Capitulo 14

[Capitulo 14]- 

(Narrador omnisciente)

Después de presenciar el beso entre el Sr. Rodríguez y su amiga Iandra, Blanca se encuentra sumida en un mar de pensamientos y emociones encontradas. Durante toda la semana, ha intentado mantener la compostura y concentrarse en su trabajo en la empresa de diseño gráfico que comparte con Iandra, pero la imagen del beso sigue rondando en su mente.

Al intentar hablar con Iandra al respecto, su amiga se muestra evasiva y reticente a dar detalles, lo que hace que Blanca se dé cuenta de que está profundamente afectada por lo sucedido. Se percata de que Iandra está confundida y probablemente obnubilada por la pasión del momento, lo que aumenta su preocupación por ella.

Por otro lado, Blanca no ha recibido ninguna señal de Javier desde el fin de semana familiar, lo que la llena de ansiedad y tristeza. Cada día que pasa sin noticias suyas la sumerge en un estado de incertidumbre y melancolía, añadiendo un peso adicional a su corazón.

Así, mientras la semana llega a su fin, Blanca se siente un poco desanimada, anhelando la claridad y la tranquilidad que tanto necesita en este momento de incertidumbre en su vida sentimental.

…

Blanca se dirige hacia la salida de la empresa, con la mente todavía inquieta por la conversación pendiente con Iandra. Al llegar a la recepción, ve a su amiga esperándola con una expresión radiante y un sobre en la mano. Antes de que pueda decir algo, Iandra se lanza hacia ella en un abrazo repentino.

Iandra: ¡Blanca! ¡Qué bueno verte! ¡Tenemos tanto de qué hablar!

Blanca: (sorprendida por el abrazo repentino) ¡Iandra! ¿Estás bien?

Iandra: (soltándola y mostrándole el sobre) ¡Lo estoy, pero no te has salvado! Tendrás que cumplir tu promesa.

Blanca: (confundida) ¿Promesa? ¿De qué estás hablando?

Iandra: (con una sonrisa traviesa) ¡Abre el sobre y lo descubrirás!

Blanca toma el sobre con curiosidad y lo abre lentamente. Al deslizar la carta de su interior, su corazón comienza a latir con fuerza al ver la caligrafía familiar de Javier. Con manos temblorosas, saca la carta y comienza a leer.

"Querida Blanca,

Espero que esta carta te encuentre bien. Ha pasado un tiempo desde que nos vimos en la villa, pero no he dejado de pensar en ti desde entonces. Quiero sinceramente disculparme por mi comportamiento impulsivo esa noche, pero no puedo negar lo que siento por ti. He estado debatiéndome sobre cómo expresar mis sentimientos, y finalmente decidí escribirte esta carta.

Blanca, desde que éramos jóvenes, siempre he sentido algo especial por ti. Tu presencia ilumina mi día y cada momento que pasamos juntos se queda grabado en mi mente. Sé que las cosas no siempre han sido fáciles entre nosotros, pero siento que es hora de ser honestos. No puedo evitar pensar en la posibilidad de un futuro juntos, y me encantaría tener la oportunidad de explorar eso contigo.

No quiero presionarte ni hacerte sentir incómoda, pero necesitaba expresar mis sentimientos. Entiendo si necesitas tiempo para procesarlo todo, pero espero sinceramente que consideres lo que digo.

Con todo mi cariño,

Javier"

Blanca levanta la vista de la carta, sintiéndose abrumada por las emociones. La mirada de Iandra, llena de expectación, la hace sonreír con ternura.

Blanca: (con voz temblorosa) Parece que la decisión se ha tomado por mí.