Esta confundido y desorientado, no entendía como había llegado a mi casa, me levante, baje las escaleras, me dolía demasiado la cabeza, y al ver las luces de la casa aumentaba el dolor, me estaba dirigiendo a la cocina cuando escuche a mi abuelo decir “¿La viste? Dime, ¿Ella te hizo daño?” Le respondí “Ella me mostro lo que hizo por ti, cuando te salvo de Cristalino, y cuando jugabas con ella, pero, no me hizo daño, solo que tengo una fuerte jaqueca” Di la vuelta y me dirigí a la sala mi abuelo estaba sentado en su sofá, frente a la chimenea, lo note pensativo, me acerque y lo tome del hombro.
Camilo: ¿Abuelo?
Abuelo: Estoy bien, tu… tu ¿Cómo estás?
Camilo: Tengo una jaqueca abuelo, pero estoy bien.
Abuelo: Me alegro, hay algo que tienes que saber.
Camilo: ¿Qué es?
Abuelo: Siéntate.
Camilo: Esta bien, pero, no me ocultes nada.
Abuelo: La regla familiar no lo permite después de todo.
Sonreímos y soltamos unas cuantas carcajadas.
Abuelo: Janna, ella te mostro visiones, por eso tienes las jaquecas, yo presentía que estabas metido en algo, pero, cuando el alcalde me dijo lo que estabas
tramando entre en pánico, fui a buscarte al refugio en donde te reúnes con tus amigos, y en el camino te vi desmayado en el bosque.
Camilo: Si… Y me trajiste aquí, para que pudiera descansar.
Abuelo: Pero también te traje para que estuvieras a salvo, Janna estaba ahí, la vi, ella no me reconoció, han pasado años, sin embargo, me miro confundida, como si le recordara a mí de joven, o en este caso, a ti.
Camilo: Ósea que…
Abuelo: Janna cree que tú eres yo cuando era joven, ella no sabe nada, cuando te vio, pensó que no había pasado mucho tiempo del fallo en Cristalino, esto tendrá graves consecuencias, pensara que su padre aún está vivo, y no descansara hasta encontrarlo y vengarse.
Camilo: Pero ella mato a su padre, ¿Verdad?
Abuelo: No, José se suicidó en la alcaldía, pero solo años después se supo la noticia.
Camilo: ¿Y el cuerpo?
Abuelo: Lo sacaron a escondidas, y lo enterraron.
Camilo: ¿En dónde lo enterraron?
Abuelo: Nadie lo sabe, pero, lo que nos debe preocupar ahora es el pueblo, Janna comenzará a atormentar a todos con sus mayores miedos, hasta que no sepa que paso con su padre este pueblo no estará en paz, Ella, DESPERTO.
Camilo: ¿Despertó? ¿El pueblo no estará en paz?
Abuelo: Cuando descubrimos que el alma de Janna seguía atrapada en cristalino, empezamos a pensar como detenerla, ella estaba atormentando a todos, el pueblo estaba al borde del colapso, así que tomamos todas sus pertenencias, las de ella y las de su padre, lo lanzamos a Cristalino, y se hundió en la poca agua que había en ese lugar. Al principio parecía funcionar, pero, ella no creyó totalmente, así que yo me acerque al borde de la represa y le grite “El ya no está, pero te prometo que pagara por lo que te hizo, ya deja en paz al pueblo, hazlo por mi” y desde entonces el pueblo consiguió la calma, hasta que ella de algún modo te vio.
Camilo: Pero si le entregaste sus cosas, ¿Por qué cree que aún sigue vivo?
Abuelo: Yo solo digo, no sabemos cómo funciona ese mundo oscuro, quizás lo haya olvidado. Te pediré algo, ya para con esta investigación, por favor.
Me levanté, y el me tomo de la mano mientras mi abuelo me repetía "Despertaste el mal, pero aún hay tiempo de corregirlo, no salgas o Janna te verá y entonces este pueblo empeorará, la gente está cada vez peor, ayer vi como el panadero vendió un encargo grande a la repostería y cuando el gerente le pago, este lo apuñalo a sangre fría, una y otra vez, ahora huyó como todos lo hacen, ¿Sabes porque? Porque Janna descubrió su miedo y se aprovecho de el, su miedo era que se quedará sin trabajo o que la paga no fuera suficiente para mantener a su familia, y no tuvo otra opción que hacer lo que hizo, obtener todo el dinero del gerente y huir con su familia de Santa Janna, así que piénsalo bien, porfavor" guarde silencio y salí de ahí.
