Amber.
Mi madre seguía en el hospital, aun no despierta me estoy desesperando la cajetilla esta casi terminada y Beau me a dejado sola desde ayer. Me siento incluso mas vacía de lo que me sentía antes.
-Hola cariño. - Joe entro a la habitación.
-Papa… yo lamento no haberte querido decir nada, pero todo esto es mi culpa debí saber que el…
-Shh ya no pasa nada corazón. -Ha estrechado sus brazos a mi alrededor dándome un abrazo extraño realmente. Sentí un pequeño piquete detrás de la nuca y sentía que comenzaba a desmallarme solo pude ver a mi madre abriendo los ojos, sus ojos solo enfundaban terror.
Beau.
Ese maldito bastardo me ha dejado fuera de toda la misión. No podía ser así, ella era mía será mía no puedo dejarla en manos de esa máquina. Pero tenia que formular un plan, o si no Joe era capaz de aventarme con ellos a la base de experimentación. Para futuras lecturas quería guardar todo lo que sabia solo por mera precaución a que algo salga mal.
Era simple, la experimentación con humanos ha sido una fascinación para mi desde hace años, los objetivos casi nunca se lograban, pero al paso de los años hemos formulado inyecciones de alto ADN increíble e inigualable capaz de eliminar cualquier recuerdo o memoria de la persona. Hacerlos esclavos para el gobierno sería una idea millonaria.
Si tan solo John se lo hubiera guardado para sí mismo. Yo podía encargarme de la investigación solo.
Doble la carta guardándola en mi saco, tenia que ver a Amber de inmediato intentar convencerla de irnos mientras aun todo este bajo control.
“Amber estoy intentando localizarte, por favor sé que sigues molesta, pero… podemos solucionarlo solo contesta el celular por favor…”-Su celular ya estaría lleno de mensajes de voz para antes del atardecer. Me estaba comenzando a preocupar.
Dan:
Mm el comandante esta cargando MI paquete, será el mayor de este programa, pero eso es mío.
-Aléjate de ella. -No miro hacia atrás. Estaba claro que sabía que estaría ahí.
-Son ordenes de mi persona.
-De tu creador. -Dijo.
-No me asusta, pero este es mi misión, ella es un peligro.
-Es un peligro para ti. Debí deshacerme de ti en cuanto pude, pero quien diría que eres de utilidad después de todo. – El cabello de la chica soltó un aroma delicado y delicioso.
-Espera. -solté- déjame verla-
-No y aléjate de ella. -azoto la puerta trasera y ha subido con rapidez al auto. Dejándome atrás con polvo y sentimientos encontrados.
Amber:
Sentía un dolor inmenso en mi cabeza, pero estaba tan relajada, era como si los últimos momentos de mi vida estuvieron intactos, pero estaba en… en mi cuarto. Beau estaba dormido a mi lado no tenia camisa… o ropa puesta.
¿Qué ha pasado? Recuerdo…la verdad no lo sé.
-Buenos días, cariño. -Beau me miraba sonriente se veía tan tierno y su cuerpo desprendía calor hacia mi cuerpo.
- ¿Beau... como eh llegado aquí? - me eh destapado solo para observar que mi cuerpo estaba desnudo al igual, sentía demasiado frio hasta que sentí una punzada detrás de mi cabeza.
-Cariño yo te encontré aquí estabas muy emocionada brincabas de un lado al otro, hicimos el amor y pasamos a dormir y bueno henos aquí-sonrió
-Yo… estaba con mi madre y Joe llego hablamos un rato después de ahí realmente no recuerdo nada. -
-Todo esto te esta afectando cariño y eso es algo de lo que quería hablarte…Me encantaría que huyéramos de aquí, tal vez Venecia sea una opción más romántica algo alejado de todo esto. -dije
-Beau… estamos en una misión. - dije en seco. - Debes estar bromeando.
-Es solo que Amber yo no creí que en algún momento podría decirte algo así, pero estoy enamorado de ti, si algo te sucediera no podría perdonármelo. – se ha levantado tomando una toalla y enredando su cuerpo en ella.
-Beau no… nada me pasara, solo déjame considerarlo, pero solo después de esta misión no puedo dejar nada de esto solo por ti.
-Lo entiendo – entro al cuarto de baño.
Estaba molesto, pero ¿qué podía hacer yo? Quería ver a mi madre de inmediato, tome el abrigo de Beau. Partí hacia el hospital sintiéndome demasiado extraña, era como si no recordara nada desde hace días, mis recuerdos ahí están solo están adormecidos.
El hospital estaba frio había mucho menos gente que en otras ocasiones, camine hacia el cuarto de mi madre. Mi corazón se detuvo inmediatamente, 2 enfermeras se encontraban tendiendo la cama y limpiando.
-Disculpa si eh disculpe mi madre se supone que debe estar aquí…-Rebuscaba con la mirada esperando encontrar algo de mi madre.
-Si ha venido su yerno por ella. -ha dicho la enfermera.
- ¿Yerno? -
-Si Ed Roux, aquí esta su firma. No tienen mucho que salieron de aquí. -Dije la segunda enfermera.
-Disculpe, usted dijo… ¿Ed Roux?