Knd: Promesa

Capítulo 12: Conspiración.

Continúa la transmisión...

—Debo averiguar qué pasó para ayudar a mi hermano— murmuraba Joey con pose de heróe mientras una música en su mente sonaba.

—¡Joey, ven a cenar enseguida! — gritó su madre desde la cocina.

—Ay... ¡ya voy!, rayos tendrá que esperar— resignado bajó a cenar mientras ideaba un plan.

Después de la cena y de escuchar a su madre regañar a su hermano mayor el joven chico del barrio fue a su habitación pero no para dormir sino todo lo contrario, tomó un pasaje secreto hacia la casa del árbol, al llegar fue abordado de inmediato por su líder.

—¡Ya era hora de que llegaras! — gritándole casi al rostro, molesta y se podía notar que había estado llorando.

—Ah, bueno ya estoy aquí— notando sus ojos hinchados —¿todo está bien? —

—No...no está bien— dándose la vuelta — ¡a la sala principal, ahora! —

Al escuchar la orden Joey corrió hasta llegar a la sala principal donde ya estaba el resto del equipo reunido, Número Cinco punto Uno le hizo un espacio para que se sentara en medio de él y de Dos punto Cinco, quien miró a este último con cara de "te voy a matar", Cinco punto Uno ya sabía que a Dos punto Cinco le gustaba Joey o mejor conocido como Cuatro punto Uno pero al parecer el rubio era un poco lento para eso.

Mushi se paró frente a sus compañeros —muy bien chicos hoy tenemos dos misiones muy importantes que hacer, la primera estará a cargo de Uno punto Cinco—

Dany asintió, pero hoy estaba mas serio de lo que normalmente se encontraba y se acercó al estrado —hoy la misión es recuperar un cargamento importante de bebida energética, esto es para que los "adolescentes" — hizo bastante énfasis en eso como queriendo hacérselo notar a Mushi —y adultos contra los que combatimos no tengan ningún acceso a ellas, además es probable que planeen también venderlas a nosotros como un aditivo controlador...— pauso un momento —Dos punto Cinco y Cinco punto Uno vendrán conmigo—

A los chicos eso se les hizo extraño, había dos misiones pero por qué separarse, ya habían hecho misiones dobles o triples antes pero juntos, nunca divididos y ahora tendrían que hacerlo por primera vez, se miraron entre ellos como confusos ante tan repentino cambio pero igual se levantaron de su asiento en posición de firmes.

—¡Si señor! — dijeron Eliot y Coraline al unísono.

—Muy bien, entonces alístense que nos vamos en cinco minutos— Dany terminó de hablar e igual de serio paso al lado de Mushi quien permanecía firme mirando al frente, no le dijo nada y ni siquiera le dirigió la mirada.

Cuando se retiraron quedaron solos en la sala Joey y Mushi quien bajo del estrado y fue con su compañero.

—Bueno, Mushi de qué...—

Estuvo a punto de preguntar de qué se trataba la otra misión pero no terminó la pregunta cuando ya tenía a su líder abrazada a él y llorando en su hombro, le apretaba fuerte contra ella y Joey solo atino a abrazarla igual y acariciar su cabello para que dejara de llorar pues no encontraba otra cosa que pudiera hacer. Cuando ella estuvo mas calmada le apartó sin brusquedad limpiándose.

—Es increíble que seas mas sensible que el estúpido de tu hermano— replicaba la niña limpiando sus lágrimas.

Joey se rio —je...bueno es que Wally así es, no le gusta mostrar su lado sensible a nadie, siempre ha sido así y yo...— pauso un poco —supongo que creciendo y viendo eso, no quise ser igual, cuando fui creciendo me di cuenta de algo...soy mas inteligente y como tal puedo llegar a ser un poco mas empático—

Mushi lo miró y sonrió —supongo, yo en cambio es la primera vez que lloro así después de varios años— se levantó —Joey...— mirándolo como molesta y a la vez triste —tu hermano le dijo cosas muy crueles a mi hermana y bueno, ella se encuentra muy deprimida, se la pasó llorando estas ultimas horas y no sé si siga haciéndolo, cuando la deje estaba inconsolable—

Joey empezó a atar cabos sueltos, la actitud de su hermano era por eso y nada mas que eso —¿qué le dijo? — pregunto curioso pero en una actitud seria.

—No puedo recordarlo todo pero lo que si me quedo grabado fue que ya no le importaba lo que pudiera pasarle a ella— golpeando con fuerza un muro cercano —arg, la verdad eso me lleno de rabia—

El pequeño no podía creer lo que su hermano le había dicho a Kuki, se sentía decepcionado de todo y también muy furioso —mi hermano es un idiota— murmuro bajo.




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