La Dama De Winchester

DURA DECISIÓN

Cuando llegué a casa, después de recoger a mi mamá, cenamos y me dirigí a la alcoba –Gustavo estaba recostado en la cama mirando para el techo.

Me estanque en la puerta, respire profundo y entre, directo hacia el baño, para pegarme una ducha, cuando iba a entrar, Gustavo pego un salto y me atrapo en los brazos arrastrándome a la cama y se me tiro encima.

 – suéltame Gustavo –por favor

 – no dice nada – me mira, en sus ojos había brillo, me beso con fuerza.

 - te Amo- y vuelve y me besa, mi cuerpo se tensa, cuando sus manos me acariciaban –me pongo a llorar y él se detiene y me mira.

 – los siento – se levanta, se sienta en el borde de la cama, mete la cabeza en su pecho

–no sé qué hacer –yo te amo y no quiero perderte y a mis hijos tampoco –pero yo sé que te falle –esto es duro para mí y se suelta a llorar – se levanta de la cama y se pone en la ventana a mirar a lo lejos.

- Yo sé que esta vez no me vas a perdonar –porque me lo digites la última vez que peleamos ¿Qué hago? Te amo tanto que no soy capaz de arrancarte de raíz – dímelo Vicky.

Yo me quedo callada –lo miro y nos encontramos ojos a ojos

Vuelve a la ventana y suspira.

- Quiero el divorcio.  es lo único que le digo y me levanto.

gira de inmediato.

 –no, no, no por favor y se devuelve a la cama y me agarra el brazo.

 – no, Vicky

me abrazo y yo no le correspondí.

 – no quiero divorciarme de ti, eres mi vida – te extraño en mi cama – dime como podría hacer ahora Si me dejas.

Me le parto y me dirijo a la puerta, me detengo y lo miro.

 – pues ya no vas a dormir solo, la tendrás a ella que te dará un hijo y sigo mi paso dejándolo ahí.

Pasaron dos semanas, nos evitamos, no cenábamos junto y dormíamos en diferente habitación, el estudio solo lo utiliza él.

Llamada < Alex>

¡Hola! Victoria

Hola Alex – cómo va el proceso.

 – bien para eso te llamo –¿ustedes vienen a la oficina? o los llevo a la casa.

- Alex sería bueno que me los traiga a la casa, no quiero me vean con él en la oficina, no quiero escándalo

- listo – ¿qué tal a las cinco de la tarde?

 – si me parece muy bien.

 

Llamo a Gustavo.

- Dime…-

- te llamo para comunicarte que el abogado traerá los papeles a la casa a las cinco de la tarde – para que firmemos.

Se queda callado – solo escucho su respiración fuerte y estruendo de cosas volando.

- Bueno para eso te llamaba.  le cuelgo

Salgo se mi oficina y voy la Suchy

 -hola –

- ¿Qué tienes? Mis ojos se aguan.

- hoy firmaremos el divorcio

- ¡oh por Dios! No puedo imaginar cómo te sientes.

- En un mar de olas Suchy – siento que mi mundo se hace pedazo

- Necesito hacer una vuelta en el banco, no vendré en la tarde. para que te quedes a cargo

 – bueno Vicky – si me necesitas, solo llámame.

- Ok, ok, le respondo

Tomé mi coche y me fui a casa de mamá.

 – hola hija.

 – hola mamá-

-  yo te hacía en la oficina.

- Si mamá quería verte

- "Vicky" que pasa – si todos los días nos vemos

- la abrazo, empiezo a llorar.

 – hoy firmo el divorcio.

 – llora hija, llora y eso hago. Cuando me desahogo me prepara una aromática

- bebe para que te relajes

Llamo a Beronica.

- ¡hola hija!

- ¿Qué pasa mamá? Porque te siento rara, ¿estas enfermas?

 – Bero hoy tu papa y yo firmaremos el divorcio y me vendré a vivir con tu abuela

- ¡hay! Mamá – cuanto quisiera estar allá y acompañarte – se fuerte mamá yo sé cómo te sientes, yo también estoy muriéndome, me duele verlos separados ustedes son mi familia.

Papa que piensa, ¿se va con esa zorra?

 – Bero por favor.

 – lo siento mamá, que más quiere que te diga si es la verdad.     

 

 




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