36.HERMANO-HERMANA.

***

—Perdoname por haber sido tan engreida....y yo se que jamás te fijarías en alguien como yo....y sinceramente pienso que te verías mejor con Kecia que con Margot.

Wayne la abrazo.

—Sigues siendo la mas sexy, Megan—Habló con una sonrisa.— y ahora no solo lo digo por tu fisico....eres inteligente y valiente y....oh por Dios el arco nació para ti.

Megan rodo sus ojos.

—¿no es increible todo esto? Podemos morir en cualquier momento, Wayne.....pobre Kecia, la debe estar pasandola mal.

Wayne miro al suelo.

—Lo sé...la extraño demasiado. No me importaría morir por ella.

—Wow, ¿seguro que aún no sigues enamorado de ella?

Wayne nego con la cabeza.

—Es como mi hermana, es mi mejor amiga. La verdadera pregunta es....¿Que hay entre tú y el chico Bethan?

Megan volvio a rodar sus ojos.

—Es muy lindo pero....vine a buscarte a ti y ahora no tengo tiempo para citas o cosas así...me enamore de este lugar, quiero luchar porque este mundo sea mejor....quiero que Ceom y Kecia recuperen su trono....es como una pelicula....aquí todo lo que creía imposible es posible.

—Te entiendo.—Dijo Wayne.—Espero que todo salga bien.

—Wayne Jackson.....¿puedo hablar contigo?.—Dijo Ceom acercandose.

Wayne miro a Megan y esta asintio.

Estaban en un prado y Ceom llamo a su Tesco, Wayne quedo sorprendido al ver a la criatura.

—Es majestuoso.—Dijo refiriéndose a la criatura.

—Gracias. Wayne se que conoces a mi hermana....mejor de lo que yo, imagino. ¿sabes cual era su plan?  Me encantaría saber sobre lo que ella piensa...como sabes ambos compartimos un trono...

—Lo se....y es extraño....porque su plan era encontrarte, conseguir su dragón y esperar tenerte a su lado. La extraño.

—No la has visto en pocas horas, yo no la he visto en años....te entiendo.

—Tenemos que hacer algo, ella debe estar en alguna....—Wayne no termino al ver a una ave muy especial, reconocería a aquel pajaro en cualquier lugar.—....el pajarraco...

Ceom frunció su ceño confundido.

—¿pajarraco?.—Ceom miro hacía el cielo.—...oh, es un ave de colmillos, no te preocupes no puede vernos, nada de lo que vuele de alla arriba puede hacerlo, esta protegido con magia...

—No, tenemos que salir....es el ave de Rarforth, Mis amigos estan cerca, el ave venía con nosotros....nos ayudaba.

—¿Rarforth el barbaro?

Wayne asintio. Entonces el ave bajo y se poso en el hombro de Wayne.

—Pero...¿como?.—Ceom se sorprendio.—Nos puede ver....quiere decir que estaba...

—...Dentro.—Dijo Wayne y su corazón dio un vuelco y el de Ceom dio todos los vuelcos posible.

Ambos corrieron a la entrada y todos estaban rodeando a los recien llegados.

—Ve tu....—Dijo Ceom.

—Tu debes ir primero principe.

Ceom nego.

—Ve tu...ire tras de ti.

Wayne asintió y todos abrieron un espacio. Y los vio...sus cuatro amigos.

***

Al entrar todos los notaron y se acercaron. No sabían que decir. Kecia estaba nerviosa y Sean la tomo de la mano.

—Has esperado este momento por mucho tiempo...solo respira mi princesa.—Sean le susurro y al terminar solto su mano. 

Entonces abrieron el paso y vio a su mejor amigo, al chico de los ojos verdes, allí estaba aquel que había recibido una flecha por ella.

Ambos corrieron y se abrazaron.

—Oh por Dios....eres tú....eres tú, estas vivo....mierda no sabes como estaba de depresiva.....te amo, nunca me dejes por favor.

—No lo haré....prometo ser tu amigo incluso después de la muerte.

—Y yo también....quiero ser una viejita contigo, seremos dos mejores amigos con alguna enfermedad de vejez....quizá con Parkinson—Kecia lo había tomado del rostro y no paraba de acariciarlo al igual que Wayne hacía con ella.

—Quizá con demensia.

—Oh no, con esa enfermedad no. No quiero olvidarlos. No quiero que me olvides.

Ambos rieron tontamente ante las ocurrencias que decían, y Kecia noto que Wayne estaba sangrando.

—Oh no...lo siento, te lastime.

—Esta bien, vale la pena sangrar por algunas personas...no es peligroso.—Wayne y Kecia se volvieron a abrazar, ahora con mas suavidad, entonces Kecia fijo su mirada por encima del hombro de Wayne.

Vio el reflejo de sus ojos en un chico hermoso, estaba quieto y dudoso en si sonreir o no, al igual que ella, Kecia miro a Wayne y este le sonrio y le abrio paso hacía Ceom. Fue como encender una bombilla, fue rapido, como si su cerebro hubiese sido reactivado, de repente basto aquella mirada para recordarlo todo, como si jamás lo hubiese olvidado.