Estaba dirigiéndome a casa de Valeria cuando me topé con Carlos, nos miramos a los ojos y lo saludé.
Camilo: Ey que tal Carlos ¿Cómo estás?
Carlos: Hola, bastante bien.
Camilo: Me alegro, nos vemos.
Me hice aun lado y empecé a caminar, cuando el de repente me tomo del brazo y me detuvo.
Carlos: ¿A dónde vas?
Camilo: A casa de Valeria.
Carlos: ¿Te estás viendo con ella?
Camilo: SI, pero solo para asuntos personales.
Carlos: ¿Qué tan personales?
Camilo: Eso no te incumbe.
Carlos: Oye cálmate.
Camilo: Tú tienes tu vida y yo la mía, ah y también a María.
Carlos: A ella no la metas.
Camilo: Mira, jodete, tú eres el infierno de María, así que déjame en paz, no quiero entrar ahí.
Carlos: ¿QUE?
Se lanzó hacia mí, pero yo le puse el pie, el cayo y lo pateé en el estómago, y vi como María nos estaba observando, desvié mi mirada y corrí hacia casa de
Valeria, llegue y toque la puerta, ella abrió y se asombró, yo le pedí que me dijera donde tenía los papeles que habíamos recogido, ella me llevo a su cuarto y empecé a buscar, ella estaba en silencio, yo buscaba y buscaba, pero, en ese momento Carlos se estaba levantando, María lo ayudo y le pidió que se calmara, la bofeteo enfrente de todos los que allí estaban y empezó a correr con dirección
hacia donde yo estaba, María se levantó y lo siguió, encontré el archivo, decía “Por favor cancelar la cita del alcalde, causas: Indispuesto para la remodernizacion de Cristalino” Por eso no había llegado, tenía eso claro, ahora debía buscar la
respuesta al como calmar a Janna, de repente Carlos empezó a golpear la puerta enfurecido y María detrás de él intentando calmarlo, guarde los papeles que tenía en mis bolsillos, Salí con Valeria por la ventana y corrí al bosque. En el súper mercado se encontraba Castro, este estaba buscando sopa enlatada, y se topó con Miguel, estos rompieron el hielo y empezaron a hablar, al parecer se hicieron
amigos otra vez, Carolina la cual los observaba le agrado esto, y Castro les hablo del regalo, de “Los 7 exploradores” Entonces esos fueron al refugio. Mientras corría recordé el suicidio del fundador, de repente me dirigí al refugio, saque los papeles de mis bolsillos y empecé a leer, los papeles contenían las citas, reuniones y salidas del alcalde, entonces pude notar que en una decía “Quedar con el secretario administrativo” Lo que diferenciaba a esta era que no tenía un sello rojo, el cual no le faltaba a las demás, entonces supuse que había faltado, y que ese día se suicidó, la apreté y sentí una incomodidad rasposa, la voltee y había hormigón, ahora si sabía dónde estaba enterrado posiblemente el fundador. Valeria me estaba mirando y yo le dije “Ahora te explicare todo” La tome de la mano y le dije que me siguiera, cuando íbamos a salir estaba entrando Carlos con María detrás, el me agarro del cuello y yo hice lo mismo, le empecé a dar golpes en el estómago y el me derribo, justo después que me levantara habían llegado
Castro, Miguel y Carolina, estaban alegres, los mire con confusión y Carlos voltio a mirarlos, yo lo empuje y Salí corriendo, pensé “El hormigón es muy común, sin embargo, si yo me quisiera deshacer de un cuerpo, lo enterraría lejos de todos y del pueblo” Y en el bosque había unas ruinas con restos de hormigón llegue ahí, no sabía por dónde empezar a cavar además no tenía pala, así que note una abertura y con un pedazo de madera hice palanca, esta se levantó y la quite de encima, no fue difícil, esas ruinas llevaban años allí, cuando quite el pedazo de hormigón, los demás habían llegado, todos se pusieron en fila y me miraron, Carlos me tomo del hombro y al parecer subió su puño, pero mi mirada estaba concentrada en lo que estaba debajo del hormigón.
Carlos: ¡¿QUE TE CREES IMBECIL?!
Todos le pedían que se calmara y Valeria me pregunto que estaba mirando fijamente, cuando siguieron mi mirada, todos quedaron en silencio y al parecer,
asombrados, confundidos y haciéndose la misma pregunta que yo ¿Ese es el fundador?