Capítulo 28. Fansign en México.

Anya.

–Entonces, ¿a qué hora y cómo será este evento? –pregunté curiosa, observando los alrededores del auditorio donde nos encontrábamos.

–La disquera decidió hacer un fansign aquí, para que pudiéramos convivir con las ARMYs mexicanas –respondió Hoseok, muy emocionado por este evento.

–¿Y cómo es que ellas se enteraron? Digo, es que no sé cómo funciona todo esto.

–Fácil, lo publicamos por Twitter y Facebook, aunque esta vez decidimos hacerlo abierto y que trajeran ya sea el álbum o alguna otra cosa que quieran que se firme –explicó Namjoon, pasando una mano por su cabello –. De igual modo, vamos a dar una pequeña introducción cuando estemos todos.

–Vaya, son muy listos.

–Sí, además, será su prueba de fuego para ver si las ARMYS aceptan su relación –escuchó decir a Yoongi con burla.

Me reí de su comentario, sintiendo a JungKook acercarse más a mí, rodeando mis hombros con su brazo.

–Creo que les agradará mucho, es imposible no quererla –dice JungKook, haciéndome reír mas.

– ¡Momento AnKook! –exclamó Hoseok con emoción, como cada vez que hacíamos o decíamos algo romántico, según él.

–Mejor vamos a arreglarnos, en unos diez minutos dejarán pasar a las ARMYS, hay que estar preparados –sugirió Jimin, caminando hacia la parte trasera con los demás, mientras JungKook y yo íbamos más atrás.

–¿Estas nerviosa? –me preguntó, tomando mi mano y entrelazan nuestros dedos.

–Un poco, pero estaré feliz de ver todo desde un lugar apartado, creo que aún no lidió bien con los eventos concurridos.

–Lo sé, por eso les dije que no te incluyeran del todo, no quiero que te agobies.

–Uh, JungKookie velando por mi seguridad –canturreé burlona, haciéndolo reír antes de encararme.

–Yo siempre voy a hacer eso.

–Siempre suena como a mucho tiempo.

–Pues es el tiempo exacto que quiero estar contigo –dejó en claro, besando mi frente.

–¿Cómo puedes ser dulce y apasionado? No es una combinación muy normal.

–Tampoco ser tierna y atrevida, pero no te confíes tanto de mi dulzura, tú sabes que no siempre son dulce –susurró, mirándome fijamente a los ojos.

–Lo sé y aun no me acostumbró a eso.

–Yo sé que lo harás –murmuró, besando mi oreja, haciéndome estremecer –. Vamos con los demás, antes de que piensen que fuimos a escondernos – sugirió, llevándome con los demás.

Lo admito, aun no me acostumbró a ver esas facetas de JungKook, pero me encanta que me sorprenda, me encanta que sea como es conmigo, porque eso me hace sentir segura de mostrarme tal cual soy, con mis imperfecciones y defectos que a él parecen no importarle, lo que hace que cada día lo amé más y me amé más a mí misma, algo loco, pero es así cada día.

♫♫♫♫♫

Jamás he estado en un evento así, pero admito que la realidad es mejor que la expectativa. Hay como unas quinientas chicas aquí adentro, y creo que hasta estoy exagerando, pero son tantas que me sorprende.

Cuando saludamos a la audiencia y se explicaron las reglas, las chicas no dejaban de gritar el nombre de BTS e incluso el mío, lo que me hizo sentir algo extraño en mi estómago, pero lo dejé pasar. Después, ellos se fueron a sentar en la larga mesa donde estarían firmando y conviviendo con los ARMYS, mientras observaba todo con una sonrisa.

Algo que me hacía reír era ver a las chicas sonrojarse, llorar y quedarse sin habla ante ellos, creo que hasta se sorprendieron de escucharlos hablar español sin ninguna vacilación o problema, haciéndome sentir bastante orgullosa al ser una buena profesora y enseñarles ese idioma. Era bastante genial saber que ya tenían otra manera de comunicarse con sus fans.

Regresé mi mirada hacia los asientos donde varias chicas y unos cuantos chicos esperaban su turno, cuando unos pequeños brazos me hacían señas, para llamar mi atención. Con una sonrisa me levanté de mi asiento, caminando hacia la pequeña fila, encontrándome al pequeño Esteban, que me observaba muy emocionado.

–Hola Esteban, ¿estas divirtiéndote? –pregunté, agachándome a su altura.

–Sí, estoy muy emocionado –respondió, dando un par de saltos.

–Me alegra mucho –acaricié su cabeza, mirando a los alrededores –. ¿Y tu mamá?

–Tuvo que irse antes, tenía una emergencia. Dijo que regresaría por mi más tarde, pero…

–¿Qué?

–Es que me da pena pasar solito y quisiera que me acompañará –murmuró apenado, hasta sus mejillas estaban rojas, haciéndome reír, tomándole la mano.

–De acuerdo, pasaré contigo, no te preocupes –acepté, caminando a su lado, para ir hacia Taehyung, quien era el primero.

–Hola Tae, ¿qué tal todo? –pregunté, arrodillándome frente a la larga mesa.

–Todo muy bien, pero veo que tienes muy buena compañía –respondió con una sonrisa, observando a un muy sonrojado Esteban.