6. Extraño conocido

Por fin llega el día en donde Brayden debe jurar lealtad  ante el rey 
Es por la tarde, así que tenemos toda la mañana para arreglarnos y ponernos presentables para el rey

Me levanto, estos días han sido muy raros, lo de la señora del bosque, el búho, y más cosas, no le he contado a nadie acerca de eso, principalmente porque ni yo misma entiendo que sucede, seguido de eso no lo digo porque si llego a mencionar a la anciana que me dio el collar  tendré problemas ya que se dice que es una bruja, matan a las brujas, dicen que son seres repulsivos que solo lastiman a la gente, prefiero mantenerme alejada de esas habladurías

—Nympha vamos al mercado- me dice Ev—

 Ayer no compramos nada para Brayden

—Claro — me visto, me hago una trenza y partimos al mercado 
Cuando llegamos nos ponemos a buscar un buen regalo para Brayden, no sabemos que regalarle, pasamos por lugares caros  y lugares baratos, Ev le compra un par de zapatos de cuero, son cómodos y resistentes, yo le compro una caja de plata, fue muy cara pero es bonita tienen grabados de la realeza, en señal de que los apoyas, con las compras ya hechas nos vamos devuelta a casa 

Al llegar me tomo una ducha, ma me da algunas hierbas para dejarlas en el agua y así perfumarme, me quedo en el agua casi por 1 hora, me siento un poco cansada, el búho no ha vuelto desde la mañana lo cual es raro, siempre vuelve y se queda , prefiero que sea así ,que este lejos

Salgo de la ducha y voy a cambiarme, me pongo el vestido, ma me ayuda a ajustar el corsé y me hace un recogido 
Trenza mi cabello y lo enrolla lo sujeta con un peineta, deja algunos mechones caer en mi cara, al verme al espejo  me gusta mucho, decido ponerme el collar que me dio la supuesta bruja, ma me ayuda a cubrir las grandes ojeras que tengo

—Estamos listas —los chicos están en la cocina, ya arreglados  y voltean a donde nosotras estamos

—Wow, se ven hermosas —dice Ev

—He decidido que no van —pa se ríe — Todavía quiero conservar a mi esposa a mi lado, y no estoy listo para dejar ir a mi única hija — todos reímos

—Son las más hermosas de eso no hay duda —Brayden  sonríe

Nos levantamos y salimos de casa para ir al palacio

—Esperen— digo antes de subir a mi caballo , entro a casa y tomo el saco de hierbas protectoras que me dio la anciana, no sé si sirve pero en las noches lo pongo debajo de mi almohada y me siento más segura, lo escondo entre los pliegues del vestido queda aún mejor cubierto por la capa que llevo— listo — salgo y me montó en mi caballo, partimos en el camino se nota que Brayden está nervioso, así que todos intentamos calmarlo al final le sacamos unas cuantas risas , al llegar a la entrada del castillo nos bajamos de los caballos , los ayudantes los guían a unos establos, nos dejan entrar, en la entrada está el comandante Brighnam  el cual nos saluda al vernos

—Hola, me alegra verlos por aquí— está muy animado — Brayden por favor acompáñeme a donde los demás reclutas

—Claro —Brayden sonríe, se voltea y nos despedimos de el

Se van, nosotros seguimos a las demás personas hacía la sala principal 
Llegamos y nos acomodamos, en realidad hay pocas personas, me quedo cerca de Everdard

—Aquí se respira oro— dice Everard

—Oro y rubíes— nos reímos

El rey Alarden llega y todos vitorean, por una puerta salen los guardias seguidos de los que juraran lealtad 
Veo a mi hermano entre los casi 25 hombres que están formados
La esposa, hija y el heredero del rey llegan y toman asiento en sus tronos
La ceremonia empieza, uno a uno los reclutas pasan se arrodillan, entregan su arma y recitan un juramento que dice algo como

A mi rey lealtad prometo 
Mi vida por el reino entrego 
Pelear en la necesidad
Sangrar por mi reino 
Al rey Alarden honestidad y servicio debo
Defender es mi empleo 

No me gusta, es como si fueras a lamer los pies de ese hombre, el rey es bajo, un poco llenito, tiene el pelo canoso y una barba bien cuidada, sus ojos son de color negro, y sus rasgos son duros
Es turno de mi hermano, se inca y le da su espada al rey, comienza a recitar el juramento, cuando acaba aplaudo 
El pasa hasta atrás, los hombres faltantes pasan

—Estos hombres han venido este día a jurar lealtad hacia su rey y a su pueblo, han jurado defender y protegerlo incluso si la vida está en juego, esta es una tarea dura, yo el rey Alarden les concedo el puesto de guardias reales, cuento con su lealtad y sé que de mi lado estarán, su trabajo será bien recompensado

De nuevo todos los hombres pasan y les hacen entrega de una armadura real, tiene los colores del reino, es roja escarlata, con el borde dorado y un dragón plateado en el centro, es muy bonita 
Todos vuelven a vitorear por los nuevos guardias y por el rey

—Felicidades guardias — dice la reina Eleonor, es un poco más alta que el rey, más joven, cabello dorado, piel blanca y ojos azules

—Por favor disfruten de la festividad— nos guían a otro salón donde hay decoraciones de colores, comida y tragos, las mesas están repletas, varias personas se sientan, otras bailan de manera alegre en el centro del salón  otros platican animadamente
Brayden se acerca a mi

—Por fin serviré al rey— está muy feliz— No puedo creerlo

—Deberías hacerlo  bobo— me abraza— Debes confiar más en ti

—Gracias — se ríe— ¿Bailas? — yo acepto y nos unimos a las personas que bailan, primero el baile es entre los dos después se hace un cambio de pareja, damos vueltas y vueltas, me divierto mucho,  la música es muy animada, terminamos de bailar y vamos con ma y pa, Brayden toma cerveza, yo tomo vino, no soy una gran fanática de la cerveza

—Esto es raro, las mujeres no me quitan la mirada de encima — dice Brayden sonriente

—Anda baila con ellas— le digo

—Pero a ti te gusta bailar — me encojo de hombros