Mentiras y más Mentiras

Gina

Estoy sumamente nerviosa y asustada, okey...
Nerviosa, asustada, rota, confundida, petrificada...

— No sé si pueda hacerlo, no me obligues a hacerlo.

Digo con los ojos llenos de lágrimas mientras observo a Nicolás en el asiento del piloto de su auto.

— Gina, ya te lo he explicado, no hay otra cosa que hacer, ella ya está muerta solo debemos terminar con esto para poder darle un funeral apropiado.

— Denuncialos, cuentale a la policia lo que hicieron, muestra las pruebas.

— Gina, es la mafia rusa, y esto es una pelea entre mafias, la policia dejará el caso a un lado, Emily ni siquiera era importante para que se tomen el costo de dirigir una investigación. No hay otra manera.

Observo a la perra, alta y peli negra policia que se encuentra afuera del edificio ayudando con la evacuación de personas por el incendio. Sigo pensando que no deberia estar aqui, lo mismo que pensé ayer cuando la vi entrar junto con él y Emily en una urna para cenizas.

— ¿Y para ti? ¿Emily era importante?

Él lleva su mirada a la misma dirección que yo en este momento, dan un largo suspiro.

— Sé que no te agrada Nathalie pero ella solo está haciendo su trabajo, y aunque no lo creas necesitamos su ayuda para salir de todo esto bien librados.

— Responde la pregunta.

Giro mi rostro para escrutarlo con la mirada. Nicolás, Sergio como se llame, hace lo mismo y un por segundo veo en sus ojos el dolor, observo en ellos todo lo que ha cargado y ha escondido detrás de esa coraza dura y fria que ha mostrado. Hubo un momento en donde llegué a pensar que él la habia matado, por su comportamiento frio desde que llegó con las cenizas de mi amiga. Su rostro inexpresivo, su voz siempre calmada, sus respuestas siempre lógicas, no hubo ni un momento donde haya perdido el control o haya derramado una tan sola lágrima. Pero en este momento sus ojos no pueden con todo.

— Yo... Queria que fuera libre, que soñara lo que quisiera y estaba dispuesto a cumplirle cualquier sueño, queria darle el mundo completo, pero fui egoísta y no pude mantenerme lejos de ella...

Hace una pausa, toma aire y nuevamente los ojos frios aparecen, y con su voz menos rota y mas controlada continúa.

— Me importaba tanto que terminé matandola.

Yo solamnete lo observo por un segundo, entendiendo un poco más, pero aunque estoy menos confusa y aún sigo muy asustada me bajo del auto y camino hacia el edificio para empezar mi actuación.

Todo es un caos, hay personas ahogadas por el humo, los bomberos están terminando su trabajo, y varios paramedicos corren con personas en camillas para ser trasladados en ambulancias, yo me acerco donde Sam se encuentra sentado, en la parte trasera de un vehiculo mientras es interrogado por policías. Respiro profundo y aquí vamos.

— Sam, ¡Dios santo! ¿Que ha pasado?

— Gina ¿Donde estabas?

Sam tiene los ojos rojos e hinchados, está temblando, sus manos no encuentran lugar en ningún lado, se levanta de donde está sentado y me abraza bajo las miradas de los agentes.

— Estaba con Jerry, fui a terminar esa estupida relación pero...

Otros paramedicos salen del edificio con una camilla, cuyo cuerpo va adentro de una bolsa negra. Yo los observo por un momento y Sam comienza a sollozar. 
Sé que no es ella, pero en este momento lo siento como si en verdad lo fuera. Observo a Sam quien en sus ojos de dolor se relfeja una condolencia y las parte mas difícil de mi actuación empieza.

— El fuego inició en nuestro departamento, no sé que pasó, Emily estaba dormida o algo pero las llamas consumieron todo tan rápido que los bomberos no pudieron salvarla a tiempo.

— ¿Que dices, como que no pudieron salvarla,?

No sé que tan alto digo eso pero estoy a punto de caminar hacia el cuerpo en la bolsa cuando Sam me toma del brazo y los agentes se acercan a nosotros.

— Lamentamos mucho su perdida señorita...

— Jackson

Estrecho la mano de los agentes finalizando con la pelinegra quien me lanza una mirada de complicidad.

— Soy la agente especial Nathalie Coleman y él es el agente especial Mark Jenkins, necesitamos hacerle unas preguntas.

Yo solo asiento, y ella me guia hacia un lado cerca de la camioneta donde se encontraba Sam.

— Señorita Jackson, ¿A que hora salió usted de su apartamento?

— No sé, a la una de la tarde creo, una y minutos tal vez.

—¿ La señorita Carter se encontraba en el apartamento antes de que usted saliera?

— Si, ella estaba aun dormida, anoche tuvimos un evento del cuál llegamos muy tarde a casa.

Nathalie y el otro agente se miran entre ellos, luego me ven nuevamente y ella continua.

— El señor Samuel Cooper nos comentó que ella se fue antes del evento, incluso que estuvieron buscandola.

Los nervios me atacan, siento que estoy perdiendo el control y la mirada dura de Nathalie me intimida demasiado, auque ambas sepamos la verdad, la actuación de ella sin duda es espectacular.

— Si.. , ella entró en pánico anoche, huyó antes de presentar su diseño. Estuvimos buscandola pero yo la encontré en casa y me quedé con ella. Llamé a Samuel para decirle que todo estaba bien y que se quedara en la fiesta. Ella... Solo estaba abrumada al ver tantas personas.

Aun recuerdo cuando llamé a Sam para decirle eso. Ahora que lo pienso bien, desde ahí comenzó mi actuación. Mientras Sergio buscaba a Emily llamé a Sam para tranquilizarlo, le dije que todo estaba bien mientras me moria de los nervios.

— ¿Sabe si ella estaba pasando por algún problema, tenia algún diagnóstico psicológico, psiquiatrico tal vez... Tomaba algún tipo de medicamento?

— No... Bueno, estuvo en terapia, ella tuvo una infancia difícil, pero luego de mudarnos a New York, no continuó asistiendo, ella decia que estaba bien. ¿ Que tiene que ver todo esto con el incendio? No... No lo entiendo.

Nathalie suspira, hace ciertas anotaciones y suspira.