Mire el teléfono incrédulo, me había colgado la llamada, sonreí sin poder evitarlo
Así que esto fue lo que me atrajo de tí- hable a la nada mientras esperaba a que atendiera el teléfono luego de más de veinte llamadas sin atender
Sonreí mientras me levantaba de la cama con el teléfono aún en mano, me rendí esperando a que atendiera y simplemente llame a Santiago para que me consiguiera su información
No me rendiría así de fácil, pero está vez no la amenazaría con dañar a la rubia melenuda que conocí esta madrugada
Me fui a la ducha otra vez para relajar mi cuerpo y vestirme mientras Santi me enviaba la información
A pesar de no recordarla, su simple tono de voz me causaba estragos internos, era extraño, ya que a mí nada me mantenía tan intrigado por más de diez minutos, además, nadie, absolutamente nadie se atrevía a negarme algo
Me vesti con un traje negro, con una camisa blanca de centro
Acomode mi cabello castaño semi largo y lizo hacia atrás
Cuando estuve listo, tome mi teléfono sonriendo al ver que ya tenía un mensaje de Santiago con la información de ella, tome mis gafas de sol y las llaves de mi auto para irme
Estaba satisfecho con el trabajo de Santiago, el era bastante eficiente, porque incluso me consiguió el horario e itinirario de ella para toda la semana
Me subí en el auto Bugatti La Voiture Noire color negro, y tome rumbo al lugar de trabajo de ella
No entendía, que hacia una hacker mundialmente famosa y buscada por la mayoría de los centros de gobierno de la mitad del mundo, trabajando para una televisora de quinta categoría que solo ofrece programas clichés y aburridos, así como doblajes banales que jamás se apegan a las voces de los programas originales
Cuando llegue frente la empresa, estacione en medio del lugar para que cuando ella saliera no pudiera no verme
Tres minutos después llegaron otras cinco camionetas negras que se aparcaron junto a mi auto, varios hombres vestidos de negro también salieron de ellos y se formaron rodeando completamente los autos, sonreí colocándome los lentes de sol y recostandome en el auto para esperar que saliera, observé la hora en la pantalla de mi teléfono
Eran las diez y doce de la mañana, en exactamente tres minutos ella saldría para asistir a una reunión en uno de los sets de grabaciones de un concurso de talentos o no se que
En ese momento es cuando me acercaría a ella para que habláramos, los demás autos y personas eran simplemente una excusa para que ella no finja no verme, y sí en algún momento alguien se interponia mientras habláramos
Todos los que pasaban por ahí quedaron viendo el lugar donde estábamos, pero los ignores porque ellos no me importaban en lo absoluto
Dicho y echo, la mire salir acompañaba de un hombre y una mujer. Ella señalaba algo en la tablet que sostenía la mujer a su lado derecho mientras le explicaba algo, mientras que el tipo de su izquierda simplemente le miraba fijamente
Frunci mi ceño disgustado al reconocer la mirada del tipo, un guardia de seguridad detuvo a los tres diciéndole algo mientras nos señalaba, los tres voltearon a nosotros
Ella no perdió tiempo mirando al rededor y se fijó directamente en mi Bugatti mientras elevaba sus lentes hacia su cabello, al verle le sonreí apenas, dijo algo entre dientes suspirando
Adore ese gesto, al elevar la mirada se fijó directamente en mí sin perder su mirada en ningún otro lado más que en mi anatomía
Le dijo algo a las personas que le rodeaban y les sonrió tranquila, para luego dejarle por completo la tablet a la mujer que supongo es su secretaria o asistente e intentar acercarse a mí
El tipo que le acompaño al principio le detuvo del brazo causando que apretara mi mandíbula. Detestaba ya a ese tipo y ni lo conocía
Ella le dijo algo e intentó soltarse de su agarre, pero el no la dejo. Rodó los ojos soltandose a la fuerza de su agarre mientras su expresión serena y tranquila cambiaba a una molesta y fría mientras le decía algo
Yo no me moví de mi lugar, y tampoco aparte mi vista de ella en ningún momento
Termino de decirle algo y se acercó a mi a paso firme
Los tacones que usaba eran de color rojo vino, así como el jeans azul que andaba que entallaba su figura, se apegaba a su cintura que no era ni tan pequeña ni tan grande, y utilizaba una simple camisa color blanca con flores de colores a mangas remangadas, sus pechos no eran muy grandes, pero tampoco tan pequeños, eran perfectos para su pequeño cuerpo ya que deduzco no mide más de uno ochenta, relativamente pequeña a mi tamaño de uno noventa y siete
Su rostro no tenía ni una pisca de maquillaje, pero aún así se veía preciosa. Sus mejias estaban algo rojas por el frío así como sus labios, sus ojos color negro y sus pestañas no tan grandes pero tampoco tan pequeñas
Si cabello estaba atado en una media cola atando la mitad de su cabello dejando dos flequillos a los lados de su rostro
Se quedó a unos pasos frente mío sin una pisca de miedo, mientras que yo no me moví ni un centímetro de mi lugar
¿Que haces aquí, Aleksis?- se quejo ella, sonreí divertido ante su expresión
Esperabas esto, o algo similar bonita.- dije sin problemas, ella bufo rodando los ojos y cruzandoce de brazos
La verdad es que espere demasiado cuando supuse no harías nada y respetarlas mi decisión. No cambias- respondió ella en cambio, mi expresión se endureció ante sus palabras, me quite mis gafas de sol dejándolas en mi mano
No me iba a rendir bonita, sabes cómo soy. Me conoces mejor que nadie- dije, su expresión vaciló un momento así como sus mejias se sonrojaron un poco, sonreí por los adentros, se observaba malditamente adorable
Lárgate Aleksis- se quejo ella de manera vacilante dándome la espalda, mis nervios se dispararon y prácticamente salte a ella reteniendola de la muñeca para que no se fuera, me miró nerviosa