Capítulo 67 De vuelta a casa

El cumpleaños de Vir la encontró más madura que nunca, feliz y reflexiva. Estaba agradecida de todo el camino que había recorrido para tener la dicha de tener una familia que la amaba, dos hijas preciosas y muchos sueños cumplidos. Al soplar las velas de su torta de chocolate de cumpleaños no pidió nada, agradeció por tanto amor que la rodeaba.

Los días siguientes a su cumpleaños fueron un hermoso caos preparando el viaje de regreso a casa, Emma era muy pequeña, pero el pediatra los autorizó a viajar con la niña con un montón de indicaciones y cuidados.

El viaje a Argentina fue todo lo que Vir necesitaba para poder sentirse plena nuevamente. Llegar a su hogar, abrir las puertas, buscar a Pepper en casa de Andy, abrazarlos junto a su hijo y Nico, esperar a Cam por mate, reunir a su gente, fue todo emotivo. Por esos días solo tuvo palabras de amor con cada una de las personas que eran parte de su vida y de su corazón, les dedicó tiempo a cada uno de ellos, valoraba todo lo que significaban en su vida y había anhelado cada momento a su lado.

La primer tarde a solas la compartió con Cam, quien le contó que había decidido darse una oportunidad con Luciano:

- Amiga querida eso es fantástico

- estoy muerta de miedo, soy buena dando consejos sobre vidas ajenas pero me da terror perderme, perder mi libertad

- Luciano es un hombre maravilloso, sabe entenderte, te conoce mejor que vos misma y ha sabido esperarte y comprenderte a lo largo de tu vida, como vos a él.

- lo sé, lo sé, aun así, como te acostumbras a estar solo con una sola persona siempre? No te aburrís?

- Cammmm!! no te aburrís, vos buscas el condimento, vos podés!!, aparte no te estás casando, solo viendo hacia dónde vas, paso a paso, aunque sé que lo adoras hace años y es la causa de tu soltería eterna

- bueno, al parecer él piensa igual porque se siente bastante seguro acerca de mí

- me gusta esa actitud, vos necesitas un hombre al que admires, no un hombre débil, uno dulce y que sepa decirte NO las veces que sea necesario

- verdad, no me gusta pero es la realidad

Luego se puso al día trabajando con Ani en la veterinaria quien le dijo que ir a trabajar sin ella no era tan divertido, ambas se abrazaron y recordaron el largo camino recorrido para llegar a donde estaban. Recordaron juntas las noches de estudio en medio de lágrimas de Vir, los exámenes fallidos y las horas de cursado con café para resistir. Las oportunidades, el levantar las veterinarias de la banca rota y el salir adelante, siempre con su amistad de por medio.

- Ani de mi corazón necesito que sepas que sin tu amistad no lo hubiera logrado, estuviste justo en el lugar y el momento correctos siempre, y te amo por eso

- yo te amo por hacerme un lugar en ese corazón enorme, juntas logramos muchas cosas, pero lo más importante, el estar juntas toda la vida, venga lo que venga

- así será siempre, esté acá, en Europa o en Marte

Nico y Andy eran un caso perdido, con ellos nunca se podía ser seria, la adoraban a Vir y estaban locos con Emma, todos veían a Vir viva después de todo lo vivido, y con su pequeña, atravesando momentos que no tuvo oportunidad de vivir con Roma. Ahora estaba casada y la crianza de Emma era compartida con Charlie, su esposo, que estaba siempre al pendiente de las 3.

Llegado el fin de semana, todos se dieron cita en el hotel, la casa de los árboles estaba llena de gente, tanto que Mel y Fede, con Nico y Andy se quedaban por las noches en su finca. Los asados, la presencia de Mateo, Gabriela, Matías y su prometida, más la totalidad de sus amigos, llenó la vida de Vir por esos días.

Solía tomar largos paseos con Emma y Charlie por la finca. Visitar sus caballos, ocuparse de la huerta como en los viejos tiempos y dedicarse a disfrutar de los momentos de calma que tanto apreciaban, siempre de la mano.

Luciano descubrió ante ellos el talento oculto que tenía, tocar la guitarra y amenizó las noches en el fogón con un variado repertorio.

Realmente era su hogar, su vida, pero también ahora había una parte de ella en Londres, la familia de Charlie, que tanto la habían cuidado y pronto entendió que Charlie se sentía al igual que ella, partido entre ambos sitios. Fue la primera vez que sintió empatía por los sentimientos de su esposo y pudo comprender que ahora la vida había cambiado y debían encontrar una nueva manera de vivir, ya no era solo ella, sino que eran los dos, y debían ser felices ambos. Sintió que siempre le pidió demasiado a Charlie y él siempre estuvo dispuesto a dárselo, por lo cual, solo pudo encontrar gratitud en su corazón. 

Durante una de las tardes de trabajo junto a Fer, a quien había visto menos desde su llegada, ella le contó que se estaba divorciando de su marido. El proceso estaba resultando amargo, y si bien siempre había sido un buen hombre, ahora estaban peleando por la casa, por la custodia de sus hijos y porque inesperadamente él quería una parte del hotel.

Al realizar la inversión, Mateo y Fede protegieron completamente, blindaron lo que hacía Vir, por así decirlo; el hotel no corría ningún peligro,  pero Fer no podía creer que él siquiera lo intentara. Lloró en brazos de su amiga, en aquel despacho que tantas veces las había cobijado del mundo exterior.

- tranquila Fer, lo vas a lograr, tenés como subsistir, si quiere la casa, dásela, no vas a estar en la calle, yo te voy a ayudar y sabés que Cam te va a ayudar a que no pierdas a tus hijos. No es bueno separarlos del padre ambos merecen tenerlas, tenés que separar tu enojo de mujer de lo que es como padre,  pero de ahí a quitártelos y dejarte en la calle, hay un límite que no debería cruzar, vos no estás sola, tenés que tener eso claro ¿qué fue lo que ocurrió?

- él tiene otra familia desde hace 3 años, tiene un hijo y otra mujer con la que vive, por casualidades de la vida lo descubrí

- ¿por qué yo no sabía nada?¿ Por qué no me dijiste?