El plan de la omega se cae

Pov Valentina.

Entró al hospital casi empujando algunos doctores, observó a la mujer que estaba en la recepción quién se asustó al sentir las feromonas de la omega alterada, Valentina miró a la mujer a los ojos con desesperación a pesar de que no tenía una marca en su cuello podía sentir todas las emociones y el miedo de Giovanni por lo desconocido.

- ¿Dónde está Giovanni Lombardi? - Gritó desesperada a lo que llegaron los de seguridad al ver a la omega ansiosa. - ¡Hablen por una mierda!

La recepcionista tembló al ver la intensidad de la omega sangre pura, uno de los guardias intentó agarrar a la fuerza la mano a Valentina cuando todos escucharon el rugido de un alfa igual de sangre pura, todos retrocedieron al escuchar el rugido del alfa, Valentina se dio la vuelta y vio a Xavier quién caminó con pasos firme hacia donde estaba su hermana, esté inmediatamente abrazó a su hermana para darle protección y advertir a los demás que estaba dispuesta a pelear si era necesario. Xavier miró de nuevo a la recepcionista quién volvió a temblar.

- El paciente está en la habitación 213. - Respondió la mujer con voz temblorosa. - Esta a mano derecha.

Ambos hermanos en compañía de Catalina buscaron la habitación de Giovanni, hasta que dieron con él en eso vio como una enfermera salía de la habitación, Valentina se acercó a ella y la acorraló estaba que perdía las fuerzas en cualquier momento, la salud de Giovanni dependía de un hilo al igual que su paciencia y su sed de venganza y odio que iba cada vez en aumento.

- Soy la novia de Giovanni y por favor quiero saber la condición de él. - Habló Valentina con la voz quebrada. - ¿Está bien?

- Él está en buenas condiciones, le pudieron extraer un vidrio que se le había quedado incrustado en la frente, pero ya está mejor. - Respondió tranquila, calmando a la omega. - La policía estuvo aquí hace unos minutos, pero se acaban de ir, por el momento solo uno puede entrar. - Sé dio la vuelta la mujer.

Xavier le sonrió a Valentina para que entrará primero a la habitación, la omega sonrió agradecida y abrió la puerta para entrar a la habitación. Valentina se cubrió la boca al ver a su pareja en mal estado, y con algunas vendas, Giovanni abrió los ojos haciendo que la omega se arrodillara en el suelo de la emoción de saber que aún seguía con vida, la omega buscó la mano de su pareja y la apretó con suavidad.

- Tenia tanto miedo de perderte. - Confesó Valentina mientras lloraba. - No podría vivir en un mundo sin ti y mi familia. - Valentina besó su mano. - Siempre has estado a mi lado cuando más te he necesitado que no sepa como agradecerte todo lo que has hecho por mí. - Sonrió. - ¿Cómo fue que paso todo esto?

Giovanni intentó enderezarse en la cama, pero se quejó en el intento, Valentina lo ayudó para que se acomodará bien en eso Giovanni suspiró para empezar a hablar.

- Todo estaba bien, ya que es el auto que utilizó siempre, hice unas diligencias, pero cuando regresé quise frenar porqué el semáforo estaba en rojo pero no pude y por eso choque. - Giovanni observó fijamente a la omega. - Sé lo que estás pensando, también creo que esto fue provocado.

Valentina soltó la mano de Giovanni y empezó a caminar con molestia, el beta conocía perfectamente el carácter explosivo de la omega.

- Solo es una hipótesis, pudo haber sido otra cosa. - Intentó Giovanni calmar la ira de Valentina.

- ¿Otra cosa? - Gritó molesta. - Obviamente fue esa maldita de Christina, y la perra que tiene por madre, obviamente es una advertencia por lo que hice con Christina, pero esto no se va a quedar así le voy a mostrar quién soy yo.

- Valentina tienes que pensar que esta lucha de lo que sea que estén peleando hay personas de por medio. - Suspiró el beta. - Esta Catalina, Xavier y Rowen. - Giovanni sonrió al verse en la cama del hospital. - Y claramente yo también voy en el paquete de su odio. Tienes que pensar antes de actuar, no puedes apostar por la vida de los demás.

- Es que me da rabia saber que esas malditas se pueden salir con las suyas y yo no puedo hacer nada. - Valentina golpeó el suelo con sus zapatos. - Amo, entiende que tengo que liberar esto que llevo adentro o si no me volveré loca y eso no quieres Verdad?

Valentina se acercó a su pareja y besó sus labios a lo que correspondió con suavidad, le dolía todo el cuerpo, pero el beso de Valentina fue el mejor analgésico que necesitaba en ese momento, en eso ambos escucharon el golpe de la puerta, Xavier tosió con diversión por haber interrumpido a la pareja.

- Lamento arruinar el momento romántico entre ustedes, pero acabo de recibir un mensaje de Christina y quiere que vayamos a la casa de Papá que nos quiere dar una noticia.

- Espero que sea su divorcio, para llevar cervezas y unas alitas de pollo para celebrar. - Valentina bromeó a lo que su hermano sonrió, besó la mejilla de su pareja y salió de la habitación.

Ambos salieron del hospital y se subieron cada a uno a su respectivo auto, sabía que la guerra estaba cada vez más cerca.

(.....)

El ambiente estaba tensó causándole escalofríos a ambos hermanos, la ama de llaves lo llevo a la habitación donde abrió la puerta, un olor suave a canela les dio la entrada a la habitación de su padre, Valentina abrió los ojos al ver a su padre más delgado, y en cama tan solo había pasado dos semanas desde que había visitado a su papá pero no sabía que lo iba encontrar de esa manera, el hombre moribundo que estaba en la cama no era el gran Rowen Ferrari, solo era un alfa escuálido. Valentina apartó a Christina y tomó el rostro de su papá quién estaba frio al tacto.

- ¿Qué le hiciste a mi papá maldita estúpida? - Sé dio la vuelta Valentina mientras empujaba a Christina. - ¡Papi! - Sollozó la omega. - ¿Qué te he ha pasado?, necesitamos ir a un hospital, estas muy débil y te puedes morir.