Después de la exhibición protagonizada por Steffano y Ameliè y al notar que tenían mucho público, muy apenados con sus hijos intentaron dar una explicación.
Y a continuación se acercó y abrazó a Ameliè, con lo que Steffano se permitió respirar de nuevo, porque si bien era posible que su hijo se mostrase comprensivo, no estaba tan seguro con relación a su hija menor que siempre había sido muy celosa.
James, Rowena y Terry se las arreglaron para deshacerse de Walters enviándolo a casa, después de lo cual se sintieron enormemente satisfechos, porque después de todo, las molestias sí habían valido la pena, aunque nadie les creería ni aunque lo jurasen, que aquello había significado una molestia para ellos que disfrutaban planificando los más horrorosos disparates.
Una vez que todo volvió a la calma, pasaron al comedor y la cena se llevó a cabo en medio del habitual bullicio estando todos los chicos presentes. Cassander, Altair, Aydan, Arthur y Ben estaban siendo masacrados por las peligrosas lenguas de sus primas y las madres de las criaturas salieron en defensa de los pobres angelitos culpando a sus respectivos progenitores.
Las chicas miraron a Cassandrea preguntándose si su prima tenía alguna deficiencia ocular y una total incapacidad para percibir lo obvio, mientras que el desteñido sonrió con malignidad, pero James intervino quitándole momentáneamente el placer de fastidiarla.
La discusión acerca de las alocadas vidas amorosas de los miembros masculinos de la familia se tornó vergonzosa en opinión de Grace, Abigail y Molly, y mientras algunos estaban avergonzados como en los casos de Bill que aparte de tener que soportar las bromas de sus hermanos fue reñido por sus nietas; el pobre Ben que quería que se lo tragase la tierra y Jason que quería sacudir a Charlie, los demás estaban a medio camino entre la diversión y la negación, pero Louis, Aydan, Altair, los gemelos, François y J.B., eran demasiado desvergonzados como para sentir otra cosa que no fuese satisfacción.
La cena terminó sin daños físicos que lamentar si no se contaba el puñetazo que le dio Jason a Sirius al final de la misma.
Pero como Sirius siguió y siguió, terminó con un doloroso puñetazo en el abdomen y Jason estampado contra la pared por una muy molesta Lyra que mantenía su postura de sacudirlo cada vez que le hacía algo a Sirius.
Los chicos pasaron al salón en medio de las risas por lo sucedido y unos minutos después hicieron aparecer sus instrumentos. Como cabía esperar, J.B. y los hijos de Lily habían heredado tanto el gusto como el talento musical de sus progenitores, de modo que Arkania y Rigel tocaban guitarra, Daniela piano, y J.B. batería, el instrumento más escandaloso del mundo en opinión de su padre. De los hijos de Dominique todos los varones tocaban algún instrumento también con excepción de Altair que lo que poseía era una bonita voz, mientras que Geraldine si bien disfrutaba de la música no tenía talento para ella.
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Editado: 27.06.2023