Les contaré una pequeña historia mis queridos niños.
Hace mucho tiempo atrás, una pequeña familia de cuatro vivía en una pequeña casa en Londres.
Cada domingo la pequeña familia hacia una parrillada en el pequeño patio trasero que tenían es su hermosa casa, hasta invitaban a más integrantes de la familia y por supuesto, lo más importante, los abuelos.
Todo parecía ir bien hasta ese trágico día.
15 de octubre del 2014, Valentina y su pequeño hijo salieron al súper para ir por provisiones, pues se acercaba una fuerte tormenta y no quedaba muchas provisiones.
Aprovechó que su hija mayor estaba en la escuela y su esposo en el trabajo para guardarles su comida favorita, pollo frito con papas.
Ya casi llegaban a su casa, estaban a una calle de esta.
Al cruzar la calle no se dieron cuenta del conductor ebrio que venía a toda velocidad.
Cuando vinieron a darse cuenta ya era demasiado tarde.
El pequeño niño Dorian se encontraba tendido en el suelo con una gran herida en la cabeza y Valentina... pues ella se encontraba tendida a unos metros del pequeño Dorian con una pierna rota y la misma herida en la cabeza.
La policía y la ambulancia llegaron al lugar, pero ya era demasiado tarde... Habían fallecido al instante.
Esto les trajo un inmenso dolor y amargura a los dos únicos integrantes de aquella feliz familia, que ahora ya no era tan feliz...
Dos años después, el padre contrajo matrimonio con una mujer que ya tenía una hija. Esto le pareció bien a él, pues pensó que, su pequeña hija podría superar la trágica muerte de su madre y su pequeño hermano si interactuaba con más personas que no fuese sus dos amigos.
Esta noticia la tomó muy mal su hija, diciendo que su prometida eran una loca neurótica y su hija la puta de la escuela.
Claro, su padre la tomo como irrespetuosa.
Tiempo después, los mejores amigos de ella se fueron volviendo amigos de su hermanastra, abandonándola cuando ella más necesitaba de sus amigos.
Había entrado en depresión, no comía, no salía, casi no iba a la escuela. Hasta casi repuebla el año si no fuese por su padre.
En su cumpleaños número diecisiete su hermanastra le preparó una sorpresa en la escuela.
El cruch de ella la esperaba en la salida de la escuela con un ramo de flores y chocolate solo para rechazarla delante de toda la escuela.
Y si fuera poco, le aventaron tomates.
Todo eso fue organizado por, TREVOLL Y NATHALIE.
Pero como dice el dicho
"La venganza es un plato que se sirve frío"
No me arrepiento de nada de lo que hice.
Solamente de que deje mi desayuno ahí adentro y ahora me muero de hambre.
Maldigo internamente a Trevoll por hacer su "escena" de macho alfa justo en el almuerzo.
Sabía que iba a pasar esto cuando estacione el auto ahí y que me iba a enfrentar, pero hubiera preferido que lo hubiera hecho después de que hubiera comido.
Miro la hora en mi teléfono, falta poco para que toquen y empiece la siguiente clase que es química.
Me dirijo a mi casillero para sacar mi cuaderno de Química y entrar el de Biología.
Luego me dirijo al Salón.
Esta clase la comparto con mis más queridos amigos, Trevoll, Nathalie y Sofía.
Esta será la clase más interesante que haya tenido en mi vida...
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Editado: 06.09.2020