Sehun se volvió hacia Xiumin y le tendió la mano a la correa de Suho.
Cuando también le tendió la correa de Jongdae Sehun negó con la cabeza. —Jongdae te pertenece ahora a ti, pero espero que lo cuides mejor de lo que lo hizo Kris. No quiero ver más golpes sobre él. ¿Me has entendido?
Xiumin se quedó boquiabierto por la sorpresa. Y rápidamente de golpe la cerró cuando asintió con la cabeza. La mirada que Xiumin le dio a Jongdae le dijo a Sehun que Jongdae estaba en buenas manos. Xiumin lo cuidaría y lo trataría como una mascota debía ser tratada. Sehun tenía una idea de que la vida de Jongdae estaba a punto de cambiar a lo grande.
—No puedes hacer eso. —Kris gritó cuando él se puso en pie. Limpiándose la sangre de sus labios con la mano continuó.
—Jongdae me pertenece a mí. Lo reclamé como mío y de nadie más. Tú no tienes derecho a quitármelo.
Sehun se volvió hacia Kris, la ira lo llenaba haciendo que sus músculos se contrajeran preparándose para la lucha que sabía se avecinaba. —Tengo todo el derecho. Yo soy el líder de los Death Dealers. Puedo hacer cualquier maldita cosa que quiera.
—Entonces, te reto por el liderazgo de los Death Dealers.
Gran sorpresa allí. Sehun alcanzó su mano atrás de él, regresándole la correa de Suho a Xiumin.
—Xiumin, cuida de Suho, hasta que termine con este cabrón.
—¿Sehun?
Sehun se volvió para mirar a Suho. Extendió la mano y acarició un lado de la cara de Suho.
—Todo está bien, pequeño. Tú debes hacer todo lo que Xiumin te diga hasta que haya terminado aquí, y luego subiremos y tendremos aquel baño.
Los ojos de Suho se agrandaron y dominaron su pálida cara cuando él asintió con la cabeza. Agarrando la funda con sus pertenencias más cerca de su pecho, Suho se acercó para estar más junto a Xiumin. Sehun asintió con la cabeza, y le dio una pequeña sonrisa para tranquilizar a Suho. Suho aprendía rápidamente. Eso era un buen presagio para su futuro juntos.
Suho tenía mucho que aprender acerca de lo que se esperaba de una mascota, especialmente la mascota del líder de los Death Dealers. Sehun se sintió alentado por la rápida obediencia de Suho eso podía llegar a ser un entendimiento más rápido de lo que había pensado inicialmente.
Una vez que Sehun estuvo seguro de que Xiumin iba a tener mucho cuidado con Suho, dio media vuelta para hacerle frente a Kris. Él no se sorprendió por la mirada de suficiencia en el rostro de Kris. Kris siempre se había sentido como si fuera mejor que los demás. Era una de las muchas razones por la que los otros en la banda lo odiaban.
—Una vez que sea líder, voy a divertirme con tu pequeño Juguete, Sehun.
Sehun alzó una ceja ante la insistencia de Kris de que le iba a ganar. —Xiumin —Sehun dijo, ni siquiera volvió la cabeza para mirarlo. —Si algo me pasa a mí, Suho te pertenece a ti. En el momento en que pienses que voy a perder, tomas a Suho y te vas. Kris no lo va a tener. ¿Me entiendes?
—Sí, Sehun. —Xiumin respondió.
Sehun asintió con una sonrisa al ver el rostro lleno de rabia de Kris. No importaba lo que pasara, Kris ahora sabía que sus manos nunca llegarían a Suho. En el momento en que percibiera que Sehun podía perder, Xiumin se iría y se llevaría a Suho con él.
Sin embargo, él no tenía ninguna intención de perder. Por el contrario, él tenía mucho por qué esperar con impaciencia. Sehun le hizo señas con las manos a Kris para atraerlo hacia él. Estuvo satisfecho cuando la cara de Kris se puso aún más roja.
Kris era imprudente cuando se enojaba. Hizo varios movimientos estúpidos. Él no pensaba las cosas, solamente reaccionaba. Antes de que Kris tuviera su primer batazo, Sehun supo que la pelea había terminado. Kris iba a perder.
Sehun esquivó un giro de Kris y llevó su puño a las costillas de Kris. Se estremeció un poco por la fuerza de sus nudillos golpeando a Kris, pero él había logrado lo que se propuso hacer. Había escuchado las costillas de Kris romperse. Sehun aterrizó otro golpe en los riñones de Kris.
Estaba a punto de girarse sobre sus piernas por detrás de Kris y empujarlo a su espalda cuando escuchó que alguien gritaba y sintió un dolor agudo y repentino en el costado. Antes de que Sehun pudiera incluso dar un paso atrás, supo que Kris lo había apuñalado.
Justamente le mostraba lo que Kris podía hacer para quitarle el liderazgo. A él le gustaba hacer trampa, especialmente cuando iba perdiendo. Y no importaba la cantidad de sangre que goteara por la pequeña herida en su costado, Sehun todavía estaba decidido a ganar.
Sehun se dio la vuelta agarró la mano que sostenía el cuchillo de plata entre sus manos. La otra mano se envolvió en la garganta de Kris, apretándola lentamente. Sehun en realidad no quería matar a Kris, pero él sabía que estaba suficientemente enojado en este momento como para hacerlo.
Trató de recuperar el control de su temperamento, incluso cuando sus dedos se estrecharon un poco más alrededor de la garganta de Kris. Él estuvo un momento inestable cuando Kris cayó de espaldas al suelo. Después de que cayera hacia abajo, Sehun se sentó a horcajadas sobre el cuerpo de Kris.
Él forzó a la mano con el cuchillo a ir hacia la garganta de Kris, agarrándola con ambas manos. La hoja afilada quedó más cerca de la garganta de Kris, sus ojos se agrandaron más. Él comenzó a luchar salvajemente.
Editado: 28.05.2023