Capítulo - 40

Pov Max.

Ya habíamos regresado al departamento y la verdad no tenía muchas ganas de hacer algo para cenar así que pedí pizza para los niños 

Las pizzas llegaron y mientras cenábamos veíamos películas, terminando los niños me ayudaron a recoger todo para después mandarlos a dormir, para Mateo y Javier fue fácil dormirse pero a David y Damián tuve que leerles un cuento para que pudieran dormir, terminando de leerles el cuento se quedaron dormidos y los deje descansar 

Vi la hora y ya era un poco tarde pero decidí marcarle a Daniela para saber si llegaron bien.

- Bueno Max ¿Paso algo?

- No tranquila todo esta bien solo llamaba para saber si llegaron bien, ya que en la mañana te marque pero no me contestaste.

- Así lo siento Max aún seguía dormida, ya que el viaje fue muy largo, lamento no haberte contestado pero no te preocupes llegamos con bien de hecho vamos llegando al hotel y estamos cenando.

- Me alegro y bueno entonces buen provecho y los dejo para que cenen.

- Espera Max ¿Cómo están los niños? ¿Se han portado bien? ¿Cómo estuvo su primer día?

- Ellos están bien ahora están durmiendo, se han portado muy bien y bueno hoy los lleve a un parque de diversiones para que no estuvieran todo el día en el departamento espero no te moleste.

- No claro que no al contrario te agradezco que los estés cuidando.

- No es nada y pues voy a estar trabajando desde mi departamento para así no dejarlos solos y pasar tiempo con ellos.

- Max en verdad te agradezco que te preocupes por ellos y que los cuides de esa manera.

- Y yo ya te he dicho muchas veces que no tienes que darme las gracias y que lo hago con mucho gusto.

- Es que es inevitable no hacerlo la verdad no sé como pagarte por todo lo que has hecho por nosotros.

- Bueno yo creo que sé cómo me puedes pagar.

- Bueno dime que quieres.

- Que regresando del viaje aceptes tener una cita conmigo.

En cuanto digo eso Daniela se queda callada y la verdad no sé si me había colgado, se había enojado o algo así.

- ¿Sigues ahí?

- Si aquí estoy solo que me sorprendió tu invitación.

- No tienes que dar una respuesta ahora, tienes todos estos días para pensarlo y cuando tengas la respuesta me la dices.

- No tengo nada que pensar, la respuesta es clara.

- ¿Y cuál es?

- Que acepto tu invitación.

- ¿Enserió? - decía emocionado - muy bien entonces espero con ansias a que regresen, pero bueno te dejo para que termines de cenar y vayas a descansar.

- Muy bien, gracias nos vemos en unos días.

Termino la llamada y me voy a dormir, es muy tarde y mañana tengo que hacer muchas cosas.

Al día siguiente. 

Me desperté temprano para hacerles el desayuno a los niños, cuando voy a despertarlos para que vengan a desayunar veo que ya estaban cambiados.

- ¿Y a ustedes que mosco les pico?

- ¿Por qué lo dices?

- Pensé que aún estarían dormidos, ya que es domingo. 

- Pues ya vez que no.

- Bueno entonces siéntense a desayunar.

Se sientan y empezamos a desayunar, después de un rato terminamos y me ayudaron a limpiar.

- ¿Y ya nos podemos ir?, Ya estamos listos.

- Hay algo que no me cuadra aquí - se miran entre ellos.

-¿Qué cosa?

- Puede ser que se despertaron temprano para hacerme creer que se bañaron.

- Les dije que se daría cuenta.

- Ya estamos listos porque no nos vamos y regresando nos bañamos, ¿Te parece?

- Exacto, sino se nos hará tarde y tienes cosas que hacer.

- En ese caso hay que apurarse así que los cuatro a la ducha.

- ¿En verdad es muy, muy necesario el baño?

- Si es muy, muy necesario así que anda.

Los cuatro protestan pero terminan haciendo caso, en lo que ellos terminaban de bañarse me pongo a revisar unos documentos de la empresa 

Después de un rato salieron.

- Ahora si están mejor, vamos.

Salimos del departamento y vamos a casa de mis padres, ya que los niños querían ver al Odie y estar con Santiago, así yo aprovecharía para ir a ver el asunto de mis invitados. 

Cuando llegamos a la casa me encuentro con Laura, se me había olvidado que se estaba quedando aquí.

- Max al fin vienes, ¿Acaso te estabas escondiendo?

- He estado muy ocupado en la empresa pero, ¿Cómo has estado?

- Pues ya mucho mejor, tu mamá a estado al pendiente de mí es muy linda.

- Que bueno me alegro - en eso llega mi abuela.

- Mi niño que bueno que vienes - me da un abrazo.

- Lo siento por no venir antes abuela.

- Bueno ya estás aquí, te recuerdo que tú y yo tenemos una conversación pendiente.

- Si lo sé abuela pero ahora no puedo solo vine a dejar a los niños, bueno quería ver si los puedes cuidar en lo que yo resuelvo algo.