Media de cada doce noches

Es viernes y vienes a mi mente una vez más.

"Caray, como me gustaría que estuviera aquí", es lo que suelo pensar.

¿Porque mi mente se empeña en evocar?

Estoy mejor desde aquí y como te lo dije la última vez que te vi, no volvería a ti.

Estoy en mi mejor etapa de independencia en muchos aspectos que no sabía antes hacer, pero por el contrario el que se va volviendo dependiente parece ser es mi corazón.

A veces te pienso media de cada doce noches, sé que está bastante mal porque tú no tienes la culpa de todas aquellas veces en las que cree mil planes a tu lado...

Pero como me haces falta cuando siento que todo esto me ahoga y ya no puedo

Supongo que fui acoplándome a tu forma de ver la vida porque antes de ti no existía nadie en mis días y aunque las reglas dicen que uno no debe cambiar por alguien, en mi caso ni siquiera sabía que era lo que quería hacer después de los dieciséis. ¿Cómo no encontrarme al estar contigo?

Me abriste panoramas, como quien dice por ahí fuiste el detonante de mi mente, más que de mi corazón.

Creo que es por ello que siento la necesidad de con mis letras llamarte...