1. La llamada

Ellie:

Había pasado toda la tarde con Eris en el centro comercial. Ya estaba anocheciendo, y aún estábamos en una tienda, aún no habíamos comido y estaba hambrienta.

La verdad es que yo no era mucho de ir de compras, solo si necesitaba algo o lo quería iba. No era de las que todos los findes de semana se iban de compras, pero mi mejor amiga si, y siempre me decía que la acompañara y nunca aceptaba un no como respuesta, así que no me quedaba otra que acompañarla. Yo la mayoría de las veces entraba en las librerías para comprarme un libro nuevo y Eris siempre me metía prisa, porque yo cuando entraba a una librería me costaba decidirme en que libro llevarme y me podía pasar horas. Y claro a ella no le gustaba nada, pero era lo que le tocaba, si no me dejaba entrar a una librería cuando íbamos, no le acompañaba, ese era el trato.

Mientras Eris cogía unos vestidos nuevos y se los llevaba al probador, yo tenía pensado comprarme una mochila nueva para la vuelta a clase. Porque si, el verano llegaba a su fin y quedaban dos semanas de verano.

Había sido uno de los mejores veranos de mi vida, pero había que volver a las clases, me alegraba, por una parte, pero por la otra no. Era el último año de instituto. Y en un año ya me iba a la universidad. ¿En qué momento se me ha pasado tan rápido el instituto?

-¡¡¡Ellie!!!-me llamo chillando Eris desde el probador-. ¡¡Ven!! ¡¡Corre!!

-¡¡Voy!!- chillé mientras corría hacia los probadores, dónde se encontraba mi mejor amiga.

- ¿Qué te parece? -me señalo el vestido que llevaba puesto, dando una vuelta entera para que lo viera mejor-. ¿Crees que le gustará a Marcus?

-Cálmate es vuestra segunda cita-dije mientras me sentaba en el sofá de los probadores-. Y pareces Heidi con ese vestido, sinceramente- solté una carcajada cuándo vi que se ponía roja.

-Dios que buena amiga eres- dijo poniendo los ojos en blanco mientras me daba la espalda.

- ¿A que sí? Si es que soy la mejor-le dije dándole una palmada al culo.

-¡¡¡Ellie!!!- dijo mientras se daba la vuelta.

-Es que no me puedo resistir ante semejante diosa-dije mientras hacía como si me arrodillara ante ella.

-Ya, ya, lo sé, bueno ahora en serio. ¿Cuál me pongo? - dijo señalando los vestidos del probador.

-El azul con estampado de flores ajustado. Te quedará genial

-Vale, voy a probármelo

Asiento mientras me dirijo hacia el sofá para esperar.

Mientras mi amiga se cambia, me pongo a mirar mi móvil y veo que tengo bastantes mensajes, pero los ignoro y espero a mi amiga.

-¡Ellie! ¡Entra! - me dice mi amiga asomando su cabeza por el probador.

-A ver cómo te queda-dije asomándome

- ¿Me queda bien? ¿Crees que le gustará? -me dice mientras me hace poses en el espejo.

No puedo evitarlo y suelto una carcajada, ella me mira con cara de enfado y me rio más. Y así sin más acabamos las dos riéndonos en un probador de una tienda.

-Bueno después de casi matarnos de la risa, creo que este es el elegido.

- ¿Sí? ¿Tú crees? -me dice dudosa

-Que sí, pesada, estás guapísima y ahora vamos a pagar, que me estoy muriendo de hambre-digo saliendo del probador dando saltitos.

Y tanto que lo estaba, ese vestido ajustado con estampado floreal y azul, le quedaba genial. Le iba perfecto con el rubio de su pelo y el azul de sus ojos.

-Eh, eh, quieta ahí señorita, yo tengo mi vestido, pero falta el tuyo para tu aniversario con Nate-me dice subiendo y bajando las cejas.

-Si estoy con el dos años, no creo que le importé mucho- dije mientras buscaba vestidos.

- ¿Qué más da? Tienes que estar espectacular, aunque lo estás siempre eh, pero un poco más-me dice mientras mira unos vestidos rojo-Oh si si, un vestido rojo, para que resalte con tu pelo-dice mientras mueve los hombros.

-Rojo? -dije dudando-. ¿Cuál te gusta más? -le digo enseñándole dos vestidos

- ¡OH, DIOS MÍO! ¡Claramente este! -dice señalando el de la derecha, el que es ajustado y con unos tirantes con unos lazos.

La verdad es que me quedaba bastante bien, con mi pelo pelirrojo ondulado y mis ojos verdes, quedaba perfecto.

A diferencia de mi madre mi pelirrojo era de un rojo bastante intenso el de ella era un rubio con un poco de rojizo y mi padre tenía el pelo rubio así que no sé porque mi pelo salió tan rojizo.

De pequeña mis primas me decían que seguro que era adoptada porque no me parecía en nada a mis madres ni físicamente ni en personalidad. Yo llegue a dudarlo, pero era imposible tenía fotos de recién nacida con ellos. Con la que si tenía parecido era con mi tía y con mi abuela, que eran como unas segundas madres para mí, porque prácticamente me cuidaron ellas, ya que mis padres viajaban mucho, les tenía mucho cariño.

-Pues ya lo tenemos-dije mientras me metía en el probador para quitármelo.

Al salir de los probadores, pagamos los vestidos, y nos fuimos al Mc Donals, claramente a nuestra entrenadora no le habría gustado nada. Pero nos lo merecíamos después de todo este verano. Además, que una vez empiece la temporada la entrenadora no nos dejará comer nada de esto.

La verdad es que a veces he pensado en dejar de ser animadora, pero Lily la anterior capitana me decía que si yo me iba seria ella la capitana y que perdería popularidad. La verdad es que a mí nunca me ha importado mucho la popularidad, no me gustaba mucho socializar con tanta gente, pero al final me acostumbre y aunque sea popular en el instituto en el colegio no lo era y aunque ahora lo sea tengo un círculo de amigos bastante reducido.

-Yo quiero este menú-señala Eris saltando de emoción a la pantalla dónde se ve un menú que contiene una hamburguesa enorme que dudo que se acabe, unas patatas y un refresco grandes.

La miro sorprendida. ¿Dónde estaba la Eris que siempre quería comer sano y me reñía si me comía un helado antes de un entrenamiento?