1: Inicio

Sentada en un pequeño e incomodo sillón, Angélica sujeta la fría mano de su madre, como lleva haciendo desde hace unos mese atrás.

La madre de Angélica, se debate entre la vida y la muerte es una monótona camilla de hospital, tras mas de un año luchando contra un cáncer, que ha ido adueñandose de su cuerpo, ahora ya inherte en su casi totalidad.

La mirada de Angélica esta fija en la pálida piel de el rostro de su madre, un rostro irreconocible, que hace dos años emanaba belleza y paz, y que ahora solo causa tristeza y desasosiego.

Su madre lucha cada segundo por seguir respirando, y sabe que en cualquier momento su corazón dejará de latir.

Lentamente y con dolor baja sus párpados y los vuelve a subir para toparse de nuevo con la mirada cristalizada de su hija.

-Cariño- logra pronunciar su madre con la voz desgarrada- Ve con tia Molly cuando todo acabe, es tu destino.

Esta asiente, con un nudo en la garganta que la está ahogando desde que entró esa mañana en el hospital tras darse una ducha en casa, y el doctor la esperaba en la puerta de la habitación.

Flashback

-Angélica- dice el doctor Nick con la voz apagada. Ese doctor ha llevado el caso de su madre desde el primer día- Tu madre... no le queda mucho tiempo. Sabías que esto pasaría tarde o temprano. Solo te puedo decir que te despidas de ella lo antes posible.

-Gracias- Susurra Angélica a punto de romper en llanto- Por todo...- Acaba, y entra en la habitación para sentarse junto a su madre hasta el final

Fin flashback

-Te quiero, se fuerte y espero que me perdones algún día por alejarte de lo que en realidad eres.-Finaliza ya en un último suspiro, dejando a Angélica intrigada por sus últimas palabras.

-Te quiero mamá, seré fuerte, por ti y por mi, y te perdono, sea lo que sea, solo quiero que sepas que te quiero y te voy a echar mucho de menos, me harás mucha falta y nunca, jamás te olvidaré. Mami, te quiero- Dice mientras entralaza sus manos y acaricia esta con su dedo pulgar. Y así, con una pequeña sonrisa permanece su madre hasta que un pitido largo acaba con su agonía.

Angélica permanece en silencia al lado de ella, mientras una lágrima solitaria se escurre lentamente por su mejilla de forma silenciosa. Seguida por otras idénticas segundos después.

Y permanece allí, con un fuerte  dolor en el pecho, que la perseguirá durante algún tiempo.

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Su tía Molly llega la tarde de la muerte de su madre junto a su primo Simon. Con el que pasaba su infancia.

El timbre de la casa suena interrmpiendo las lágrimas de Angélica que no han cesado todavía. Esta, a paso lento se levanta del sofá en el que permanecía mirando a la nada y se acerca hasta la puerta.

Abre con cautela y se encuentra con la mirada de su tia, la hermana de su madre. Cosa que hace que su llanto se agrande, ya que su parecido le parte el alma.

Rápidamente se encuentra entre los cálidos brazos de su tía, que entra en la casa segundos después. Cuando se da cuenta, observa a un lado de su tía y ve a su primo.

Esboza una pequeña y fugaz sonrisa y se acerca a el con rapidez para abrazarlo. Su primo ha sido una persona muy importante para ella, pasaban todas las tardes juntos, los veranos, tienen tantos recuerdos...

-Te quiero primita...- murmura Simon en su oído- Estoy a tu lado, todo va a pasar, todo estará bien, te lo prometo.

-Yo también te quiero Simon, y no sabes cuanto te he hechado de menos, cuanta falta me has hecho...-Susurra ella dirigiéndose hacia el sofá de nuevo, dónde su primo le deja su hombro para llorar.

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Los tres pasan la noche en vela, sin hacer si decir nada. Al día siguiente, tras dormir durante poco tiempo se visten y se dirigen al cementerio. Para poder, por fin, finalizar toda esta traumática experiencia y que su madre descanse en paz para siempre.

Caminan hacia el cementerio en silencio, Molly, por delante. Absorta en sus pensamientos, y Simon y Angélica, detrás de ella. Angélica mira el suelo con tristeza y Simon mira a su prima con pena. Ambos con sus brazos entrelazados dándose apoyo mutuamente.

Un cura oficia la ceremonia, acompañado por un gran cúmulo de nubes que advierten que va a llover. Prefieren no decir ningunas palabras, así que tras bajar el ataúd, cada uno se despide. Y dejando un bello ramos de rosas rojas acaban saliendo del lugar.

-Estás bien cariño?- pregunta cautelosa Molly.

-Si- Habla Angélica- Yo ya sabía que esto iba a suceder, ya he llorado lo que tenía que llorar, y ahora, aunque me duela y la necesite a mi lado, debo pasar página y continuar con mi vida- Habla ella pensativa- Y... tengo que recuperar mi verdadero yo y seguir mi destino del que mi madre me había alejado.- Acaba pensativa

-Que...?- Dice Molly extrañada y con el ceño notablemente fruncido.

-Lo último que mi madre me dijo... fue que fuera contigo, que ese era mi destino y que la perdonara por haberme alejado de quien en realidad soy. Y eso voy a hacer. Voy a descubrir quen soy en realidad, y si mi verdadero yo, se encuentra en Darkvillage, allí es dónde iré.

-Me alegro tanto de que vayas a ser tu misma después de tantos años- Confiesa Molly mirandola con nostalgia.

-Va a flipar...-susurra Simon incrédulo desde detrás- Me alegro de que vengas con nosotros a Darkvillage, así nos aremos compañía el uno al otro. Y seguro que allí encajas de maravilla. Todos irán a ti como abejas a la miel, te lo aseguro- Habla este animado.

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