Pierre de Bouisson, el actual duque de Armagnac, había tenido una vida extraña y problemática. No conoció a sus padres, pues fue separado de su madre cuando tenía poco tiempo de nacido, y su progenitor falleció sin siquiera haberlo visto. Pierre quedó al cuidado de André de Montreuil, un individuo sin escrúpulos ni consciencia, resentido y con un odio descomunal hacia los Yaroslávich.
Si André se había hecho cargo del pequeño Pierre, no era por altruismo ni porque sintiese algún cariño por el niño o por el fallecido progenitor del mismo, ya que André parecía incapaz de querer a nadie, y para él todos eran fichas que acumulaba para mover a su antojo y conveniencia. De manera que si bien se ocupó de que el chico tuviese la mejor atención y educación, lo que no estaba en capacidad de darle era el amor que todo niño necesita, de modo que habría sido mucho esperar que aquel individuo hubiese desarrollado una sana estabilidad emocional.
André había tenido planes muy concretos para utilizar a Pierre en su absurda venganza personal en contra de los Arlington y del odioso Danworth. Originalmente ni el uno ni los otros habrían interesado a André de ninguna manera, pero André era rencoroso y vengativo, y tanto Kendall Arlington como Dylan Danworth, se habían atravesado de lo más inconvenientemente en su camino por causa de la mujer por la que Jean Pierre había perdido su ya desquiciada cabeza. Los planes originales de André con Jean Pierre eran que tomase por amante a Catalina Enriqueta de Balzac, porque esta joven dama estaba muy cerca de Enrique IV y de hecho se convertiría en su amante, de manera que a través de ella habría tenido acceso al monarca sin levantar las sospechas del desgraciado príncipe de hielo. Sin embargo, todo el lío que armó Jean Pierre por causa de la señorita Saint-Claire y que casi le cuesta la vida, mientras André había estado ocupado preparando las cosas con la joven y para entonces inocente Catalina, desbarataron sus cuidadosos planes, porque si bien Jean Pierre no murió el día que tan estúpidamente había secuestrado a Sophie Saint-Claire, igual lo haría el día de la boda de la susodicha con Lord Arlington, pero a manos de Lord Danworth, y fue este hecho lo que posicionó firmemente a ambos individuos a la cabeza de los odios de André y solo un poco por debajo de Lucien Yaroslávich.
Como André no era estúpido, decidió mantenerse de bajo perfil y esperó, aunque no inactivo precisamente, pues buscó a Viorica para que se hiciese cargo de envenenar algunas mentes, pero como sabía que debía ser cuidadoso, su plan debía efectuarse con calma y tomaría algunos años.
Una vez que el pequeño Pierre dejó de serlo, y alcanzó la edad adecuada para ser transformado, igualmente recurrió a Viorica, pues, aunque sabía que eso no garantizaba que con la transformación se le transfiriesen a Pierre los poderes con los que Viorica había nacido, sí la frialdad y ecuanimidad de aquella criatura y que sabía a él mismo le faltaba, así que habría sido mal asunto que fuese él quien transformase a un individuo como Pierre que sin duda habría heredado el gen de la inestabilidad mental de todos los Bouisson.
Si bien André se había ocupado de que Pierre albergase suficiente odio en contra de sus enemigos, y Viorica de implantar en lo más profundo de la mente del chico la única orden de matar a cualquiera que llevase los apellidos Arlington o Danworth, después de la muerte de André, Pierre no sabía muy bien qué hacer a continuación. Louis y Henri habían desaparecido, y aparte de André, era con Louis, con el único que había tenido un contacto más estrecho, porque las apariciones de Viorica habían sido escasas y puntuales, y con Henri había tratado poco, pues aquel individuo le lucía de la clase que se creía por encima de todo el mundo por la nobleza de su cuna, algo que lógicamente molestaba mucho a Pierre que estaba en la misma posición, de modo que se había quedado prácticamente solo.
Como Pierre no sabía lo que había sucedido con André y con los demás, se sorprendió mucho cuando los Lovets se presentaron en sus propiedades y lo hicieron preso, pero como ciertamente André no lo había incluido en el ataque a Darnley, no se pudo demostrar que estuviese incurso en aquella conspiración pues no lo estaba, de modo que una vez que concluyeron las investigaciones y siendo que él tenía relativamente poco tiempo de transformado y seguía siendo un nya sin un izbretel que se hiciese cargo, fue transferido al Valkinka y se le asignó un zsameni con el que pasaría los próximos cincuenta años, pues los LL sabían que aquel chico aparte de tener la desgracia de haber sido transformado por André como creían todos, incluido él mismo Pierre, era un Bouisson, así que era mejor tenerlo adecuadamente vigilado y bajo la tutela de un zsameni del tipo estricto.
Cuando transcurrió el tiempo estipulado, y aunque el zsameni de Pierre rindió un informe que en apariencia no evidenciaba peligro, Iván recibió la orden de examinar a Pierre, y lo que dijo no tranquilizó a nadie.
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Editado: 16.03.2022