PARTE IV: EL RETORNO DE LOS EXILIADOS (CAPÍTULO II)

Robert

Veo a mi hijo al lado del inútil de su tío y el cabrito de Adler, la cara de sorpresa al verme es porque algo habrá hecho y no esperaba verme aquí, mientras veo que Isthar se dirige a mi hermano con solemnidad.

Isthar: "Es un honor para mí conocer al líder de los resistentes en persona. Sus hazañas lo honran Comandante."

Damián: "¡Señor! Voy a traducir sus palabras. Es un honor para mí conocer al líder de los resistentes en persona. Sus hazañas lo honran Comandante."

Claudio: "¡PRENDEDLA!"

Vi como varios hombres armados la apuntaban directamente, mientras mi hermano sonreía muy ufano.

Robert: "¡CARLOS VEN AQUÍ! Y no te pegues a tu tío mientras siga haciendo estupideces, ahora ve con el equipo médico que va a revisar al abuelo. ¡Marcus! Hasta que el idiota de mi hermano deje de hacer el ganso, tú serás el máximo responsable del escuadrón Águila", los dos hicieron lo que le había pedido, mientras mi hermano me miraba sorprendido por mi reacción pero lo que le sacó de quicio fue el siguiente paso mío.

Me acerqué hasta la Capitana y sacando mi arma reglamentaria se la entregué y pedí que sus chicas me rodearan como si fuese su prisionero, la cara de tristeza de ella me convenció de que algo sentía por Marcus y creo que a la inversa era igual.

Claudio: "¿Eres tonto o te lo haces? No ves que de esa forma lo único que haces es alargar nuestro sufrimiento..."

Robert: "Vete a la mierda. Tú no tienes ni puta idea de lo que ocurre a tu alrededor."

Me volví con rabia mientras veía como mi amigo acariciaba a su hijo y se acercaba hasta nosotros.

Marcus

Nada más bajarnos, detrás de Isthar como es preceptivo, vi a mis padres y mis suegros junto a mi hijo, me encaminé hacia él mientras que la Gran Canciller fue para hablar con el hermano de mi jefe, la sonrisa del cabrón de Adler me puse sobre aviso de que alguna jugarreta intentaría, empezó hablando la Gran Canciller sobre los logros del tonto, pero lo que me sorprendió fue que fuera tan iluso de intentar usarla como rehén, me giré y vi a mi jefe con el ceño fruncido, gesto inequívoco que está cabreadísimo con su queridísimo hermano mayor.

Robert: "¡CARLOS VEN AQUÍ! Y no te pegues a tu tío mientras siga haciendo estupideces, ahora ve con el equipo médico que va a revisar al abuelo. ¡Marcus! Hasta que el idiota de mi hermano deje de hacer el ganso, tú serás el máximo responsable del escuadrón Águila", su hijo salió corriendo siguiendo a los equipos médicos encargados de comprobar la salud de los rehenes, y yo, a regañadientes, me cuadré ante mi superior y volví con el equipo.

Marcus: "Corre y ve con el capi, no te separes de él si quieres que los malos nos dejen vivir tienes que confiar en él, ¿vale campeón?"

Matías: "Papá no me dejarás como lo hizo mamá..."

Marcus: "Matías te lo he explicado cientos de veces, mamá no se fue por gusto. Lo hizo porque para salvarte hizo el sacrifico de usar su cuerpo como escudo para que pudieras vivir.", no hago más que decir esas palabras y dos lágrimas salen sin que yo les haya autorizado el recorrido.

Veo que mi hijo hace lo que le he pedido, y se acerca con temor hasta mi buen amigo y jefe de escuadrón, lo que ocurrió a continuación no sé explicarlo como sucedió. Me había puesto entre mis compañeros de escuadrón cuando de golpe, siento un desgarrador grito y, antes de que pudiéramos reaccionar, vimos a Claudio tirado en el suelo y a Adler al lado suya retorciéndose de dolor, y al mirar hacia Robert veo a Rebeca, su mujer, corriendo y abrazándose con él.

Rebeca

Después de la charla con mi marido y certificar que no está muerto, voy, cuando termino de organizar la evacuación de este campamento, y me voy hacia la zona de aterrizaje de los equipos de ataque y defensa, veo como el inútil de Claudio intenta arrestar a la líder de la gente que nos está ayudando en esta guerra, y veo como mi marido se encabrona con él y se pone como rehén. Si él es un rehén yo seré otra, corro pero alguien me intenta impedir que no cumpla con mi objetivo,