20. Confesiones

Después de esa pequeña conversación decidí quedarme en pijama y seguir viendo mi serie, claro eso fue hasta que Danelle me llamo para hablarme sobre lo anterior. Resulta que a ella si le habían dado permiso y estaba demasiado emocionada por ello, y se emocionó más cuando me conto sobre Cameron y de cómo habían formalizado su relación... o algo así.

Habían tenido una cita ayer (después de tener millones) y entre esas él le confeso que le gustaba más que solo para follar, ella se le sincero también, pero ninguno dijo más nada sobre el tema, se quedaron así.

—¿Tu qué crees que signifique? — pregunto al otro lado de la línea— ¿Se supone que somos novios o qué?

Me quede pensando un par de segundos.

—¿Tú quieres serlo?

—No te rías— advirtió. No dije nada y ella lo tomo como un "Okey"— Me encantaría

Entonces ahogue una risa.

—Quien lo diría— respondí burlona— Danelle enamorada

—Te odio—escupió— ¿Y tú? Te has hecho la loca y no me has contando nada de nada.

—Tú has estado con Came...

—Oh no— se adelantó a decir interrumpiéndome por completo—No vayas a usar eso como excusa, sabes muy bien que si querías hablar de algo me decías y ya está. Un chico no va a quitar el tiempo con mi amiga.

Una pequeña sonrisa se dibujó en mi rostro. Danelle podía llegar a ser tan tierna.

—Tampoco preguntaste— me defendí aunque sabía que nada de eso era su culpa

—Violett Mason— dijo mi nombre de manera seria— ¿Que tienes que contarme?

Entonces cuando estuve a punto de suspirar derrotada cuando mi timbre sonó y la oí gruñir del otro lado.

—Salvada por la campana. Mándale saludos a Javier de mi parte.

—Lo hare— asegure lanzándole un beso— Te amo.

Cuando termine de escuchar el "yo más", colgué mi teléfono y lo tire sobre la cama bajando lo más rápido que pude.

Sonreí al ver al castaño en el marco de la puerta. Había sido Candace quien había abierto. Gire mi cabeza para ver a mi madre sobre la mesa usando su laptop y mi padre a su lado revisando algunos papeles de su trabajo.

Agite mi mano en forma de saludo.

—¡Jasper! — chillo la menor apenas se percató que era él. Él le sonrió amable y ella no tardo para saltar en sus brazos.

Fue fortuna, que el la atrapara en el aire sin mucho esfuerzo

Decidí acércame hasta la escena.

—¿Qué tal? — salude tranquila posándome al lado de mi hermana

—¿Y tú, muñequita?

Termine sonrojándome, ya me había acostumbrado a ese torpe apodo, pero nunca lo había dicho frente a mi familia, claramente era un poco vergonzoso

—Y… esa es mi salida— comento Cands dando media vuelta y yéndose hasta el sofá

—Me adora— aseguro el chico— ¿Cierto? — se giró a ver a la rubia quien le sonrió mostrando todos sus dientes de leche. Asintió repetidas veces abrazándolo por el cuello.

—¡Jasper hijo! — hablo mi padre desde la mesa— pasa, pasa.

Me hice a un lado para dejarlo entrar. Dio paso dentro de la casa dejando a Danna sobre el suelo.

—Permiso— dijo en vos baja al mismo tiempo que sacudía sus zapatos sobre la alfombra.

Achique mis ojos intentando no reír.

—No sabía que vendrías— admitió mi papa levantándose de la silla y caminando hasta nosotros— Vay no nos dijo nada— me miro unos segundos hasta que se volvió hasta el chico para darle un apretón de manos.

—Señor Mason— le sonrió siendo lo más dulce posible, pero su cara se hizo una mueca cuando mi papa lo apretó muy fuerte.

Con el rabillo del ojo pude ver como Ivan apretaba sus labios para no reírse.

Negue con mi cabeza ante la situación, pensé que ya dejaría ese jueguito.

—Yo le invite— aclare interponiéndome entre ellos para que así él lo soltase—. Mama dijo que quería conocerlo

—Claro— se unió Delilah desde la mesa con una sonrisa en su rostro—Me moría por conocerte— camino hasta el para así verlo mejor— Vay suele hablar mucho de ti.

Le aseguro, aunque eso fuese mentira. Tuve que lanzarle una mirada que ella ignoro.

De pronto note como mi compañero se sonrojaba haciéndome subir una ceja.

—Es un placer señora Mason.

—Oh no, eso es solo con el— bromeo señalando a su a esposo— dime Delilah, por favor.

Y asi fue como pronto se creó una conversación entres mis padres y el chico a mi lado. Estábamos los cuatro sobre la mesa hablando de varias cosas. Al principio ellos solo le hacian preguntas típicas de padres, la cuales el respondía tranquilo.

—Entonces— hable llamando su atención de los tres— Papi, mami creo que ya han hablado demasiado ¿Que hay de la playa?

Ambos rieron en mi cara ignorándome completamente

—¿Va a ir un adulto? — pregunto mama mirándonos.

—Si, y yo soy uno de varios— aseguro el chico.

Mi mama le sonrió con ternura ante su respuesta

—Claro... ¿Y no habrá uno mayor de treinta y cinco?

—Me temo que no— se encogió de hombros— pero es como tenerlo. Mis amigos y yo somos muy maduros e incluyo a su hija.

Vaya… Realmente me gustaba cuando me decían madura.

—¿Y los dueños de la casa quiénes son? —pregunto papa.

—Amigos de Jasper— solté con rapidez

-— ¿Y podríamos hablar con ellos?

—Claro, los llamare

Mama y papa asintieron. El castaño saco su celular, tecleo un par de veces y puso el tono es alta voz dejando así el aparato en el medio la mesa.

—Mierda, Jasper que bueno que llamas—escuche la voz de Marcus. Aprete los labios ante su palabrota —Danos tu opinión, ¿Entre Cameron y yo quien crees que la se ha jalad...

—¡Marc! — le interrumpió el castaño sintiendo vergüenza. No quería ni ver la cara que habían puesto los adultos al escuchar aquello— Estoy con los padres de Violett— aclaro apretando los dientes el procesos— Podrías hablar un poco más...

—Eh... claro, lo siento— se le escucho nervioso— idiota— susurro Cameron— ¿Hola?