Prologo

Estar aprisionada dentro de un par de tablas eternamente es cansado y doloroso, aunque todo esto sea mi culpa, no me arrepiento, me veras como tu enemiga, aquella que te ama y admira, sabes, para amar a una persona solo hay que saber leerla, por mas peros que existan siempre la lograras leer.

Querido diario,

No se que día es, ni se cuanto tiempo ha pasado, siento que las noches se hacen más largas y el calor del día se desvanece muy pronto, este lugar es frío y aburrido, paso mis días viendo a esos pequeños seres que me acompañan en mi soledad u observando por un pequeño agujero aquella montaña de primavera en la cual jugaba de niña, ahora con un manto blanco sobre ella.

Mi cuerpo grita por comida hace ya más de un mes, un año o un siglo sin respuesta alguna a mis plegarias, no he muerto, pues no puedo, mis genes son eternos, únicos sin poder reproducirlos ni eliminarlos, quede estancada en un estado de desesperación infinito, en donde solo el puede llevarme hasta aquel letrero de salida al final de la estación. Lo complicado no es entrar lo difícil es salir, y fue él, el que me encerró aquí.