27 de Diciembre de 1576
Para ti, amor mío.
Los días sin ti son como un día sin sol, un mes privado de alimento, un año sin aire. Sin ti navegó a la deriva. Sin rumbo. A veces no soy capaz de conciliar el sueño pensando en ti, en tu bienestar. Me preocupa que tu salud decaiga nuevamente.
Te amo más que a mi propia vida y confió en que mis sentimientos son correspondidos con la misma o mayor intensidad, y por eso te pido, no, te ruego que pidas por mis hermanas menores que no han vivido más de lo que yo. Te ruego el favor. Yo puedo renunciar a mi vida en cualquier momento por el bien mayor más me niego a finalizarla por los caprichos de mi injusta hermana si ello conlleva el final terrenal de mis hermanas menores.
Te amo, te amo, te amo. Sería capaz de llenar la hoja con esa simple combinación de palabras más no lo creó necesario.
No te aflijas por mi situación. Vive para que yo pueda vivir también.
Con amor.
Siempre tuya.
P.