T/n.
En ese momento me quedé sin palabras, pero al final me salvó decir sabes que me muerdo el labio cuando pasa algo complica y la tarea se me hizo difícil.
Fue una excusa buena y muy práctica que me salvó, pero al estar nerviosa no pensé muy rápido.
Ahora estoy en mi habitación y debo decir que no tener nada que hacer es lo peor, ya que mi mente empieza a reproducir una y otra vez lo que pasó anoche: nosotros borrachos, sus labios encajando a la perfección con los míos, y el toque que le dió ese Pershing al beso. —me tapó la cara con la almohada.
me da rabia que los chicos nos hayan interrumpido, me avergüenza en el momento en el que se dió todo, tengo de todo tipo de sentimientos... Menos el arrepentimiento.
Frotó mi cara con frustración, está vez con mis manos
— como pudo pasar esto!?...en qué momento.... ahhhhh—me desespero por el desorden e mi cabeza, en mi corazón, me mis sentimientos, en mi vida— Maldita sea.—tomo las llaves de mi moto y empiezo a manejar sin rumbo.
yo no soy así... Esto no puede ser lo que estoy pensando, no puede gustarme alguien como él.
Con ese pensamiento Acelero importando a mi misma un cacahuate las miradas y opiniones que atraiga .
Jungkook
El gran Jeon Jungkook amo y señor de la mafia enamorado?, Si quiera gustando de alguien?, Suena loco, imposible, y es que lo es.
Pero es que con esta chiquilla siempre hay excepciones—niego con la cabeza—estoy teniendo alucinaciones, yo no doy ni seré así, nunca, desde que esa chica me rompió el corazón me dejó en claro que el amor es para débiles, que te ciega y que no existe en realidad.
Miro por la gran ventana a la luna, como si ella fuera a aclarar mis ideas, esas ideas que aunque no quiero aceptar están siendo revoloteadas y alteradas desde que la abogada de la mafia apareció en mi vida.
Tan extravagante, sin miedo y con fuerzas.
—definitivamente me estoy volviendo loco—digo al mismo tiempo que me alejo de la ventana, tomo un abrigo, las llaves de mi auto y salgo de la mansión.
Debo tomar aire fresco, tal vez eso me haga sentir bien y poner orden de una vez por todas.
Tardo aproximadamente diez minutos en parar y bajarme en un parque, pero al hacerlo veo alguien.
—se supone que venía a poner orden en vida no más desorden...—suspiro— al destino le encanta juntarnos—digo con una sonrisa involuntaria al mismo tiempo que mis pies toman vida propia y avanzan a mi desorden... Y tal vez si sigo así a mi perdición