PERDIDA EN MI SOLEDAD

Sentí que me tocaron la puerta, miré mi celular y “por Dios” ya era tarde, teníamos una reunión temprano

Abrí la puerta y ahí estaba el príncipe observándome, me miraba de pies a cabeza.

-  por lo veo no estas lista – le negué moviendo la cabeza de un lado a otro.

 – bueno. Está bien, quédate y yo te disculpare, descansa ya pedí tu desayuno, nos vemos al medio día para que almorcemos.

– bueno, le dije mirando a mis pies. Se acercó suave y me dio un beso en la mejilla. En sus ojos había tristeza. Chao… no le respondí.

Me quede en la habitación, me bañe y desayune.  Me puse a revisar unos documentos de las boutiques que me mandaban los contadores, los contratos con Rosembert   para que firmara ya que se aproximaban nuevas colecciones, todavía seguía mandando los bosquejo, con la diferencia que el hacia las presentaciones a nombre mío ya que no todas las veces podía hacer presencia, luego decidí entrar a ver noticias de las nuevas tendencias, y quede en shok cuando veo a Gustavo, en una  elegancia y en compañía de su amigo y socios de la empresa.

<Titular del día  >

El empresario y muy reconocido señor Gustavo Torrente ha hecho hoy la entrega  de  la  empresa al nuevo dueño Blass Quintana y nos ha dado a conocer el motivo de vender todas sus propiedades en Bulgarin, hace unos años se separó de  la única mujer que amado en su vida – eso nos dijo al pie de la letra,, perdió la esperanza de seguir viviendo en esta ciudad y aparte de que fue engañado por la modelo Jessica Triana, que se en cargo de destruir  su hogar,  haciéndole creer que estaba embarazada de él  y resulto que la mujer tenía más astucia que un gato. Le metió gato por libre con el hijo. esto fue la última puñalada en su espalda, para acabar con sus ganas de seguir su vida como empresario.

 Nos contó que se iría a vivir lejos de todas las personas que lo conocen, para olvidar lo que ha sido su vida en estos años. estos son los informativos de última hora – dice la periodista

Mi corazón fue como una ola de mar, quería salirse del dolor, la rabia, la impotencia de recordar todo lo que paso atrás, pero más cuando declaro que era su único amor, mis lágrimas salían sin permiso, era emociones encontrada y en estos momentos sentía las ganas de ser secuestrada por el en aquella cabaña y ser estrujada entre sus brazos.

El toque de la puerta me saco del ensueño en que estaba. Abrí para encontrarme a Cristopher enfrente mío y su mirada se giró a mi mano donde sostenía el periódico.

Se acercó poco a poco y me lo arrebato, despedazándolo con rabia.

- Ya estas listas – me dijo pasándose la mano por la cara, se le veía la ira en sus ojos.

 – no quiero ir – le dije.

 - ¿Por qué?

- No tengo ganas.

 – vamos a ir tenga no tengas ganas.

 - ¿Qué…?

- Ya te lo dije –

Gire pera tirarle la puerta en la cara, me enfurecía sus actitudes de imponente, pero no me dio tiempo cerrarla porque metió el pie impidiendo

La solté y me dirigí a la ventana, entro cerrando la puerta y se sentó al borde de la cama.

-  puedo saber qué te pasa.

 – nada que te importe.

 – como que no me importa – sabes lo mucho te amo.

 – pero yo no.

 – eso lo sé, que desvive por el idiota ese

Lo miré matándolo con mi mirada – y volví a la ventana.

 -  ya, ya no me digas, es por el dichoso reporte del diario – míralo, ni siquiera es valiente para seguir, hasta acabo toda una vida

- “crees que eso es de valiente” – pues déjame decirte mi amada que no. Es un todo cobarde.

 – me volteo con rabia.

 – lárgate, déjame sola.

 – no me voy, vamos a salir almorzar y luego nos vamos, yo no quiero estar aquí discutiendo contigo, se te olvida que en un mes nos casaremos y solo te la pasas llorando por ese imbécil en vez de pensar en la boda.

 – está bien, pero no pienso almorzar – ve tu solo y me avisa cuando nos vayamos a ir. Le doy la espalda, siento el portazo y brinco por el golpe – imbécil.

Después de tres horas salimos a tomar el jet, ya me encontraba sentada. observando por la ventana, mientras él me sostenía de mi mano.

Estaba con mis hijos en la alcoba hablando y riéndonos a lo loco – suena el celular de Bero ella me mira y con eso descifre quien era, gire la mirada y seguí jugando con mis hijos, escuchándola hablar y preguntarle cómo estaba

 – si papa te extrañamos mucho, después de la boda de mi madre iremos a Inglaterra a visitarte y pensamos estar un lago tiempo contigo.

- bien papá, están casi que terminan la universidad y Juan ya lo pensó, se va contigo a trabajar, si… nosotros lo estamos apoyando ya que mis abuelos no están de acuerdo.