Vamos dilo de nuevo. Mírame a los ojos con esa rabia que se desborda sin piedad, mírame y repítelo. Repítelo una y otra vez hasta que te sangren los labios y me lloren los ojos. Dilo de nuevo tan fuerte como puedas, grítame en mi cara lo mucho que me desprecias y lo feliz que serias sin mi existencia, dime que me odias, que soy una ridícula. Que lo que siento es drama y que este coraje es mi manera de que voltees verme. Anda y dímelo, grítalo con todo el aire que puedan capturar tus pulmones. ¿Soy una estúpida no es así? ¿No es lo que piensas? ¿No es lo que todos piensan? Dime que nadie me quiere, que nadie me querrá, que soy una inmadura, que no pienso las cosas, que a nadie le agrado, vamos exprésame el peso que represento para ti. insúltame una y otra vez hasta que te quedes sin voz. Dame tu mejor tiro, mátame de todas las maneras que conozcas, y luego inventa nuevas. Dímelo. Dímelo de nuevo y no te atrevas a arrepentirte, rómpeme con tus palabras, enciérrame y hazme sentir pequeña, dime que no valgo nada, recuérdame porque odio el mundo, dime que todo lo malo radica en mí, que yo soy el problema, que yo soy todo lo malo. Y ahora dime lo dramática que soy, que no valgo tanto, que no importo tanto. Dime que no sé como dimensionar las cosas y que las saco de proporción. No me dejes defenderme hasta que en mi garganta el nudo sea demasiado grande. Vamos hazme llorar sangre, taladra mi cabeza con tus palabras, ríete sobre mi cadáver, y disfruta mis lágrimas, siéntete victorioso de haber tocado todos mis nervios. Tírame. Escúpeme. Despréciame y dime cuanto lo disfrutas. Odio cuando me odias, cuando sacas lo peor de ti, y me haces sentir tan vulnerable, tan sola y triste, tan pequeña, tan insignificante. No soy tan fuete como piensas que soy. Sóplame con odio y yo lo resentiré. Caeré al vacío, y me cuesta salir de ahí. No lo soy. No soy lo que piensas que soy, ni lo que creo que soy, no soy como desearías que fuera, y no soy como me percibes, soy una farsa, una mentira, no soy y no existo. Me doy nauseas. Mírame. Solo mírame. Ve como soy, como me caigo y no puedo ni levantarme, soy tan inútil que es sorprendente que haya llegado a este punto.