Me desperté a la mañana siguiente por el ruido que había en la cocina. Me imaginé que era Jack con hambre, tal vez recién volvía. Revisé mi teléfono y eran las diez de la mañana.
Tomé mi bata y decidí bajar para ver porque se le caían todas las ollas.
—Jack— Lo llamé mientras bajaba las escaleras. No lo veía en la cocina. ¿Dónde estaba?
—Estoy aquí, estaba buscando una olla para hacer huevos revueltos, ¿Quieres?— Yo ni nadie se podía negar a huevos revueltos y a un hombre cocinando. Asentí con la cabeza y lo ayudé a preparar todo.
—¿Cómo te fue ayer con la chica del bar?
—Oh, muy bien, pero sabes, no terminó en nada porque vino su jefe, quien era su padre y bueno me fui.
—Cómo es que te asustan tanto los padres. ¿Cómo hacías con los padres de Paris?
—Diana el padre de Paris no es nada comparable con la madre, esa mujer sí que me asustó. Pero bueno, era un pueblo chico, ya sabes— En los pueblos como el nuestro, el chisme y los apellidos corren rápido, todos se conocían con todos. Para algunos eso era bueno, yo lo veía mal.
Pusimos todo en la mesa. Además de los huevos revueltos, hicimos tostadas con palta. Me encantaba esa mezcla. Corté manzana, le serví café a Jack sin nada. Él lo tomaba solo y fuerte.
Jack me comentó que, cuando había subido para la habitación, encontró a nuestra manager, que quería hablar con todos nosotros y que teníamos que ensayar. Pero el ensayo y la reunión eran tarde lo cual nos dejaba sin tiempo para dormir. Cuando terminamos todo juntamos y más tarde lo lavaríamos, o tal vez no.
Me fui a bañar. Fue un baño rápido, no preparé la bañera ni nada, estaba muy cansada, solo me quería acostar. Como había desayunado me podía saltar el almuerzo y dormir mucho más. La reunión era a la tarde, lo cual significaba más tiempo para dormir.
Me desperté al horario justo para la reunión, me puse una camiseta blanca con una campera negra, mis jean negros y una zapatillas blancas, me planché un poco el pelo. Me estaba preparando porque Ester nos dijo que vayamos a un comedor para hablar. Bajé y Jack ya estaba cambiado con una remera roja y unos pantalones cortos blancos.
—¿Estás lista?
—Si, vamos antes de que se nos haga tarde, siempre somos los últimos según ella— Jack río y cerró la puerta detrás de mí. Bajamos, encontrando a toda la banda para marcharnos. Hoy le tocaba manejar a Jack, así que todos íbamos tranquilos.
Cuando llegamos al restaurante, que era muy lujoso para solo tomar algo, encontramos a Ester. Nos dimos cuenta de que era un horario bueno para que la gente tome algo, pero sabíamos que lo habían cerrado por nuestra presencia.
— Por fin llegaron— Ester subió la vista de su celular.
—Si, y llegamos a horario— Lu se sentó en la silla del frente que tenía Ester. A ella le encantaba llevarle la contra, solo le gustaba cuando se enojaba.
—Si, llegaron a horario. Raro pero cierto.
—¿Por qué cerraron el lugar? ¿No te parece exagerado?— No quise llevarla la contraria como Lu, pero si me parecía muy exagerado.
—Claro que no Diana, algunos fans se ponen como locos con su sola respiración, no quiero líos y menos en este restaurante tan lindo— Tenía razón, el restaurante era muy lindo y parecía nuevo, tal vez no quería problemas.
—Bien los llame para anunciarles que mañana tenemos una entrevista con "Buenos Días Boston" van hablar un poco del nuevo álbum, las nuevas canciones, digan que no saben cuando son las vacaciones, y si, preguntan no lo nombren. De seguro van a preguntar por el nombre de la banda, eso queda en ustedes si contestar o no.
—Ya sabes que nunca lo contestamos— Jack se estaba refregando la cara, estaba cansado de siempre la misma pregunta, todos lo estábamos.
—Lo se, pero ellos no, o si y solo quieren insistir, eso queda en ustedes como siempre, lo único que les pido es responsabilidad para llegar a horario.
Ester se levantó dando por finalizada la pequeña reunión que tuvimos, nos dijo que teníamos una hora más antes que el restaurante abriera si queríamos tomar algo.
—¿Por qué todos hacen la misma pregunta? Hay más preguntas interesantes para hacer.
—Si Skay lo sabemos, pero la verdad prefiero esa, y no ¿Y ustedes cuando se acostaron?— Lu puso voz de locutora, todos reímos ante la imitación de periodista. Si no era la pregunta de porque no llamábamos Uno de los dos era si yo y Jack tuvimos algo. Era todo ridículo pero atraía gente.
Cuando terminamos todo, ya casi estaba anocheciendo, Jack me dijo de ir al hotel y capaz terminar la canción que veníamos componiendo. Llegamos y busqué rápido mi cuaderno, escuche que abajo sonaba mi teléfono pero no corrí para atenderlo, no encontraba el cuaderno.
Cuando lo encontré me cambié de ropa por una más cómoda, baje y vi que mi mamá me había dejado tres llamadas perdidas, era raro ella jamás insistía tanto. Llamé de nuevo y le dije a Jack en susurro que llamaba a mi madre.
Nos sentamos en la mesa antes de ir al piano y tomar la guitarra, mi mama en tercer tono atendió.
—Hola cariño .
—Hola mama, disculpa que no te atendí es que estaba en el cuarto y mi teléfono abajo.
—Claro cariño, no hay problema, solo..— La interrumpí rápido.
—Sabes no me dijiste nada del show ¿No te gusto?— Mi mamá estaba en el altavoz y Jack río cuando interrumpí a mi mama con las preguntas, yo solía hacer eso cuando me sentía insegura.
—Oh no hija, tal vez me olvide, acá las cosas están un poco revueltas.
—Lo sé, pero ¿Te gustó? ¿O no lo viste? Sabes que puedes ser sincera conmigo, solo dime que no te gusto o que solo no lo viste.
—Hija—La voz de ella subió de tono.
—Ya sé, fue la canción nueva. Si fue eso, no te gusto.
—Diana hija basta, no vi el show está bien, acá pasó algo más grande y tienes que escucharlo por favor.
—Si, dime ¿Qué pasó?
—Hija, Damián se comprometió con Paris la ex novia de Jack— Escuche como el cuaderno de canciones se caía, tenía un pequeño zumbido en el odio porque no escuchaba nada, mi vista se nublo.