La dolorosa vida de Ángel.
CAPÍTULO 51
-Al día siguiente-
Silvia, Rose, Sinaí, Sebastián, Fercho, Alvarado, Logna, Yui y Ángel están reunidos con sus carretas. Ángel tiene a Zero, en su forma como hada, dentro de su camisa y este asoma su cabeza afuera de la camisa.
—¡Todos están aquí porque aceptaron ayudarme a derrotar a los comandantes y a Golan! ¡Serán recompensados con mucho dinero cuando terminemos! ¡Se los prometo!
Logna se acerca a Ángel.
—Debemos hablar. No fuiste al casino en la noche.
—Lo olvidé, pero podemos hablar durante el camino.
—Está bien... Ayer vi que tu espada se convirtió en un niño. ¿Es un hada?
—Sí.
Logna saca su espada de la vaina.
—Troche, sal.
La espada se convierte en un hombre muy musculoso.
—Es un gusto conocerte, Ángel.- Dice Troche.
—¿También tienes un hada?
—Sí, su nombre es Troche.
—Interesante... Serás de mucha ayuda, Logna... Sube a mi carreta y hablemos.
—Claro. Troche, tú encárgate de nuestra carreta.
—Sí.
Ángel y Logna hablaron por varios minutos. Logna le contó el por qué quiere matar a todos los comandantes. Ella dijo que un comandante asesinó a todo su pueblo y que ella fue la única sobreviviente. Ella no sabe qué comandante lo hizo, así que decidió matar a todos.
—Interesante. Solo quieres venganza... ¿Cómo sobreviviste?
—Cuando el comandante atacó mi pueblo, mi madre me escondió dentro del cadáver de un caballo.
—Vaya, supongo que es el último lugar en dónde esperarías encontrar a alguien... ¿Y cómo conseguiste a tu hada?
—Creo que de la misma forma que tú. Usé el hechizo para aparecer una espada y Troche apareció.
—Debes tener un gran poder mágico... ¿Sabes en cuánto tiempo llegaremos?
—En un mes.
—Es mucho tiempo...
Ángel voltea a ver a Logna y sonríe.
—Supongo que no me aburriré mucho en este viaje.
-5 días después-
En la escuela, Ángel se despierta en una cama. Ya no tiene heridas y está vestido. Tiene una camisa negra y un pantalón negro.
—Que sueño tan raro tuve.
Ángel se levanta y observa a su alrededor.
—¿En dónde estoy?
Ángel abre la puerta y sale de la habitación.
—¿Hola?
Crismei observa a Ángel y se dirige corriendo a él... Está muy feliz de verlo.
—¡Ángel!
—¿Me conoces?
Crismei abraza a Ángel y empieza a llorar.
—¡Te extrañé!
—D-disculpe, creo que sigo soñando.
Ángel se aleja de Crismei y se golpea en la cabeza usando sus puños.
—¡Despierta, despierta...!
Crismei lo detiene, y con sus manos, acaricia las mejillas de Ángel, que inmediatamente se sonroja.
—Ángel, esto no es un sueño... Escucha lo que te voy a decir.
Crismei le contó a Ángel lo que ocurrió. Le contó cómo fue traído a este mundo y el por qué ya no recuerda nada. Ángel parecía no creerle al principio, pero después se convenció de que era verdad.
Están sentados en la cama de la habitación... Es bastante difícil de creer lo que pasó, pero Ángel parece creerle.
—Es muy difícil de creer... Pero tiene sentido después de todo lo que vi.
—Es la verdad...
Crismei le contó todo lo que le pasó a Ángel. Le contó todo lo que él había vivido.
—¿Yo hice todo eso?
—Claro, eres alguien muy fuerte y valiente, Ángel.
Rem entra a la habitación.
—¡Despertaste, Ángel!
—Hola... ¿Rem?... Ese es tu nombre, ¿no?
—Veo que Crismei te está contando todo.- Dice Rem.
—Sí... Es muy difícil para mí creerlo, pero tiene sentido... Ahora hay dos yo... Y yo soy el bueno, ¿no?
—Considerando el comportamiento del otro, supongo que sí.
—Ya veo... ¿Pueden dejarme a solas? Quiero pensar un poco.
—Claro.
—Solo grita mi nombre y vendré.- Dice Crismei.
—Gracias.
Crismei y Rem salen y Ángel observa sus manos.
—Y-yo estoy en este mundo desde hace 15 años... Perdí los recuerdos que tengo en este mundo.
Ángel se levanta la camisa y observa su cuerpo, que gracias al entrenamiento que hizo desde niño, es muy fuerte.
—Tengo cuadros... Yo no tenía... Eso confirma la historia de que desde pequeño, hice mucho ejercicio para convertirme en un aventurero... Realmente estoy en otro mundo... Tardaré mucho tiempo en acostumbrarme.
Ángel sale de la habitación y empieza a caminar mientras observa el suelo.
—Es muy difícil, pero debo aceptar la verdad... Quisiera que al menos...
Ángel choca con una persona y ambos caen al suelo.
—L-lo siento.
Ángel se levanta y observa a una chica con un bastón en el suelo. La chica tiene el cabello negro y largo, usa lentes negros y tiene unos pequeños pechos. Usa uniforme escolar, que básicamente es una falda corta roja y una camisa blanca con un chaleco rojo.
—¡Lo siento, estaba distraído!
Ángel le extiende la mano derecha.
—¡Te ayudo a levantarte!
La chica extiende su mano derecha.
—¿Eh?
La mano de la chica intenta tomar la mano de Ángel, pero al parecer, no sabe en dónde está.
—Un bastón... Lentes negros...
Ángel se da cuenta de que la chica es ciega.
—¡Lo siento!
Ángel la toma de la mano y la levanta.
—¡No lo sabía, lo siento!
—N-no te preocupes, no me pasó nada.
Ángel recoge el bastón y se lo da.
—Muchas gracias.
La chica sigue caminando y Ángel la observa.
—Es muy linda.- Susurra Ángel y Crismei lo escucha.
—¿Te parece linda?- Dice Crismei, un poco enojada.
Ángel voltea y observa a Crismei, que inmediatamente deja de estar enojada y sonríe.
—Debo admitir que lo es.
—Sí... Es muy linda... ¿Quieres que te muestre la escuela? Estaremos aquí hasta que decidas irte. Creo que necesitas tiempo para acostumbrarte a este mundo.
Editado: 12.09.2020