Capitulo 23

[Capitulo 23]- 

(Narrador Omnisciente)

Se encontraba en la casa de sus padres, rodeada de toda su familia y la de Javier. La atmósfera era tensa y silenciosa, cada rostro mostraba la expectativa de lo que estaba por suceder.

Javier, con una mirada fría y distante, se acercó a ella.

Javier: (con una sonrisa sarcástica) Blanca, tengo algo que decirte delante de todos. (dirigiendo su mirada a la familia de Blanca) Quiero que todos sepan que Blanca no fue más que un capricho para mí. Un juego que ya superé.

Blanca sintió cómo se le helaba la sangre. Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras Javier continuaba.

Javier: (acariciando la barriga de embarazo de Carolina) El amor de mi vida es Carolina. Siempre lo ha sido y siempre lo será.

Carolina, parada al lado de Javier, soltó una risa cínica, disfrutando del dolor que causaban sus palabras. Blanca miraba a su alrededor, buscando algún rostro que le brindara consuelo, pero solo veía miradas de lástima y decepción. Se sintió sola y humillada.

Blanca despertó con el corazón latiendo a mil por hora y lágrimas corriendo por sus mejillas. La realidad se mezclaba con la pesadilla, y por un momento no supo distinguir lo que era verdad y lo que no. Sentada en su cama, se secó las lágrimas con las manos temblorosas.

Blanca: (murmurando para sí misma) Solo fue un sueño... solo un sueño...

Pero la sensación de angustia permanecía, reflejando el dolor real que sentía por la situación con Javier. Se sentía cansada, como si no hubiera dormido en días, y el mareo comenzó a apoderarse de ella. Blanca se quedó quieta unos minutos, tratando de calmarse, pero el sudor frío y la sensación de náusea aumentaron.

Finalmente, tuvo que correr al baño. Se arrodilló frente al inodoro, vomitando hasta el jugo gástrico. No había comido bien en esas dos semanas, y su cuerpo se lo recordaba dolorosamente. Después de unos minutos que parecieron eternos, Blanca se levantó, débil y temblorosa, y se apoyó en el lavabo.

Blanca: (mirándose en el espejo, con los ojos enrojecidos) No puedo seguir así... tengo que cuidarme.

Blanca sabía que debía enfrentar sus miedos y aclarar las cosas con Javier, pero primero necesitaba recuperar su fuerza. Se prometió a sí misma que se alimentaría mejor y trataría de encontrar paz en medio de todo el caos.

………………….Recuerdos…………………………

Los primeros días después de la noticia del embarazo de Carolina fueron extremadamente tensas. Blanca y Javier apenas se comunicaban, cada uno lidiando con sus propias emociones. Javier, abrumado por la culpa y la incertidumbre, se refugió en su trabajo, mientras Blanca intentaba mantenerse ocupada en su empresa.

Javier: (por teléfono) Blanca, por favor, necesitamos hablar. Esto es un malentendido. Te prometo que no tuve nada que ver con Carolina desde que terminamos.

Blanca: (con voz temblorosa) Javier, necesito tiempo. Esto es mucho para asimilar.