Capitulo 3

 - Bueno, aquí vamos - Dijo Anderson mientras entraba por la puerta giratoria del edificio.

 Por fuera era gris y descuidado, pero por dentro todo brillaba, parecía un palacio reconstruido, todo el lugar estaba poblado de gente grande y con ropa negra, claramente eran guardias de Thomas.

 - Señor Anderson, por favor, se le espera en el séptimo piso - Señalo un guardia que indicaba a un ascensor listo para subir.

 Todo era raro, no entendía el por qué estaba en este lugar, parecía que este tal Thomas era de bastante dinero además de la gran cantidad de guardias a su disposición. Subió al ascensor, el cual era completamente dorado, llego al séptimo piso y sus puertas se abrieron, el lugar no desteñía del lobby, era resplandeciente, piso de mármol y estatuas por todos lados; pinturas famosas y marcos de oro recubrían un largo pasillo. Anderson llego a una gran puerta de un color rojizo, la golpeo junto con la manilla que había de la boca de una figura de un león donde se supone debería estar el pomo de la puerta.

 - Adelante - Se escuchó una voz femenina desde dentro de la habitación.

 - Con su permiso - Dijo Anderson antes de entrar.

 El lugar era inmenso, tenía sillones de terciopelo rojo en ambos costados, mesas de centro rodeadas por sillones aterciopelados junto con unas alfombras gigantes de diversos diseños, una gran chimenea al lado izquierdo con diversos objetos y fotos sobre ella; un par de espadas colgaban de su pared, diversas pinturas y retratos adornaban el resto junto con raras vasijas; un gran escritorio de madera tallado a mano con diversas figuras neoclásicas y tras él, sentado en una silla de ejecutivo alta y negra estaba Thomas, a su derecha, una mujer de unos veinte nueve años de edad, vestía de un azul oscuro bien elegante y su pelo tomado en cola de caballo.

 - Señor Torres, bienvenido a su primer día de trabajo, los presento ella es Verónica, mi asistente y también quien le dará información sobre sus labores aquí -

 - Un gusto señorita Verónica – Dijo Anderson ofreciendo un apretón de manos.

 - El gusto es mío señor Anderson - Aceptando el saludo.

 - Bueno ya terminada la presentación, señor Torres, en esta carpeta están los planes de mi campaña por la alcaldía de Winter por los próximos dos meses, le pido por favor que los lea para que esté al tanto de todo - Dijo Thomas mientras le entregaba una carpeta roja.

 - No se preocupe, la leeré- Dijo mientras abría la carpeta para ojear su contenido.

 - Como podrá ver señor Anderson, hoy hay una reunión del concejo, en él se detallarán lo que queda de planes para el periodo de alcaldía del señor Thomas - Explico Verónica mientras señalaba unos párrafos en las primeras hojas de la carpeta.

 - Creo que se tiene mucha fe en ganar las elecciones, veo que ya está planeando su plan de gobierno - Recalco Anderson.

 - Si no me tuviera fe no estaría en la política señor Torres, bueno, el tiempo apremia Verónica le indicara donde está su casillero con su traje para hoy, lo espero en el lobby – Concluyo Thomas, mientras Verónica llevaba a Anderson al piso tres.

Todo paso de forma bastante protocolar, tomo el traje negro preparado para él y fue al lobby acompañado de Verónica, una vez se reunieron con Thomas, prosiguieron a la reunión del concejo.

 Como guardaespaldas estuvo junto a Thomas en todo momento, llegaron a un antiguo museo de estilo neoclásico, al entrar, fueron a una de las salas que fue remodelada como una gran sala de conferencias con una gran mesa, había al menos unas diez personas sentadas con guardias a sus espaldas. Cuando Thomas se sentó se quedó a sus espaldas al igual que el resto, no entendía nada de lo que se hablaba, bueno, tampoco le importaba mucho.

 El tiempo paso rápido, su trabajo por el día había concluido y podía volver a casa por ahora y debía presentarse en dos días más de nuevo a trabajar, por ahora todo le parecía normal, nada que sospechar de Thomas a pesar de la extraña propuesta de trabajo.

 - ¿Todo bien en tu primer día? - Pregunto Andrea desde el sillón cuando vio entrar a Anderson por la puerta.

 - Sí, hasta ahora todo normal, aunque sigo pensando que hay algo raro en todo esto, por cierto, ¿dónde está Paz? -

 - Creo que fue a ver una fuente para escribir no sé qué cosa, debe estar por llegar -

 - Y pensar que antes era más holgazán, oye, una consulta, ¿en tu biblioteca tienes algo que hable sobre Thomas o su política?, sigo pensando que algo raro está pasando -