Porque no le das la oportunidad de que te demuestre que las cosas no pasarán como tú las crees?
Por favor dime que lo pensarás.

Me duele verlo así, llorando como un niño que necesita consuelo de su madre porque se cae de su bicicleta.

-te... Te prometo que lucharé por recuperar mi farol- seca sus lágrimas y mocos con el torso de su camisa. Hago una mueca de asco por su acto- que no te gustan mis mocos- se acerca peligrosamente a mí- porque no me das un abrazo.

Cuando veo que se quiere lanzar a mí, corro fue de la cocina hacia mi habitación. Pero al instante que paso el umbral de la puerta tropiezo con algo, o mejor dicho con alguien.
Estoy arriba de Connor, mi rostro debe de estar rojo de la vergüenza- pero que bello panorama tengo, mira que si querías que te cargará solo lo tenías que decir.

Me separo de su espectacular cuerpo. No sé porque pero al realizar esta acción mi cuerpo no se sintió igual que cuando estaba junto a él.
Su cuerpo me generó seguridad y confianza, una plenitud que jamás he sentido.
Dios por fin puedo decir que siento aquel bajón de presión.

- lo...lo siento no...No qui...quise hacerlo es que Da..

- no hay de que, me encantó ser tu almohada personal- él mueve sus cejas seductoramente, mientras se muerde el labio inferior.

Damon al verlo le da un empujón alejándolo de mí- no mires a mi koala así, o le cuento tus sueños junto con ella- Connor paledise y niega eufórica-mente- eso mismo pensé. Anabella sube a cambiarte.

No protesto y subo. Nunca pensé que Connor me llevara en sus sueños. Esto de verdad se siente muy bien.
Llegar a mi habitación busco en mi armario unos pantalones azul marino con rotos desde cinco dedos dejo de mis muslos hasta mis tobillos, el cual no me duele mucho, me dejó el top Adidas y mis Vans negras.

Media hora después de divagar en mi mente el cómo me hace sentir Connor y las palabras de mi hermano. Llegó el mensaje que espere durante días.

Amor de vida ya llegué, ¿Quieres saber el motivo de mi escapa?
Pues te espero en mi casa
Pdt: no corras por las escaleras y no vengas en moto.
Te amo.

No he terminado de leer el mensaje cuando ya estaba recogiendo mis cosas y bajando las escaleras a todo babor. Al llegar a la sala veo a todos de igual manera que hace media hora.

- Anabella deja de correr por las escaleras- me grita Ángel, al salir de la cocina.