Debe ser casi medio día, aún que hemos caminado desde hace ya varias horas hemos acortado muy poco la distancia que nos separa del campamento ya que Owen no es capaz de sostenerse en pie por sí solo, hemos tenido que tomados turnos para apoyar a Owen, improvisamos una muleta con la que se sostiene a la vez que se apoya en uno de nosotros.
— Les dije que no necesitó ayuda, déjeme ya los alcanzare después — protesto Owen.
— No sé por qué intentas hacerte el rudo, es obvio que no puedes moverte por ti mismo — le respondo.
— Saben, yo aún no acabó de comprender lo que está pasándole, lo único que se me ocurre es una reacción alérgica pero los síntomas son algo extremos, además, es la primera vez que veo que alguien sufre una reacción negativa a el medicamento.
Desde que comenzamos a movernos Juan no ha dejado de insistir con teorías del que podría haber pasado y a pesar de las insistencias de Owen Juan continuaba teorizando en voz alta, lo cual nos tenía bastante irritados a ambos.
— Además la reacción negativa no pudo haber provocado una degeneración muscular tan rápida así que tal vez... — continuo Juan.
— Quieres cerrar la boca de una vez — dijo Owen exaltado.
— ¿Que sucede contigo? ¿Que acaso no sientes intriga por lo que te esté sucediendo? podría ser algo irreversible.
— Deje de sentir intriga por algo la primera vez que un jodido cadáver trató de devorarme, tal vez no lo hallas notado, pero últimamente este mundo no tiene mucho sentido.
Antes de que Juan tratara de continuar la discusión Owen se apartó de su lado y con un esfuerzo enorme llegó hasta mí para sostenerse de mi hombro, por su parte Juan se limitó a seguir avanzando mientras continuaba murmurando un sinfín de teorías.
— ¿Cómo te sientes? — pregunte.
— Un poco mejor, lo que sea que ese tipo me metió debe estar perdiendo efecto.
— Bien, porque no pienso cargarte todo el kilómetro restante — dije jadeando.
— Podrían haberme dejado.
— ¿Y qué te mate la primera cosa con la que te topes?
— Sabes que saldría ileso. — dijo mientras esbozaba una sonrisa sarcástica.
— Mírate esa herida y repítemelo.
Owen se levantó la camisa y palpo ligeramente la herida esbozando una mueca de dolor.
— No esta tan mal, solo tiene un poco de gangrena — dijo Owen sarcásticamente.
— Heres un imbécil, además estas vivo gracias a mí.
— No, estoy herido gracias a ti.
Esa sola frase se sintió peor que una puñalada. Aparto a Owen de mi lado haciéndolo caer cosa que llama la atención de Juan, pero antes de que se acerque a nosotros le dirijo la mirada más agresiva que puedo, Juan se queda helado observándome.
— Continua ya te alcanzamos después.
El simple timbre de mi voz es suficiente para clavar a Juan en el lugar donde se encuentra.
— No sé cómo llegar — dice Juan sumamente nervioso.
— Solo aléjate un rato quieres.
Juan no insistió más se dio la vuelta y se perdió entre los árboles, no creo que se aleje mucho, tal vez fui algo grosera, pero necesito estar a solas con Owen.
— ¿Por qué te interpusiste?
— Lo hice porque estabas dudando.
— Explícate.
— Si de verdad hubieras querido asesinarlo no te hubieras quedado paralizada de esa manera, lo habrías echo y ya, además se lo que la venganza hace con las personas, al principio tal vez te sentirías bien contigo, pero pronto te darías cuanta de que aún no es suficiente, que la persona a quien mataste no era la verdadera causa de tu dolor así que buscaras al siguiente "culpable" y terminaras en un círculo de donde no encontraras salida nunca.
— No tienes manera de saber qué habría pasado conmigo, tal vez solo necesitaba saber que había vengado a mi madre, tal vez solo era necesario deshacerme de el para sentirme mejor.
Nuestras palabras se fueron convirtiendo en gritos y la tensión de la discusión empezó a elevarse rápidamente. Cada vez que Owen abría la boca solo lograba que me alterara más, quien se cree para poder asegurar tantas cosas de mí.