Abuelo:
¿Es normal extrañarte tanto?
Cada día que pasa, tengo que vivirla con solo tu recuerdo.
Cada mañana me despierto con la esperanza de que usted aún siga con vida .
Pero eso no va a ser posible.
¿Sabe?
Encontré a mamá llorando en el baño, la escuchaba decir su nombre, y rogándole a Dios que se lo devuelvan, pero lamentablemente Dios no le hizo caso, ni a ninguno de nosotros.
Trato de mantenerme fuerte por mi mamá, pero ya no puedo.
Siento que el dolor poco a poco me va consumiendo.
Espero que ahí en el cielo se encuentre con mi otro abuelo.
Quién sabe, a lo mejor los dos se ponen de acuerdo y me cuidan.
Con amor,
Dana.