Capítulo 24 — Princesa Melty

Diez mil años pasaron desde la batalla donde la existencia estuvo a punto de desaparecer, a manos de Shun. El señor de la nada. Diez mil años donde tanto Shun como Lin cumplían con sus respectivos propósitos dados por el Padre Trascendental, pese su poder y sabiduría ninguno de ellos podía entender porque les dio este trabajo. Solo se limitaron a cumplirlo. Lin gobernando en el paraíso custodiando a las alamas que llegaban a su reino y dando la oportunidad de reencarnar solo si ellos querían volver y a su vez salvar almas del infierno.  Y Shun cumpliendo su trabajo como el señor de la nada, eliminando existencias por completo, si las almas no mostraban ningún cambio.

En el reino de los mortales en los años se unieron en uno solo. Gobernando por cada cien años por un humano o un espíritu sobrenatural, pese la unión de ambos reinos no acabo con los prejuicios que se tenían unos a otros. Había mestizaje y eso solo alentó lo que se conoce. Lo que tanto Lin como Shun en su sabiduría entendían.

Guerras surgieron. Y esas guerras dieron paso para que muchos quisieran replicar el poder de Shun, sin tener éxito. Todos en el mundo conocían acerca del poder de Lin y Shun debido a su batalla diferenciándolos. El poder de Shun como algo maligno para destruir y el de Lin como algo puro para crear. Tres mil años después de esa batalla hubo un hombre que se acercó al poder de Shun e intento imponerse ante todo el mundo.

Shun se apareció ante él ofreciéndole formar parte de su reino y vivir tranquilamente en el reino de la nada, pero la arrogancia de aquel hombre era tanta que desafío a Shun, por el control de su reino además de la tierra.

Eva intervino diciendo que era imposible que venciera a Shun, además de que controlaba parte del poder del vacío, su obligación era la de vivir en el reino de la nada y no interferir en el mundo mortal. Ignorando la advertencia se lanzó atacar a Shun quien con sola la mirada lo elimino de la existencia y eso causo confrontación con Lin que reclamo que, el alma de ese hombre debía pasar por el infierno, como todos los que han hecho mal, si decidir si ir paraíso o volver a la tierra con otra forma.

Shun respondió que un ser como aquel hombre volvería a ser lo mismo y era mejor eliminarlo desde ya. Lin se molestó con Shun y una batalla estuvo a punto de iniciar entre dos seres que se tenían prohibido enfrentarse. Debido a esto los guardianes primordiales intervinieron deteniendo la batalla. Durante un tiempo ni Lin, ni Shun podían ingresar a sus reinos para realizar sus trabajos.

Ahora era debido a la princesa del reino de la nada se volvería a cometer, otra infracción aprovechando ahora que sus padres iban a dormir durante cien años. Desde la puerta de la habitación la princesa Melty observo a sus padres dormir cómodamente.

—Descansen bien. Mamá, papá —dijo la princesa Melty cerrando la puerta despacio.

Salió corriendo dando saltos abriendo un portal hacia el mundo de los mortales para observar, como habían progresado durante todo este tiempo. más específicamente desde la última vez que llego al mundo mortal.    

—Princesa —gruño al reconocer la voz de Xiuying y aparecieron los cuatro guardianes del reino de la nada. Eva, Alvar, Galván y Li Jie —¡Por favor! No lo haga. De nuevo.

—Solo quiero ver su reino. ¡Por favor! No hare nada malo.

—Eso dijo la última vez y causo un problema al intervenir —dijo Galván.

—Estaba herido. Solo lo salve —respondió Melty.

—Y le revelo su identidad, además de enseñarle el poder del vacío. Lo sabe bien —reprocho Eva.

—Está bien admito que…—su voz bajo de tono mirando hacia otro lado frotando sus manos —no fue buena idea hacerlo. Pero solo quería ayudarlo. —choco sus manos y los miro radiante —les prometo que no volveré hacer nada. si lo hago, les prometo nunca más volver al mundo mortal —los guardianes la miraron detenidamente —además limpiare sus establos durante dos años —los guardianes la miraron detenidamente —tres…cuatro. Está bien cinco años.

—De acuerdo —dijo Alvar los demás lo miraron —pero a la menor intervención de usted o revelación de su identidad volverá.

—Solo los ayudare de la forma que ellos lo hacen. Además, me hare pasar por na chica sin poderes —atravesó el portal agitando su mano despidiéndose.

—Los ayudara verdad —dijo Eva. Todos asintieron.

Llego al mundo mortal en lo alto de una colina sintiendo la brisa de este mundo y eso la hizo muy feliz —¡muy bien! aquí voy. —salto de la emoción.

—Princesa Melty —la voz de Lin se escuchó en su cabeza.

—Buenos días majestad —saludo ella con nerviosismo —¿Cómo está? Seguramente igual de bella. —se conectaron mentalmente Lin o la princesa de todo la miraba detenidamente. Melty sintió su mirada poniéndose nerviosa —prometo no hacer nada malo.

—Eso lo dijo la última vez —Mei apareció detrás de ella provocándole un susto.

—Señorita Mei. Casi me mata del susto —se llevó la mano al pecho exhalando.  

—Shun volvió a dormir ¿verdad? —Samuel apareció también en la conexión mental.

Melty rió nerviosa —princesa ¡por favor! Prometo no hacer nada malo. Solo quiero ver como se han desarrollado desde la última vez que vine. ¡por favor!