Al llegar al hotel, bajé del auto rápidamente después de ayudar a Fiorella. Mi meta: encontrar al encargado de la obra, no debia toparse con ella.
— debo atender algo, bebe algo.
— pero vamos a hablar con el proveedor ... — la he dejado hablando sola, apresuro el paso por todo el pasillo, miro hacia atrás y Fiorella tiene el entrecejo fruncido, y la veo dar un paso en mi dirección, asi que rápidamente entro al ascensor.
Apoyo mi frente en el ascensor y cierro los ojos,¿Qué rayos me estaba pasando? La puerta del ascensor se ha abierto
— León — cierro los ojos, esto no podía estar pasando — esto es maravilloso — Maure, la chica con la que estuve saliendo hace un par de meses, estaba en el Petra.
— ¿Qué haces aqui? — salgo del ascensor, no me agradaba ser antipático con nadie pero con ella debia serlo, terminé nuestra relación por que se estaba volviendo muy controladora. Me llamaba cada diez minutos y cuando no respondía, comenzaban los reclamos.
— mi padre ha querido estar en el Petra antes que lo modernices, aqui tiene lindos recuerdos, vine con él y me alegra haberlo hecho por que te encontré.
Miró mi reloj de pulsera.
— tengo una reunión urgente en tres minutos.
— podemos cenar juntos.— se acerca hacia mi pero retrocedo.
— Lo siento, no puedo— avanzó hacia las escaleras por huir de Fiorella habia subido al ascensor, ahora no podia bajar en el por que Maure no me dejaria en paz.
Abro la puerta de las escaleras, con un suspiro de resignación empiezo a bajarlas.
Me plantó frente a la sala de reuniones que estaba en el primer piso. Enderezo mi cuerpo ya que me sentia cansado, bajé diez pisos por las escaleras, puse una gran sonrisa aunque queria recuperar el aliento, pongo la mano en la perilla de la puerta y la abro.
Fiorella
¡Me ha dejado hablando sola! ¿Cómo es posible? Se supone que vengo a tomar nota para luego digitar el acuerdo al que se llegué?
Ruedo los ojos, mi estómago ruge, así que me dirijo hacia el comedor.
Una vez he saciado mi hambre, decido buscar a León y saber cómo se abordará el tema con el proveedor.
Caminó hacia la sala de reunios, doy dos golpecitos y abro la puerta.
León está con el proveedor,ambos conversan, con sonrisas y todo.
— León ¿Puedo pasar? — él asiente, se pone de pie y corre una silla para que yo me pueda sentar.
— claro — me sonríe y mis piernas comienzan a flaquear... como siempre. Sacó mi agenda electrónica y me preparó para los apuntes.
— bien — murmura el proveedor — le estará comentando mañana — me quedó de una pieza ¿Escuché bien?, se supone yo tamaria apuntes, redactaria el acuerdo para que lo firmaran y todos felices.
León apoya ambas manos en su parte trasera de su cabeza y cierra los ojos.
— ¿Me puedes explicar que pasó? —
— ¿Sobre?
— ¡se supone que estoy aqui por que tomaré notas!
—es cierto — se encoge de hombros — te estare informando — se ha puesto de pie y se dirige a la puerta.
¿Era en serio? Se iba a marchar dejándome ahi.
— por eso estoy aqui León, me indicaste que era un tema delicado.
— lo sé pero no pude echarlo debo darme un baño.
Y asi sin mas, sale de la sala y yo me quedo mas confundida de lo que ya estaba. ¿Qué rayos pasaba? Pero de algo si estaba segura, que no nos iriamos del El Petra sin saber que estaba pasando realmente.