- Esto es una mierda, intento no involucrarme en asuntos que no son míos y ahora tengo que pelear contra licantropos sin terminar muerta en el intento.
- Que triste Elizabeth pero ahora estas en esto, entonces.- Damon se mantuvo en silencio.
Damon corrió a velocidad vampirica hasta Jules pero esta fue mucho mas rápida y se subió al techo de una camioneta donde tenían a Caroline y luego bajo, uno de estos hombres encendió un lanzallamas pero Stefan corrió a tiempo e hizo que el hombre quedara mirando hacia las otras personas intentando quemarlos, en esas un chico se iba a lanzar contra Damon pero corrí a tiempo y le saque el corazón, Stefan le rompió el cuello al chico y comenzó acercarse a otro que sostenía una ballesta que lanzaba estacas, este lanzo una pero Stefan la detuvo y se la lanzo justo al cuello, mientras que Damon peleaba con unos y yo les arrancaba la cabeza vi como uno de estos le había enterrado una estaca a Stefan para luego sacársela, con un movimiento de mi mano había lanzado el chico con tal fuerza que había oído como se habían roto un par de huesos, cuando intente a ayudar a Stefan, Jules le había disparado a Damon al cual este cayo al suelo; me levante dispuesta a arrancarle el corazón pero no había contado con que uno de ellos tenia otra ballesta y esta fue a parar a mi estomago, con la poca fuerza que tenia le rompí el cuello con tan solo chasquear mis dedos y luego de eso me quite la estaca de mi estomago, en un momento el hombre que había derribado a Damon se levanto y cogió una estaca que estaba al lado de el, cuando iba a clavársela justo en el corazón este la soltó y comenzó a gritar mientras se agarraba la cabeza al igual que Jules y otras pocas personas que ya tenia acorralada a Caroline, pero no era yo la que les estaba haciendo daño.
- ¿Que esta pasando?- Pregunto Caroline mirando hacia su alrededor.
- ¿Que les están haciendo?.- Pregunto esta vez Tyler.
Guié mi mirada hacia donde había un hombre entrando con sus manos hacia delante haciendo un hechizo, ¿Martín? ¿Que esta haciendo el aquí? ¿Como nos encontró?, Stefan Damon y yo nos comenzamos a parar.
- Elijah le prometió algo a Elena.- Hablo el.- Vine a ver que se cumpla, ahora corran.
Stefan se acerco a mi y luego Caroline y Damon.
- Tienen que irse, ahora.
No lo pensamos dos veces y comenzamos a caminar. Damon se fue a la mansión mientras que Stefan y yo acompañamos a Caroline a su casa.
- ¿Esta tu mama?.- Pregunto Stefan mientras que Caroline sacaba las llaves.
- No, esta trabajando.- Respondió mientras abría la puerta.
- Te acompañamos un rato si quieres.- Prosiguió Stefan.
- No, estoy bien.
Stefan se arrecosto en el marco de la puerta.
- No tienes que fingir conmigo, cualquiera estaría abrumado con todo lo que paso hoy.
- Estoy bien.- Volvió a repetir al cual Stefan asintió.- Ya no soy aquella Caroline indefensa, yo se protegerme.- Respondía con una pequeña sonrisa.
Stefan asintió.- Seguro.
- Creo que necesito darme un regaderaso.
- Seguro.
- Gracias a ambos.- Ella me miro, yo solo asentí y Stefan se despidió de ella.
Caminamos hacia la cera de la calle.
- Puede que suene loco pero, tal vez no me disgusta tanto Caroline.- Dije mientras me encogía de hombros.
Stef sonrió.- ¿Solo un poco?.
- Si, solo un poco, no abuses.- Sonreí.
- Lo siento por lo que dije hoy.- Dijo mientras caminábamos.
- ¿Porque no confías en Elijah?, el es una buena persona aunque no parezca.
- Como voy a confiar en alguien que no conozco y que intento secuestrar a Elena.
- Hey, el tenia sus razones.- Me quede en silencio.- Aunque si confías en mi se que puedes tratar aunque sea un poco en confiar en el.- Me detuve a mirarlo.
Este también me quedo mirando.- Bien, intentare pero no esperes mucho.
- Bien, que buen trato señor Salvatore.- Dije mientras extendía mi mano y sonreía.
- Es un placer hacer un trato con usted señorita Mikaelson.- Estrecho mi mano para luego abrazarme.
No podía estar enojada con el, Stefan es muy importante para mi, tal vez un poco mas importante que Evan, espero que el no me mate.
- Necesito ir a casa de Elena ¿Me acompañas?.- Pregunto mientras tenia uno de sus brazos al rededor de mi.
- No lo creo, necesito bañarme y cambiarme, la sangre de esta blusa con se va a quitar tan fácil.- Lo mire.
- Claro, que descanses.- Me abrazo y yo correspondí.
- Lo mismo digo.- El me sonrió antes de marcharse.
Luego de varios minutos, 20 para ser exacta llegue a mi departamento lo primero que hice fue ir a la ducha y darme un merecido baño, se que tendría que botar esa blusa o tal vez quemarla, créanme la sangre no desaparece tan fácil. Cuando termine de bañarme me coloco una pijama y tome una bolsa de sangre que tenia en el refrigerador, luego me acosté en mi cama y quede dormida en los brazos de morfeo.
Editado: 10.04.2020