Lo que tú no pudiste cumplir

Capítulo 10

Ellie

—¿Qué te pasó? —me dice preocupado—. ¿Te hicieron algo, Ellie? —Me quedo en silencio—. Puedes confiar en mí.

—Es que el chico con el que estaba hablando salía con otra chica —digo en voz baja.

—Ven —y le doy un abrazo—. Ellie, si ese chico no ve lo increíble que eres, es que no es para ti. Ya va a llegar alguien que te va a querer con todo su corazón y, cada día que estés junto a él, no va a parar de decir cosas buenas de ti. Y si alguien te hace daño, él iría corriendo hacia dónde estás tú. Vas a ser la prioridad de ese chico y te va a tratar como una reina, porque ese es el trato que te mereces, Ellie.

—No sabía que eras un romántico, Fran.

—Bueno, no soy muy romántico, pero eso es lo que pienso cada vez que veo a tu madre. Y espero que no dejes que cualquier persona te rompa el corazón. ¿Entendido?

—Sí... gracias.

—Vamos a tomar un helado para que ya no estés triste. En cinco minutos salimos.

Despierto con un nudo en la garganta.

Veo que todavía es de noche.

Son las 3:44.

Me levanto para ir a la cocina a por un vaso de agua y escucho a mi padre desde su habitación. Lo más correcto sería ir a la cocina, pero me voy directamente hacia donde está su cuarto. La puerta está entreabierta y escucho que está hablando con alguien y dice:

—No sé por qué se le ocurrió esa pregunta... No creo que sospeche... Tranquila, ella no sabe nada de lo nuestro... Nos juntamos mañana a las 3:30 en el restaurante de siempre —y cuelga.

Veo que viene hacia mí.

Corro en silencio lo más rápido posible hacia la cocina a buscar el vaso de agua. Mientras estoy ahí, me quedo un rato pensando en por qué mi padre me oculta algo o, mejor dicho, a alguien.

Quizás es que todavía no confía en mí.

Porque te recuerdo que, si tu madre no hubiera muerto, no te hubieras ido con él. Ni siquiera le importas a tu padre.

No, seguro ya me lo contará, digo para mí misma.

Me voy para mi cuarto y me topo con mi papá.

—Ellie, ¿qué haces despierta tan tarde?

—Ehhh... es que tenía sed y fui a la cocina. ¿Y tú qué haces despierto?

—Estaba terminando de trabajar. Buenas noches.

—Buenas noches.

Intento dormir, pero no puedo descansar ni un poco.

Alex

—¿Cómo durmieron? —pregunta mi padre.

—Bien —respondemos mis hermanos y yo al mismo tiempo.

—¿Y mi mamá? —pregunta Logan.

—No pasó buena noche —dice mi padre—. Apúrense chicos, ya se nos está haciendo tarde.

—¿Supieron? —dice Jack de repente.

—¿Qué cosa? —preguntó

—Dicen que Jenn y Esteban andan saliendo, miren —y nos muestra una foto de ellos dos.

—Eso no dice nada —habla Logan con un tono un poco enojado.

—¿Estás celoso? —pregunto yo, casi echándome a reír.

—¿Qué dices? Yo, ¿celoso de Esteban? Jamás. Yo soy mucho mejor que él.

—Entonces avísale a tu cara, hermanito —bromea Jack.

—Oye, ¿y sabes por qué Ellie se fue de la fiesta? —pregunto sigilosamente para que no se note mi urgencia de saber la razón.

—Mmmmm, tal vezzz—dice en un tono de broma.

—¿Me lo dirías? —digo mucho más rápido.

—¿Y qué gano yo con eso?

—Mi amor.

—Yo ya tengo tu amor, hermanito —dice eso y se va.

—¿Por qué no se lo preguntas a Ellie? —habla Logan, un poco más calmado que antes.

—Pues porque no me habla.

—Pues háblale tú entonces, tonto.

—¿Y si me ignora?

—Al menos lo intentaste. ¿O prefieres que las cosas sigan así entre ustedes dos?

—Creo que tienes razón.

—Siempre —y se va para afuera.

Ellie

—Ellie, no sabes lo que pasó —dice Zoe emocionadísima.

—¿Qué pasó? —preguntó con mi curiosidad al cien por ciento

—Subieron a Jenn y a Esteban a la página y Logan se puso celoso —me cuenta muriéndose de la risa.

—Siii, la vi —le digo, contagiándome de la risa de mi amiga.

—Y lo mejor es que logan se pueso celoso pero lo que el no sabia es que Esteban es gay —me dice, riéndose cada vez más, haciendo que las dos nos riamos más fuerte.

—Oye, vamos tarde a Anatomía —le digo, calmando un poco mi risa.

—Me va a matar la profesora si llego otra vez tarde —y nos vamos corriendo.

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—Qué rico almuerzo —dice Jenn sarcásticamente debido a que hay legumbres.

—Chicas, creo que mi padre está saliendo con alguien.

—¿Qué? ¿Y cómo es? —dice Jenn sin poder creerlo.

—¿Tiene redes sociales? —pregunta Zoe.

—Es que él no me lo ha dicho, pero yo creo que sí está saliendo con alguien. Al llegar a la casa el otro día encontré un pañuelo blanco, que no es mío y menos de mi papá, y cuando estábamos cenando le pregunté y se puso muy nervioso. Esa misma noche lo escuché hablando con alguien, diciendo que yo no sospechaba nada,y cosas así.

—Ojo de loca no se equivoca, amiga —dice Zoe emocionadísima por la historia.

—Hoy se van a juntar a las 3:30 en un restaurante, y creo que es el favorito de mi padre, ese de las hamburguesas.

—¿Y vas a ir? —pregunta Jenn.

—Obvio —digo.

—Bueno, cualquier cosa nos avisas. Estaremos pendientes del teléfono —dice Zoe.

—¿Y tú cómo estás con Logan por esto de la foto? —preguntó

—Al inicio se puso celoso y yo me puse a reír, entonces le conté todo.

—Bueno chicas, ya vámonos, que se nos hace tarde.

—¿Por qué me metí a atletismo? —me quejo.

—Tampoco es tan terrible —dice Jenn.

—Para ti no será terrible, pero para nosotras es una tortura —exagera Zoe.

—No seas exagerada.