Luego de dos semanas, la ciudad había regresado a la normalidad "Hijo, debemos hablar del gobernador" comentó mi padre en cuanto terminamos de comer
"Lo se padre, intenté aplazar esta conversación, pero creo que ya no puedo evitarlo"
"Tío, será mejor que los deje hablar en privado"
"Nadia, quédate aquí, es posible que aprendas algo sobre esta conversación" comentó mi padre haciendo que Nadia se volviera a sentar
"Padre, el gobernador cometió graves errores mientras estuve aquí, soy consciente de ello, pero no tenía pruebas con lo que incriminarlo, es por eso que no hice nada, pero la orden escarlata descubrió que el gobernador sabía sobre el asedio a Mirza e intentó escapar traicionandonos a todos, por esa razón su destino debería ser la ejecución, pero no creo que eso solucione algo, por esa razón me gustaría enviarlo a Barsa, el gobernador de Barsa lo pondrá a trabajar en las minas de hierro o podemos enviarlo a Tadmury, sabemos que los prisioneros siempre son necesarios en la cantera"
"El gobernador no ha utilizado una herramienta en su vida, lo cual no es un problema, pero si es enviado a la cantera, será lo mismo que ejecutarlo, el nunca trabajara si esas arañas están cerca, es por eso que la mejor opción es enviarlo a Barsa, recientemente descubrieron una nueva beta de hierro por lo que tendrá mucho trabajo"
"Le diré a mis guardias que preparen la carreta para prisioneros y que preparen al gobernador para el viaje"
"No te preocupes por la seguridad, ira con nosotros por el camino real, luego Sergei y otros soldados de mi confianza lo escoltaron a la ciudad"
"Como ordené padre" en cuanto solucionamos el asunto del gobernador, mi padre fue a hablar con sus hombres sobre su viaje de regreso a la capital, Nadia me comentó que quería invitar a algunos nobles, luego de decirle que podía, me dirigí a mi oficina, en cuanto me senté observe la pila de documentos que aún tenía que revisar, tome el primero y al igual que muchos otros, hablaba sobre dinero, dinero que no teníamos, aparte en otra pila el documento al igual que como estuve haciendo con todo lo relacionado con dinero, si no encontraba una solución pronto, tendría que detener la reparación de la antigua Mirza, la cual acababa de comenzar, también tendría que utilizar el dinero que reserve para la construcción de la última fase del jardín botánico, mientras me deprima por la falta de dinero golpearon la puerta "Adelante"
"Mi príncipe, buenas noticias, encontramos la reserva de Sils del gobernador, la fortuna encontrada será sufiente para pagar las deudas adquirida durante el asedio y es posible que aún sobre" informó el contador, detrás de el llego Dozon el cual sostenía una pequeña caja
"Dozon ¿que traes ahí?" Pregunte intrigado
"Mi príncipe, su majestad le envía esta pequeña fortuna para pagar las deudas" en cuanto abrí la caja me encontré con al menos quinientos Sils de Platino, sufiente para pagar la deuda.
"Dile a mi padre que acepto el préstamo y será devuelto durante la próxima entrega de impuestos" Dozon abandonó la oficina dejándonos únicamente al contador y a mí.
"Mi príncipe ¿porque aceptó el préstamo?"
"El tesoro del gobernador nos ayudará a saldar las deudas, pero podemos quedarnos con nada, pero si pagamos las deudas con el préstamo, podremos utilizar el tesoro para terminar las construcciones antes de lo planeado, sin esos gastos, podremos juntar los quinientos Sils de platino antes de la fecha límite"
"Entiendo su plan mi príncipe, espero que funcione"
Rápidamente un mes pasó y el jefe de los constructores vino a verme, me informó que el jardín estaba completo y que ya podía ser inaugurado, luego de despedirlo, le ordené a los consejeros que se habían ganado mi confianza durante el asedio que escribieran cartas a los gobernadores de las ciudades cercanas y a los alcaldes de los pueblos bajo mi protección, todos ellos estaban invitados a la inauguración, la cual sería dentro de dos semanas, luego de dar la orden ingrese a mi oficina y escribí cinco cartas, la primera tendría mi simbolo real y sería enviada al Palacio Imperial, La segunda, tercera y cuarta carta sería enviada a los jefes de las familias Capell, Conti y Claw; en cambio la quinta carta sería unicamente para Elena
"A mi querida Elena Capell, me complace enviarte esta carta para informarte sobre la finalización del jardín botánico, tus padres y tus tíos han sido invitados a la inauguración, pero me gustaría que tu me acompañes, el jardín fue posible gracias a tu trabajo y mereces recibir este honor"
Con amor Arthur
En cuanto termine de escribir las cartas, las metí en sus sobres y se las entregué a Murat, el iría a la capital y les entregaría las cartas, por un lado él y Dozon eran los soldados en quienes más podía confiar, Murat también conocía mi cercanía con Elena por lo que sería discreto, por último Ana debería de estar preocupada por él.
De esa manera las dos semanas pasaron y los invitados se encontraba frente a la entrada al jardín botánico "Padre, madre y estimados invitados, agradezco que aceptaran mi invitación a este día tan especial, hace meses ordené que se comenzara a construir esta gran estructura, no fue sencillo, esta ciudad sufrió una enfermedad, un asedio, no fue sencillo pero lo conseguimos, conseguimos construir este magnífico jardín, donde los más jóvenes podrán aprender sobre todo tipos de plantas, donde los médicos del reino podrán recolectar plantas medicinales para continuar sus investigaciones o simplemente pueden visitar este lugar y disfrutar de todas las plantas que crecen en este lugar, pero este logro no ha sido únicamente mío, los constructores hicieron un gran trabajo y nunca se detuvieron a pesar de todos los contratiempo, los contadores que estuvieron pendientes a los materiales faltantes y la condesa Elena Capell ella fue quien habló con todos ellos y organizó todo para que este lugar fuera contratado, por eso quiero que también sea felicitado" En cuanto extendí mi mano, rápidamente fue sujetada por Elena, la cual fue recibida por aplausos del pueblo "Con esto dicho, el jardín queda inaugurado" en cuanto termine de hablar, Elena regreso con su familia y yo me dirigí junto a la mía.