Capítulo VII

Esta noche he estado dando vueltas en la cama no puedo dormir de tanto pensar veo el teléfono y son las 00:00 horas luego escucho unos golpecitos en mi ventana me levanto y veo a mi querido amigo el demonio pero que hace este aquí pienso pero le sonrió porque llegó en un momento preciso al menos no estaré sola en una noche de insomnio.

• Christian: Que tanto piensas querida me dice con su peculiar sonrisa.
• Julia: Pienso en lo emocionada que estoy por nuestro viaje pero también me preocupa el cómo se lo diré a mis padres.
• Christian: Eso no es tan complicado solo nos fugamos sin decirles nada y listo.
• Julia: Además de ser tonto estás loco ni pienses que dejaré a mis padres con esa angustia debe haber otra forma.
• Christian: creo que la hay espero que no te enojes con mi plan B, podríamos quitarle a tus padres los recuerdos que tienen contigo y así mantenerlos felices mientras no estamos.
• Julia: ¿es eso posible Christian?
• Christian: Claro que sí. Creo que a veces olvidas con quien estás hablando; soy un demonio señorita y uno de los mejores y por ser tú te haré este favor gratis.
• Julia: No me parece del todo correcto pero por mantener felices y sin preocupaciones a mis padres dejare que lo hagas pero con la condición de que los lleves a un lugar seguro y que puedan disfrutar de su vida.
• Christian: como usted desee señorita.

Ya han pasado dos semanas desde que tuvimos aquella conversación Christian y yo. Hoy iremos al claro en el bosque para saber en qué lugar queremos comenzar el viaje.

• Christian: Hola hermosura de ojos miel.
• Julia: Desde cuando usa esas palabras conmigo señor demonio.
• Christian: No te puedo llamar como quiero porque lo tomas a mal. Contigo no se puede dice de forma burlona.
• Julia: Esta bien llámame como quieras. Ahora a lo que vinimos.

Saco de mi bolso un mapa del mundo y empezamos a ver los continentes uno por uno y es allí cuando me llega la idea de empezar en Sur América hasta llegar a Norte América después ir a Europa, Asia, África y parte de Oceanía. Es un excelente plan dijo Christian entonces partiremos el día 17 de septiembre prepara tus maletas Julia que solo faltan cinco días.

Vuelvo a mi casa y empezó a empacar todo lo necesario pero ¿Qué empacas para un viaje tan largo? Eso no me lo había planteado así que lleno mi maleta de las cosas básicas y dejaré que Christian se encargue de lo demás.

Hoy es el gran día estoy algo triste porque hoy dejaré de existir para mis padres pero la decisión ya está tomada y no hay vuelta atrás.

Estamos Christian y yo en el claro del bosque ambos con nuestras maletas me toma de las manos y me pregunta si estoy lista para esto le respondo que si y nos transportamos a un lugar desconocido y lejano.