|N o t i c i a I n e s p e r a d a|

═══════ ≪ •❈• ≫ ═══════

Jace

Me remuevo en mi lugar, claramente incómodo, es obvio que no soy bienvenido aquí, lo sé de antemano, pero aun así vine, siento la mirada de todos los chicos puestas en mí, seguro y me odian, sé que soy un gran imbécil.

Siento mi ojo palpitar, arde demasiado, al igual que mi mandíbula y otros músculos, ayer recibí una paliza, no hice nada para defenderme, después de todo, lo merecía, algo capta mi atención, giro mi rostro para encontrarme a la pequeña copia de Katherine, si de algo estoy seguro es que Charlotte es idéntica a su hermana mayor, lo único que las diferencia es su estatura y el corte de cabello.

— ¿Qué haces aquí? — Levanto mi mirada de mis manos y la posó en ella, un suspiro cansado sale de mis labios.

— Yo... sentí que era lo correcto, debo disculparme con ella, fui un gran idiota y.... es mi culpa... — Mis manos viajan a mi rostro, tapándolo de su vista.

— Supe lo que le hiciste a Katherine. — Murmura, pero se nota tranquila, demasiado serena y eso me perturba, estoy seguro que si le hubiera hecho eso a ella, su hermana mayor ya me hubiera matado. — Se lo que piensas, no soy ella, sí, somos muy parecidas físicamente pero no soy Katherine, soy Charlotte Evans y, siendo yo, sé que ella te necesitaba en ese momento...

— Chicle, aléjate de él. — Escucho una voz a sus espaldas, los ojos oscuros de Jorge me miran como si me quisiera matar en este preciso instante. Cuando sus ojos se posan em Charlotte su mirada se relaja. La menor se gira a él y hace una seña, el mayor asiente y regresa con los demás.

— Te necesitaba y quisiste jugar con ella, algo que siendo sincera, es un acto que demuestra los valores que tienes. — hace una pequeña pausa antes de continuar. — No justificare los actos de mi hermana, ella lo hizo, sí, pero nunca con alguien que estuviera en su situación, casa que tú, no hiciste. Y, no, no quiero escucharte decir que estabas enamorado de Lea y por ella lo hiciste, eso es patético. Pero, no intentes engañarte, no eres el centro del universo, ella no está así por ti, ella no llora por idiotas, mucho menos uno de tu calibre.

» Esto, por lo que planeabas hacer. — Eleva su mano derecha para darme de lleno en la mejilla izquierda, me arde como el infierno, aún más porque fue ahí donde Seth me golpeó ayer. — Y esta, por compararnos — Golpea nuevamente antes de comenzar a caminar hacia donde se encuentran los demás.

Sus palabras me dejaron con un sabor agridulce en la boca, tiene razón, en cada palabra que salió de su boca, ella no es Katherine y nunca lo será.

Charlotte tiene el don de herir a la gente con palabras, sabe exactamente qué decir, te dice todo en la cara, tal y como son, sin meter dramas de por medio.

Y de una forma u otra, sé que me está echando del lugar, pero es demasiado sutil, lastimosamente para mí, mi presencia les es molesta e incómoda.

«¿Pero ¿quién dejo que le endulzaran el oído?» Escucho a la molesta voz en mi cabeza, niego un poco para levantarme de mi asiento y caminar a la salida, siento todas las miradas puestas en mí y eso me incomoda aún más.

El frio aire de septiembre me recibe de lleno, la sudadera negra que me envuelve es lo suficientemente gruesa para no comenzar a temblar, doy una mirada sobre mi hombro, sintiéndome impotente.

Parecen una familia, una gran familia preocupada por uno de los suyos y, por mi idiotez, perdí eso, perdí la oportunidad de tener una segunda familia.

Tamara

— ¿Qué hacia ese idiota aquí y que le dijiste? — Musito, mis manos apretando la tela de mi pantalón, Charlotte se fue sin decir nada y unos pocos minutos después vemos al pelirrojo salir del hospital, se veía demasiado alterado.

Vete a saber qué fue lo que la morena dijo, pero estoy orgullosa de ella, es una pequeña patea traseros.

— Solo le dije la verdad. — Se encaje de hombros restándole importancia, siento como algo comienza a vibrar en mi trasero, saco el celular de mi bolsillo trasero, es mi madre.

«Diles a tus amigos que vengan a desayunar, se fueron demasiado temprano hoy, la pequeña sigue dormida, espero y tengan avances»

Le respondo de manera breve y rápida.

"Vamos en un rato más mama, los mellizos van a entrar a ver a su hermana, después de eso iremos a casa"

Tecleo un mensaje más antes de bloquear mi celular, miro a James de reojo, tienen su mirada puesta en la puerta de la habitación donde se encuentra Katherine, es demasiado doloroso para todos, ella es mi mejor amiga, la aprecio demasiado, todos lo hacemos en realidad.

— ¿Familiares de la señorita Evans? — Miro a la enfermera frente a nosotros, todos levantamos la mano, asiente y revisa la carpeta que tiene entre sus manos. — La señorita está estable, el riego ya pasó y creo que eso ya lo saben, todo depende de ella, pueden pasar a verla.

Los menores prácticamente corren a la habitación de su hermana mayor, me encanta la relación tan unida que tienen, siempre me gustó la idea de tener un hermano, pero para mí mala suerte soy hija única, tal vez por eso es que siempre intento acaparar a Sofie.

— Mamá dice que vallamos a desayunar. — Informo, Víctor asiente mientras Jorge sonríe hacia la pantalla de su celular, no teclea nada, solo lee, este lleva unos días actuando extraño.

— Esperemos a que los enanos terminen de hablar con Katherine para ir. — Murmura Seth soltando un bostezo, provocando que repita su acción, sé que esta igual de preocupado que yo, en las noches apenas y logro conciliar el sueño.

— ¿Qué hará Lina para desayunar? Veras que tengo un hambre de perros.

— Veras, Seth, que tú no estás invitado. — Respondo con una sonrisa en mis labios.

— Lina me adora, claro que me invitaría, ¡Soy como su hijo favorito! — Dice indignado, una verdadera lástima no poder contestar a eso, mi madre adora a Seth.