Capítulo 3

Tasya

El camino se me hizo largo a pesar de que no estaba tan lejos el hotel, había mucho tráfico pero al llegar puedo ver un gran y elegante hotel, no era una gran rascacielos pero su fachada ocupaba casi toda la cuadra, aunque tengo tiempo viviendo en esta ciudad, no suelo venir por estos lugares, así que nunca había visto este hotel.

Estaciono frente al hotel del otro lado de la calle, cuando bajo del auto espero para cruzar y dirigirme a la puerta del hotel, que es una típica puerta giratoria pero bastante más elegante con marcos negros y vidrios muy limpios, casi parece que no hay nada.

Al entrar al hotel al instante solo puedo pensar que tanto por fuera como por dentro es elegante, con pisos de mármol negros o eso creo que es, nunca había visto algo así ya que está bastante lustrado y también tiene decoraciones de madera de color natural y luces cálidas que cuelgan de lámparas que forman una armonía perfecta y las decoraciones completas en conjunto forman una armonía bastante elegante.

 En cuanto estoy en el lobby, una de las chicas de la recepción me ve y sonríe amablemente, me encamino hacia donde está, mientras pienso que es realmente bella.

—Hola, señorita, buenos días, ¿Va a requerir una habitación? — me dice alegremente en cuanto llego al mostrador.

—No, vera, me gustaría preguntar por alguien. — Le digo dándole una sonrisa.

—Lo siento señorita, pero no puedo darle información e ningún cliente por ningún motivo. — me dice de igual forma amablemente y aun con la sonrisa.

—Eso lo entiendo, pero no es un cliente, en realidad quería saber si una persona tiene relación con el hotel, su nombre es Khalid Vasilis. — en cuanto dije el nombre, no solo ella sino las otras dos recepcionistas que estaban atendiendo a otras personas, pusieron una expresión muy seria, puede notar como el ambiente cambio radicalmente, cuando entre todo parecía armonía y ahora siento una gran hostilidad, viniendo de varias direcciones hacia mí y ahora no se si hice bien en venir o no.

— ¿Qué asuntos tiene con el Señor Vasilis? — esa pregunta me hizo sentir extrañamente eufórica.

— ¿De verdad existe?, ¿Sabe dónde lo puedo encontrar? —

— Le vuelvo a decir ¿Qué asuntos tiene con el Señor Vasilis? — me dice con una voz muy fría y cara bastante llena de seriedad nada que ver con la chica de hace unos segundos.

—La verdad me gustaría hablar con él, en realidad no lo conozco, pero…— me quede callada por que no sabía para que lo quería, no pensé que fuera a encontrar a nadie con ese nombre y ahora que lo encuentro, no sé qué hacer.  —No sé si pueda  hablar con él. —

—Si no tiene un motivo me temo que eso no va a ser posible. —

—Lo entiendo, pero puedo dejar mis datos y se los podría pasar al señor Vasilis, y a ver si él se quiere poner en contacto conmigo. — le dije mientas sacaba una tarjeta de presentación de mi bolsa y la ponía en el mostrador.  —Es solo que es un asunto personal, que tengo con él... se podría decir —

—Lo intentare pero no le aseguro nada. — me dice mientras toma mi tarjeta y la mete del otro lado del mostrador.

Estaba por irme cuando una puerta de uno de los elevadores que estaban en el lobby se abrió y de ella salió un hombre que puede reconocer de inmediato, sentí como todo mi cuerpo se congelo en cuanto lo vi y lo reconocí como “el hombre” con el que sueño cada noche.

Venia hablando con otros  hombres y aun no alzaba la vista, mientras yo solo tenía la vista fija en él, por inercia camino hacia él pero a medio camino me quedo detenida y regreso con la recepcionista.

—Él es Khalid Vasilis, ¿verdad? — le digo a la chica, en un susurro.

—Sí, así es. —

Cuando vuelvo a verlo, esta vez ya está casi en la puerta de salida, no sé qué hacer, pero siento que él tiene la respuesta a mis sueños, que en ocasiones pienso que son pesadillas.

— ¡KHALID! — Sin pensar en las consecuencias grite fuertemente su nombre, al instante todo se quedó en silencio, tanto clientes y trabajadores que estaban presentes y puede ver como Khalid se quedó estático en su lugar y dio lentamente una  media vuelta.

Al momento que nuestros ojos se encontraron sentí un fuerte escalofrío recorriendo mi columna vertebral, sentía que su mirada fría me estaba perforando, y un gran miedo me inundo, pero de repente pude ver como su mirada cambio a una de confusión y posiblemente asombro,  en ese momento se dio la vuelta completa y empezó a caminar hacia mí, yo no sabía qué hacer y solo me quede en mi lugar.

Mientras más se acercaba mi corazón latía cada vez más fuete, siento que en cualquier momento puedo  empezar a hiperventilar.

— ¿Eres tú? — me dice casi en un susurro, pero lo puede escuchar fuertemente cono su voz ronca y varonil.

—Yo… yo… — no pude decirle nada más, estaba en shock,   tenía frente a mí a el hombre con el que he estado soñando por casi dos meses todas las noches.

De repente me ciento débil y la vista se me vuelve borrosa hasta que todo se vuelve negro.

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