Solo ella puede

Sam

Gracias a Dios que Gabi siempre ha sido para mi tan leal desde el día que lo conocí. Nunca ninguna vez dudo de mi  amor por el apesar de mi indiferencia en casi todos lados. Esa carta no sería la excepción, como buen lector buscó el libro que le había regalado en casa y encontró la verdadera carta dentro de el, donde explicaba las circunstancias y el peligro al que lo había expuesto, le dejaba tres bebés que eran nuestros donde explique las razones de por las cuales decidí dejárselos, ellos eran fruto del esfuerzo de ambos por llevar una vida normal.

Solo espero entienda y viva como debe ser para esas criaturas y para el.

Yo estoy ahora aterrizado en Venecia lugar donde en 7 días seré la esposa de un mafioso. Estoy más que segura que esto es idea de mis tios, ellos siempre desearon unir la mafia con el  poder asesino y esta es su oportunidad.

También estaba preocupada de que desearan casarme con mi verdadero nombre pero solo usarían el primero y otro apellido.

De ahora en adelante sería  bella Samael Tong, pero como era de esperarse a el lobo nadie le conoce el nombre y solo sería llamado Lobo Rossellett  , pero preferiría cambiarle el nombre, ya que no daría miedo en absoluto así que ordene que cuando dijeran su nombre fuera Luzbel Rossellett... sonaría mucho mejor además que la cara de demonio ya tiene es sexi pues nació así, así que es prácticamente los 7 pecados en una sola persona.

Es lo que me atrae de él, es lo que es y punto no es superficial ni siquiera un poco. Es directo y sus facciones le ayudan a no verse nunca dudando de sí mismo eso es lo que más me está gustando.

He llegado a su casa y lo primero que veo es al hombre en pantalones desgastados y sin camisa a las 6 de la tarde...

Yo siento que me falta algo... el aire o los pensamentos .

Te gusta lo que ves- dice mi mal intencionada mente-

Lo sigo observando y el esta descalzo. ¡¡Por los cuatro jinetes!!,  ya no se ni como estoy pero se algo, tengo que agarrarme de algo antes de caer.

- Cariño, si te gusta la vista no te imaginas después como será el paisaje desde la cima- dice el engreído-
Cosa que me hace volver a la tierra con algo de dificultad.

-ya llegué... solo... ammm- espero que me regales un lugar donde dormir.- digo divagando, trato de mantener la compostura lo mejor que puedo delante de este engreido-

El sonrie ante mis palabras y llama a alguien. Una chica de unos 20  años con los labios pintados de morado, tiene el cabello negro, el cuerpo de una modelo y largas piernas que la hacen ver más alta de lo que es, para que negarlo es muy bella y yo en este momento lo que menos me veo es bella ya que vengo disfrazada.

- Less, muéstrale mi habitación, también lleven sus cosas, en 20 minutos estará la cena. - dice Alessandro-

Asiento, estoy por subir las escaleras cuando me atrapa mi brazo.

-No sé te olvida algo caro mío.- dice con voz ronca cerca de mi oído,levanto su ceja-

Me acerco a el más de lo que el esta de mi, le rodeó el cuello con mis brazos y le plantó un caso y tierno beso que dura más de 5 segundos, el me toma de la cintura para darme un beso más profundo. Donde se nos acaba el aliento  el me sonríe de manera maliciosa.

-Sube y arreglate rápido, por que si no te encuentro vestida no cenarás- dice con picardía.

Subo lo más  rápido que puedo detras de la chica, la cual al darse cuenta que voy agitada detrás de ella chasquear la lengua.

- No sé que vio el lobo ti, para desear casarse contigo- dice ella con desdén, mientras me lleva a la habitación.

-Yo tampoco, pero no puedo quejarme - digo con indiferencia-

-No sé quién eres pero ten cuidado de no hacerle daño a mi lobo te las veras conmigo- dice la chica-

-bueno, la verdad es que en un par de días ya no será tuyo- digo cuando ella abre la puerta del cuarto-

-Eso es lo que piensas, soy la única que el no abandona, desde que tengo muchos años en los que he estado con el aunque las mujeres las usa para una noche siempre vuelve a mi- dice ella con cara de triunfo-

- Que bueno, me preocupaba tener que buscar un reemplazo mientras yo no estuviera en casa, pero como estas tú, su puta permanente, no me preocuparé por eso- digo con indiferencia-

Le cierro la puerta en la cara y empiezo a quitarme todo que llevo encima.

Después recuerdo que debo mostrarme como soy por lo menos dentro de la casa. Así que después de un baño rápido dejo mi blanco cabello al descubierto y mis ojos sin lentillas solo los cambio a los rojos de siempre, un par de lentes para no asustar a nadie...

Me Coloco un atuendo informal... unos jeans azules ajustados y camiseta blanca además de un suéter beige unas vans del mismo color... siempre mi audífono en mi oreja,  mi celular y mis armas antes que nada también.

Bajo las escaleras tranquilamente y los chicos que le he dejado a disposición corren en posición de hacerme camino, bajan su cabeza, saludando a su reina...

¡¡¡MAJESTAD!!