Capítulo 9

Capítulo 9

Tasya

Al final me quede dormida y al despertar no puedo ver nada ya que la habitación esta en penumbras y Khalid aún no regresaba cuando veo mi teléfono veo que ya pasa de la media noche.

Y siento una gran sed pero aquí no hay agua, así que decido ir a buscar y pedirle a algún empleado un poco de agua o algo para calmar mi sed y  ver si de paso encuentro a Khalid. Cuando salgo de la habitación los pasillos también están oscuros y eso es raro se supone que deben de estar encendidas las lámparas  colocadas en todos los pasillos del hotel.

Tengo un mal presentimiento ya que no veo a nadie ni empleados ni huéspedes, cuando voy al ascensor para bajar a la recepción noto que no hay luz, y veo señales que indican donde están  las escaleras y voy hacia haya, cuando llego se ven aún más oscuras y no traje mi teléfono para alumbrarme, pero agarrándome de la barandilla puedo bajar sin problema.

Cuando llego a la recepción no hay nadie, todo está oscuro, así que ya un poco más preocupada me dirijo hacia la salida, pero al llegar afuera no hay nada, literalmente no hay automóviles, ni edificios y mucho menos no veo a ninguna persona, solo se ve una oscuridad total, siento que si salgo del hotel me voy a perder.

De pronto escucho unas risas y voces pero provenían de la oscuridad, con todo y el miedo me dirigí al lugar.

— ¿Hola? — digo a la nada cuando empiezo a caminar, pero no hay respuesta, cuando volteo hacia e hotel me sorprendo porque ya no está, mi única opción ahora es caminar hacia donde se escuchan las risas.

De repente mientras caminaba sin rumbo en la oscuridad, con asombro pude ver como ante mi mirada todo se transformada, bajo mis pies surgió un pasto verde y frondoso  y por fin puedo ver de quien provienen las risas.

Khalid está sentado bajo un gran árbol riendo con una mujer, que esta de espalda a mí por lo que no puedo verle la cara. Pero él la mira con mucho cariño. Por inercia camino hacia ellos, en cuanto doy el primer paso, Khalid alzo la mirada y su vista conecto con la mía, en cuanto nuestras miradas se conectaron, todo el lugar cambio por completo, ahora estaba en lo que pensé que era un bosque después de sufrir un incendio todo estaba quemado y a la distancia podía ver cuerpos tirados.

De repente escuche unos sollozos, cuando volteo al lugar donde provenían, veo a Khalid con la misma mujer con la que estaba riendo hace un rato y ahora la lleva en cargada en sus brazos, inerte y pálida, desde la distancia puedo ver como su vestido lila tiene una gran mancha de sangre y en eso sé que esa mujer soy yo.

De repente todo se volvió oscuro de nuevo, me quede por unos segundo ahí pero nada cambio así que empecé a correr a ver si llegaba a algún lugar, pero nada, estaba empezando a altérame cuando de remete me tropiezo con algo que no veo.

Cuando caigo al piso despierto de golpe, todo había sido una pesadilla, al voltear al lado de la cama veo a Khalid dormido a mi lado y por la ventana entra luz tenuemente lo que hace el cuarto no esté tan oscuro.

—¿Estas bien? — me pregunta Khalid también sentándose en la cama.  —Estas empapada en sudor. — me dice poniendo su mano en mi espalda.

—Yo… estoy bien, solo que soñé, con algo del pasado creo… pero esta vez era diferente, esta vez yo era solo una observadora no era nada como las cosas que había soñado. —

—Tranquila, todo está bien, ahora solo son sueños, ya nada ni nada puede hacerte daño. — me dice dándome un beso en la frente y abrazándome fuertemente, yo me acomode entre sus brazos y los dos volvimos a recostarnos.

……………………..

A la mañana siguiente me desperté y  aún estaba en los brazos de Khalid, pero él ya estaba despierto con su teléfono en la mano.

—Buenos días. — le digo con una sonrisa en la cara.

—Hola, buenos días. — me dice dándome un beso en la frente.

—Tienes una manía con darme besos en la frente ¿verdad?. —

—Si, en realidad quiero besarte en todas partes, pero creo que eso sería muy excesivo… por el momento. — Yo no dije nada solo lo vi fijamente mientras sentía un calor subiendo por mi cara.   

—Bueno, yo ya me tengo que ir a trabajar. — le digo saliendo de sus brazos, pero siento de inmediato to la falta de su calor.

—¿Y si no vas?, Y te quedas conmigo todo el día. —

—No puedo hacer eso, a pesar de que es una consulta privada, ya tengo una responsabilidad con mis pacientes, pero si alguien me contrata a tiempo completo en su gran hotel para ser terapeuta de sus pobres empleados sobrenaturales, puedo pensar en que acabando con los pacientes que tengo ya no acepte a nadie más. — le dije con la expresión más seria que pude, pero no pude evitar una risa se me escapara al ver su expresión.  —Era brom… —

—Acepto. — me dice seriamente, pero puedo ver un inusual brillo en sus ojos.

—Pero era broma, no lo decía en serio. —

—Yo no lo tome como una broma. Lo siento debes cumplir,  hiciste un trato. —

—Pero… bueno lo pensare, aunque en realidad no quiero dejar mi consulta. —