El despertador comienza a sonar e inmediatamente un chico de cabello ondulado color oscuro, tez moreno-claro y delgado despierta, es Kevin. Algo cansado, volvió a pasar la noche navegando por internet investigando y leyendo historias de fantasía relacionadas al cambio de cuerpos.
Rápidamente se lleva sus manos al rostro y las desliza sobre sí mismo.
—Odio sentir esto con mi cuerpo...—exclama mientras tiene la mano sobre su rostro.
Suspira y toma su teléfono, se percata que tiene un mensaje de su mejor amigo, Jacob.
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Jacob: Pasare por ti, aunque quizás algo tarde y nos vamos caminando. ¿Esta bien? 🙃
Kevin: Buenas jaja. Aquí estaré…
Después de responder coloca su teléfono a un lado de su almohada, se levanta de la cama para meter sus pies en las pantuflas y se coloca de pie, escucha movimiento en la parte de abajo y sospecha que es su hermana.
Prepara su ropa de escuela, cursa su último año de bachillerato, se encuentra emocionado por ser su último año aunque está un poco triste porque quizás no vuelvan a estar juntos, aún no saben que universidades elegirán sus amigos y peor aún, si quedarán en la misma.
Minutos después la puerta de abre de golpe y una chica de cabello castaño, estatura promedio y tez morena clara entra gritando: "buenos días". Kevin voltea y se da cuenta que es su hermana, Diana Reyes.
—¿Así que eras tú la que traía su concierto allá abajo?—toma su ropa y se dirige al baño para darse una ducha.
—Si, era yo, ¿te desperté bella durmiente?—responde con una sonrisa mientras se sienta en la cama de su hermano.
—Nah, ya me había despertado hace unos minutos, pero de verdad, eres insoportable...—le contesta a su hermana antes de meterse al baño para darse una ducha.
—Si claro, estupido—le grita su hermana antes de salir de la habitación caminando con una pose empoderada.
Kevin se desviste en el baño, prepara el agua para darse una ducha mientras toma su toalla y se cepilla los dientes.
Se mira al espejo y suspira. —Tengo casi ya 17 años y no se que mierda haré con mi vida, encima estoy confundido...—niega con la cabeza mientras se cepilla los dientes.
Después de unos segundos ingresa y se comienza a bañar.
15 minutos después...
Finalmente sale de la ducha, comienza a vestirse, se coloca su ropa interior, un jean color azul marino, su camisa con el logo de su nueva escuela y unos zapatos, sale del baño ducha y se dirige a su cuarto, toma su teléfono para verificar que se haya cargado y su mamá le llama para que baje a desayunar.
—Odio que no me haya tocado el turno de la tarde, yo debo despertarme temprano e ir a la escuela...—comenta Kevin en tono quejumbrosa mientras que recuerdas que uno de sus amigos quedo en el turno de la tarde.
—Mientras tanto, otras sólo vamos unos días a la universidad, es un privilegio del que poco gozamos, hermanito...—guiña el ojo. —Ademas ya es tu último año en bachillerato, no se de que te quejas—agrega.
—Estupida...—contesta en voz baja.
—Kevin, Diana, ya dejen de pelear...—interrumpe, Paola, la madre.
—Siempre siendo superior... en edad y en estudios... de hecho también en inteligencia—Diana sonríe y bebe un poco de jugo con una pose de victoriosa.
—Genial...—desde que despierto la escucho con su concierto aquí abajo y también debo hacerlo aquí en el desayuno... no dormí bien, así que no ahora...—contesta Kevin mientras come pancake's.
—¿Nunca duermes bien o qué? Todas las vacaciones te la pasaste desvelándote , mirando series o leyendo, ¿pero en que más te desvelas tanto que siempre tienes sueño... o por qué no puedes dormir?—interroga Diana mientras recorre su silla y pone una mueca de detective que interroga a un sospechoso.
—Cosas...—ríe Kevin.
—Que raro eres...—le responde ella mientras baila los ojos.
—Bien cambiemos de tema y hagamos esto más ameno, cielo; ¿como te sientes en tu primer día en tercero de bachillerato?, ya creció mi nene—expresa Paola mientras ve a Kevin.
—Supongo que bien, mami—ríe. —Lo positivo es que la mayoría de mis amigos estarán en este último año conmigo, eso es bueno...—responde él mientras termina de comer su pan cakes.
—De hecho recuerdas que me dijiste que me llevarías... hmm pues Jacob quiere que nos vayamos juntos y ahorita en un rato pasará por mi...—agrega Kevin, mientras bebe leche y espera una repuesta de parte de su madre, que cree que estará molesta.
—Pero te dije que yo te llevaría, te lo dije desde hace una semana—contesta su madre.
—Lo se, mami, pero el quiere que nos vayamos juntos y...
Paola interrumpe. —Entonces yo los llevo, si quiere irse contigo yo los puedo llevar y listo—responde enérgica y con una sonrisa.
—Supongo que sí...—contesta Kevin con una sonrisa fingida.
Pasado un rato llega Jacob, toca la puerta y Diana lo recibe.
—Ah, eres tú otra vez como todos los años de escuela...—exclama Diana mientras ve a Jacob parado en su puerta.
Lo invita a pasar.
—Gracias, loca—ríe.
—Tu novio bajará ahorita, solo que esta terminando de empacar sus cosas...
Jacob ríe y se sienta en la sala. —Te encanta estar jodiendo, ¿verdad?
Después de unos minutos baja Kevin acompañado de su madre, saludan a Jacob y le notifica del cambio de planes, sin molestia acepta.
Suben al auto y parten con rumbo a la escuela.
Charlan sobre el regreso a clases, los amigos que estarán con ellos en el salón, maestros y demás.